No me encontraba en manhattan en el momento, cuando recibí una llamada de un numero desconocido y en el fondo, ¿los gritos y el llanto de alguien… Rebecca? ¿Era ella quien lloraba?-quien eres y que quieres?--que quien soy? Unmm… un buen amigo que tiene aquí a tu preciada Rebecca, que como lo sé? Jajaj sé que lo vas a preguntar y no finjas que no sabes quién es, llevo más de dos meses siguiéndoles la pista y se perfectamente que te mueres de amor por esta muchachita, me pareció demasiado cruel y más difícil retener a tu sobrina Briana, asi que me fui por esta.-Que es lo que quieres Paolo---Que imaginas que puedo querer querido Andros?--Sabes que siempre has tenido en tus manos el poder que quiero, por que quieres complicar las cosas?-Y también sabes perfectamente que no te lo daré.--entonces da por perdida esta belleza, tan linda que esta, pero lastima.-no te atrevas a tocarla Paolo Bianco.Si, Paolo era mi primo, obviamente lo que él quería de mí, es el legado familiar, soy me
¿Escuche a Andros a mi lado hablando por teléfono con alguien a quien le decía que… conmigo no?Andros quiere dejarme? ¿Dónde estoy, para empezar?De la nada comienzo a recordar todo lo que paso….-estas bien cariño? ¿Por qué no me hablaste si habías despertado?Andros me saco de mis recuerdos, si amor, desperté hace un momento, pero te vi hablando por celular y no quise molestarte.Que me paso, me duele todo el cuerpo, no recuerdo con claridad, solo que alguien me rapto y luego estaba en una bodega y recibí muchos golpes y no recuerdo más nada hasta ahora.Si cariño, lo siento, perdóname, perdóname no quería que nada te pasara de verdad, perdóname Rebecca tu y por nuestro hijo.Estaba Andros arrodillado a un lado de la cama de hospital, llorando desconsolado pidiéndome perdón por lo que paso y por…. ¿Nuestro hijo?-amor de que hablas, como que nuestro hijo?--el doctor me dijo que perdiste al bebe a causa de los golpes, estabas embarazada.-Que? Andros, estas hablando en serio?Mis o
CAPITULO XASI SE SIENTEUna vez estuvimos listos, salimos a desayunar, de camino a la cafetería donde desayunamos, le escribí a Damiano, no habíamos podido vernos, él estaba fuera de la ciudad, él fue aceptado en la universidad de Canadá, asi que se fue a conocer y empezar a buscar todo para instalarse allá, fue a estudiar derecho, nos hemos mantenido en contacto y está al día de toda la situación, es más, el primero en informarle fue Andros.Llegamos a una hermosa cafetería, al parecer Andros suele frecuentarla, la mesera que nos atendió se ve con mucha confianza y por la forma en que le hablo, nos sentamos y la mire un poco seria y creo que él lo noto.--esta celosa señorita Rossi?-quien? ¿Yo?- debería? ¿Solo porque esa mesera te mira y te habla con demasiada confianza?-no, como cree señor Andros.Y puse mala cara e intente mirar hacia otro lado, justo cuando ella venia con nuestra orden, Andros me llamo--cariñoY al momento que volteo a verlo, me dio un gran beso--Te amoQued
A la mañana siguiente me levanté muy temprano, desperté a Rebecca, debíamos alistarnos para ir a trabajar, ya me había tomado bastantes días sin trabajar y próximamente debía viajar a Italia por asuntos familiares y otros negocios, aparte debía presentar formalmente a Rebecca con mi familia. --cariño, vamos, arriba, es tu primer día como mi asistente personal oficialmente, aparte te tengo una sorpresa, hay cosas que debes aprender. -amor, 3 minutos más por favor, aún tengo mucho sueño. --dos minutos y te espero en el baño. Todo esto era nuevo, pero me gustaba como se estaba dando todo, tenerla viviendo conmigo era un sueño, aunque no era la manera en que quería hacer todo, pero ya que todo se dio de esta manera, está bien para ambos. Al cabo de los 3 minutos llego Rebecca a la ducha. -ya estoy aquí jefe. Con una risita burlona --asi es y como mi asistente, desde hoy, toma, enjabóname y fíjate mas en el tiempo, llegaste un minuto tarde. -pero que jefe tan gruñón, desde el primer
De vuelta al pent-house de Andros, estábamos realmente cansados después de un día tan largo, al entrar, estaba algo iluminado, me sorprendí, cuando entramos a la sala de estar no podía creer lo que veía, estaba todo decorado con rosas, la mitad rojas y la otra mitad blancas, el ambiente tenía una luz tenue, cuando voltee a mirar a Andros, tenía un sobre en sus manos y un pequeña cajita, por un momento me asuste, querría pedirme matrimonio? --Rebecca Rossi, irían conmigo a Italia? - ah? --sí, que, si quieres ir conmigo, una temporada a Italia, esta vez tengo que estar mucho más que dos meses y quiero que vengas conmigo ya que eres mi secretaria, como mi pareja te quiero conmigo y como mi empleada también te necesito, que dices? -cuánto tiempo? ¿Y que pasara con la universidad? -- puedes tomar tus primeras clases en línea, ya averigüé y si puedes, hay diferentes horarios y podemos acomodarlo por lo de la zona horaria diferente. -unmmm. puedo pensarlo? -sabes, olvídalo no voy a pen
Me encontraba con Rebecca en el avión rumbo a Italia, mas exactamente a la toscana, donde vivo, bueno donde esta el hogar de mis padres y por donde estoy generalmente cuando estoy largas temporadas en Italia. --cariño, despierta --ya casi llegamos -unmm -tan pronto?- --si, en media hora estaremos en Italia Se veía tan hermosa y tierna mientras dormía, que un no puedo creer como me enamore tan perdidamente de ella en menos de nada. Ahora lo único que m preocupa es la reacción de mi madre ante la presencia de Rebecca, nadie en mi familia sabia que la traería conmigo y luego esta ese asunto de que madre me quiere casar son Silvia Bovari, la hija de su gran amiga y socios de papá. Llegamos al aeropuerto de Italia y de inmediato abordamos un jet privado que nos llevo a la toscana, el viaje había sido todo muy largo y cansado, a eso sumarle el cambio de la zona horaria, el jet lag se hizo presente en mi pequeña Rebecca. Afortunadamente cuando llegamos a la mansión Bianco no había nad
Llego el día, era domingo de día familiar en casa de los Bianco, realmente estaba muy nerviosa, desde que llegue su madre no me dio el mejor recibimiento, fue realmente peor de lo que esperaba, pero bueno, habiéndonos ido a la casa de Andros, podríamos estar más tranquilos, o eso pensábamos, no llevábamos ni una semana aquí y ya todo eran rumores, conflictos y discusiones, en las cuales siempre me llevaban por el medio y Andros siempre me defendía y según investigamos, Paolo, el primo de Andros, si, ese miso que mato a nuestro bebé, nos siguió hasta acá y quiere la revancha y eso es algo que Andros y yo no estamos dispuestos a darle, queremos acabar con eso de raíz. ¿Por qué digo que no siguió? Pues por que nadie, excepto sus padres, saben que Andros tiene esta casa. Esta casa en la antigüedad era el refugio de sus antepasados, los Bianco han sido predominantes en la mafia italiana desde tiempos inmemorables. Era una cena demasiado elegante, Andros y yo salimos a comprar ropa para
CAPITULO XV ESA ES MI MUJER Y hay estaba ella, respondiéndole a Silvia de manera educada, pero cortante y haciéndose ver como mi mujer, ame ese momento, me calentó tanto verla tan autoritaria y hablando en el fuck italiano que le sale tan bien. La tome por la cintura mientras hablaba con tal autoridad y mi sonrisa difícil de ocultar, que sé que Silvia lo noto, lo feliz que me veía al lado de Rebecca. -cariño, nos vamos? -con su permiso señorita, mi prometido y yo nos retiramos. Sali de hay junto a Rebecca con una sonrisa victoriosa, no sabía cuan determinada podría ser esta mujer, sin duda alguna, elegí a la mujer correcta. Nos dirigíamos a llevar a cabo nuestro plan referente a mi primo Paolo, fue fácil hacerlo caer en la trampa, en este mundo nadie es leal más que al dinero. Hay estaba, Paolo amarrado a una silla en una bodega abandonada y estábamos dispuestos a llevar este asunto bajo tierra. -buenas seño y señora Di Bianco. -entonces mi amor, aquí esta, a toda tu disposic