Erick entro a la cafetería entre avergonzado y satisfecho, avergonzado por qué hizo todo aquello delante de muchas personas y delante de los que podrían ser su nuevo jefe, sus mejillas tomaban un suave color rosado, pero a la vez no se arrepentida, había logrado defenderse de Omar, y eso es algo que necesitaba hacer.
Omar se podía ir al carajo, sus padres también se podían ir al carajo, no necesitaba de nadie, solo necesitaba de él.
Llamada entrante de War,Contestar Rechazar.
War.Buenos días.Listo para ir a trabajar. 😋He visto que muchos clientes no dejan de verte....—————————————————————
Adrián Alwary.Hola, ¿Qué haces?Quieres tomar un café.——————————————————————————————————————————————————————————————
[Narra Adrián]Me encontraba en la cafetería de mi mejor amigo, Liam, en una mesa observando al chico más lindo que mis ojos algún día vieron, aquel chico que todos los días animo siendo dos personas. El miedo es algo que vive constante en mí, no me siento capacitado para afrontar a Erick, el siento tan perfecto, su piel canela, su cabello ondulado y algo largo, sin olvidar que su sonrisa y ojos son algo que me vuelve demasiado loco. Tal vez War fue m&aa
—Llegas tarde amor — Adrián suspira, mientras intenta volver a respirar con normalidad, cada vez odiaba tener que mentirle a su mejor amigo y novio, cada vez los nudos en su garganta aumentaban al no saber cómo afrontar toda la situación que aumenta en tención.Le sonríe levemente al chico al frente suyo—lo siento, vine lo más rápido que pude — Un beso en la mejilla y entra a aquella casa detrás de Simón.
—Yo... — Adrián mira hacia todos los lados, sin saber qué hacer.No sabe que inventar, no sabe ni que hacer.Maldita sea, todo es tan confuso.—¿Eres Adrián o War?— Adrián podía notar la brusquedad en las palabras de Erick, se escuch
— No, no estoy enojado —Adrián paro su caminar una vez Simón hablo, miro al suelo y susurró.Un solo día había pasado, y ese día estaba dispuesto a corregir sus errores y emendar todas sus deudas.—Lo siento, lo siento mucho. — Susurra mientras sus ojos miran al suelo — Debí decirte