Era frustrante toda esta situación, más si eres una pequeña niña que debería estar viviendo una vida normal. Tuve que fingir que no estaba con mis padres, tampoco con mis hermanitos ante el comandante de la policía solo porque ellos estuvieran bien, todavía no entendía bien el problema de que Álvaro hubiera sido narcotraficante si al final él había hecho cosas buenas por la comunidad. Sentía a Juan Mario más lejano de mí, tal vez por la misma presencia de Ariana que significaba que entre su padre y mi madre nunca más iba a sentirse algo serio.

— ¿Qué piensas de toda esta situación? — Pregunté mientras jugábamos, todavía no había llegado el comandante a nuestra habitación —, Creo que es agotador, para nosotros.

— Un poco, realmente uno quisiera volver a su vida de antes — Respondió encogiendo los hombros, abrí los ojos de la sorpresa —, Pero no a la vida que vivimos con esa bruja si no antes, de que nuestros padres se separaran.

— ¿Extrañas que Elizabeth sea tu madre? Interrogue, pero