Clemente se quedó pensando un momento antes de responderle a Ángel, al parecer estaba a la defensiva y lo menos que él quería en ese momento era decir algo que lo saque de quicio.-Sé muy bien que no es ningún capricho, así como tampoco lo era lo que sentías por Katerin – dijo Clemente recordando muy bien cómo eran las cosas en el pasado cuando Ángel aun amaba a Katerin – es solo que Katerin te correspondía antes y por el hecho de que al regresar lo primero que hiciera fuera invitarte a salir, es evidente que aún sigue interesada.- ¿Crees que Amelia no está interesada en mí? – dijo Ángel con arrogancia, en ese momento él estaba completamente seguro de que Amelia sentía algo por él y no era solo odio.- ¿tú crees que si? – preguntó Clemente mientras se reía con burla – lo siento amigo, pero creo que en lo único que Amelia está interesada es en hacerte pedazos.-Fíjate que me importa muy poco lo que tu piensas, pero yo estoy completamente seguro de que Amelia está enamorada de mí – dij
En cuanto Clemente abrió la puerta se encontró con el hermoso y delicado rostro de Wanda, ella lucía realmente hermosa. Tenía un vestido ajustado al cuerpo de color negro y que le llegaba hasta la mitad de sus muslos, el vestido tenía una sola manga que le llegaba hasta su puño. Ella lucía unos hermosos aretes de diamantes que combinaba a la perfección con su brazalete y su anillo mientras que su cuello lucía desnudo, un detalle que la hacía lucir fresca.Clemente se quedó anonadado ante la gran belleza de Wanda, mientras más él la veía más se sorprendía de lo que ella era capaz de hacerlo sentir. Incluso se estaba preguntando en ese momento por qué en el pasado él no se habia acercado a ella. Wanda se veía completamente diferente cuando salía a una cita que cuando iba al trabajo. En su oficina ella parecía una mujer con carácter y de respeto, inclusive lucía algo mayor que su edad de apenas veinte y cuatro años. Sin embargo, en ese momento ella lucia tan sexi y ardiente que lograba h
Oh – Wanda tomó la taza de café de la mano de Clemente ya que realmente sentía que le estaba haciendo falta – ¿se puede saber por qué hoy es el mejor día de tu vida? Por un momento pensé que ese día fue ayer – Wanda hizo un pequeño puchero fingiendo estar decepcionada.-Es que ayer no me desperté contigo a mi lado – le dijo él mientras se acercaba a ella y dejaba un gran beso en su mejilla – sin embargo, debo admitir que anoche fue la mejor noche, nunca me imaginé que podía ser tan feliz – Clemente no mentía cuando decía esas cosas ya que realmente estaba feliz de estar con ella, sus ojos estaban radiantes por la alegría que sentía y Wanda podía notarlo.Después de eso ambos desayunaron juntos y fue un momento realmente hermoso para los dos. No pasó mucho tiempo para que Wanda se despidiera de él y se marchara, los dos estaban tan felices de estar juntos que no querían separarse el uno del otro.Mientras iba camino a su casa Wanda sintió una gran angustia en su corazón, ella realmente
Amelia saludó a todo el personal con cariño, mientras vivía en la mansión todos la habían tratado con respeto, aunque era una orden de Ángel ella no era mal agradecida.Después de eso ella simplemente fue a su estudio comenzó a recoger cada uno de sus cuadros mientras recordaba el día en que habia pintado a cada uno de ellos. Ella en verdad se sentía nostálgica en ese momento. Estaba realmente confundida ella nunca se habia imaginado que extrañaba lo que habia odiado durante tanto tiempo. mientras más ella recordaba su estadía en la mansión mas la extrañaba, sobre todo los mimos de Ángel. Ella miró cada cuadro recordó el momento con añoranza, lo que en el pasado le habia parecido malo en ese momento le parecía buenoElla se encontró con aquel cuadro que habia ocultado de Ángel desde el principio y se quedó impresionada de lo que habia pintado en aquel entonces. Ella observó cada detalle del cuadro mientras lo recorría con su dedo índice, ella misma estaba impresionada con las finas te
El mesero terminó de servirle y luego se fue, Amelia y Wanda se miraban directamente a los ojos sin saber que más decir. Ambas estaban perplejas por la situación, Wanda no podía entender cómo fue que Amelia se habia convertido en culpable de su propia desdicha y Amelia no podía creer que habia sido tan tonta como para creer en las palabras de Natalia.Ellas se tomaron un tiempo para asimilar lo que estaba pasando en ese momento, hasta que Wanda tuvo que preguntar.-No puedo entender como es que tu eres la culpable de todo lo que te pasó – dijo Wanda tratando de que Amelia le explicara sus últimas palabras.-Mira esto – dijo Amelia mientras le pasaba unos documentos a Wanda, ella quería contarle todo lo que le habia pasado en los últimos meses.- ¿Qué es? – preguntó Wanda mientras la miraba con el entrecejo arrugado, ella tomó los documentos y en cuanto leyó la primera parte se dio cuenta que se trataba de las escrituras de una isla y estaba a nombre de Amelia.-Es un regalo que me dio
Ángel estaba en una reunión de socios con Natalia, Wanda y esteban Mendoza cuando Amelia llegó a industria A y A. en ese momento ella no quería pensarlo más, amaba a Angely quería estar junto a él sin importar los errores que él habia cometido. Al fin Amelia habia comprendido que lo que Ángel hizo lo hizo porque la amaba. Ella estaba tan dispuesta a recuperar a Ángel que decidió ignorar el síndrome de Estocolmo, a ese momento ella estaba completamente segura de que lo que ella sentía era amor. El único síndrome que ella tenia era que estaba enamorada.-Buenas tardes – dijo Amelia cuando su mirada cruzó con la de Keila que estaba sentada en su escritorio tecleando algo en la computadora.-Buenas tarde señorita Amelia - dijo Keila con una sonrisa, ella siempre habia simpatizado con Amelia a pesar de ser la hija de Natalia a quien ella no podía soportar. Además, Keila era la asistente de Ángel y sabia todo lo que habia pasado entre Amelia y su jefe, de ninguna manera se atrevería a no si
Ángel acarició las mejillas de Amelia con suavidad sin dejar de mirarla a los ojos ni siquiera por un momento. Los dos estaban perdidos en su propio mundo donde solo existían los dos y cuanto le gustaba estar ahí donde sus ojos solo puedan verse el uno al otro. Sin embargo, la realidad golpeó sobre ellos cuando el celular de Amelia comenzó a sonar sacándolos del lugar maravilloso donde estaban sumergidos.-Lo lo siento – gagueó Amelia – tengo que responder – dijo ella al percatarse que se trataba de sus abuelos.-Ve – dijo Ángel mientras le brindaba una sonrisa que logró erizar la piel de Amelia, hasta ese momento ella no se habia dado cuenta de lo mucho que le gustaba su sonrisa.-Hola abuelos – dijo Amelia en cuanto descolgó la llamada, ella quería que la llamada terminara y no era porque no quisiera hablar con sus abuelos.-Cariños, tu abuelo y yo sabemos que pasamos la tarde contigo, pero queremos saber si podemos cenar contigo y Wanda esta noche, hay algo importante que queremos
En cuanto Wanda terminó de hablar con Amelia soltó su celular y volvió a los brazos de Clemente quien la esperaba con desespero. Las caricias se intensificaron hasta que ninguno de los dos fue capaz de dominar su propio cuerpo volviéndose presa del deseo. Ellos hicieron el amor un par de veces antes de que ambos salieran de la oficina de Wanda. -Entonces ¿quieres ser mi novia? – le preguntó Clemente cuando ambos llegaron al oscuro establecimiento siendo observados en secreto por los guardias de seguridad quienes acababan de darse cuenta de que Ángel y Amelia no fueron los últimos en salir de la empresa. -Claro que quiero – dijo Wanda mientras pasaba sus brazos por el cuello de Clemente y le dejaba un suave beso en los labios. - ¿Puedo gritarlo al mundo? – preguntó Clemente emocionado – quiero que todos sepan que eres mía. -Puedes – dijo Wanda con una gran sonrisa en sus labios, ella se sentía genuinamente feliz en ese momento, desde que sus padres aún vivían ella no se habia sentid