Tal como había ocurrido para Adrian y para mí, las ceremonias y diferentes pasos para la celebración de la boda habían estado repletas de simbolismos y mucho romance por lo que el día siguiente de llegar, esa misma mañana en la cual hacer el amor con mi ex la noche anterior me había dejado más confundida que garrapata en un peluche me toco ademas como si fuera poco reencontrarme con la familia, para todos era una mezcla de emociones muchos veían nuestra historia de amor fallida e interrumpida por los caprichos de una chiquilla con tristeza y había otro grupo incluyendo los padres de Adela que me odiaban y no deseaban que estuviera allí, pero en definitiva yo fui por Verónica no por ellos.

Adrian y yo éramos los padrino así que era imposible no vernos, por lo que aprovechábamos cada ocasión para regalarnos cada vez que podíamos besos furtivos y como si se tratara de un par de adolescentes hacíamos el amor por los rincones y hasta en el closet de los abrigos, se podía decir que lo ha