Capítulo 34

Me doy una ducha a toda prisa, definitivamente dándole el tiempo justo para que se vista, pero no la voy a dejar huir, ahora si es mía por completo y no tiene marcha atrás, salgo del baño con una sonrisa en mis labios, pero la extraña expresión que veo en el rostro de Sara me paraliza ¿Qué puede haber cambiado en unos minutos como para que ella se vea de esa forma?, me acerco, le voy a preguntar, pero veo mi teléfono en su mano, la pantalla esta encendida y algo que no creí que ella pudiera ver se muestra en ella, el símbolo de Noche de fuego, estoy seguro de que ella lo conoce después de las investigaciones que estuvo haciendo, doy un paso en su dirección y ella retrocede, no puedo creer que esto esté pasando en realidad, a esto me refería con lo que pensaba ayer, en mi vida no puede haber nada constante, es demasiado complicado que la felicidad toque a mi puerta sin hacerme este tipo de cosas, suspiro.

¿Qué sucede? – le pregunto esperando el milagro de que no comprenda n