El príncipe Adrik continuo viendo la película, sin dejar de prestar atención a la princesa Mia, de pronto cae en cuenta al mirarla la nota un poco apagada y triste.

Se queda mirandola, olvidando por completo la película, no entiende que le pasó, recordó que no lo habia acompañado a bañarse, no puede ser que la este haciendo sufrir.

De pronto sintio su dolor, sintio su tristeza, unas lágrimas asomaron a sus hermosos ojos verdes, Mía sigue dándole las espaldas, la ve quedarse dormida, de sus labios salir un sollozo.

La quiso abrazar, se quedo mirando con tristeza, reprochando su actitud hacia ella, recordó todo lo que viene haciendo desde la tarde del dia anterior, hasta esa mañana, incluso que habia olvidado a propósito su fresa.

Se dijo mil veces, es mi culpa que este tan consentida, no puedo reprocharle nada, si fui yo quien la ha pasado consintiendo toda nuestra vida.

Salio de la habitación, dejándola dormida, regreso a la cocina, recordó que no le habia preparado la ensalada de