Zashirah, despertó muy temprano sintiéndose feliz, despues de su encuentro nocturno con Shemir y experimentar aquellas sensaciones tan increibles, había regresado a su habitación con el cuerpo aún tembloroso, para luego meterse bajo las sábanas y dormir pesadamente. Tras un rápido desayuno se puso en marcha, fue al hospital para ocuparse de los niños internos y de pacientes que necesitan apoyo tanto físico como moral. Pasado el medio día, se fue a la escuela de arte, para una de sus clases, y pasaban las tres de la tarde cuando regresó a Palacio, fue directo al salón azul, en donde estaba Shemir sumergido en una enorme cantidad de documentos. -No podía pasar un minuto más sin verte, amor mío- corrío hasta dónde él estaba, Shemir sonrió y se puso en pie, abrió sus brazos para recibirla, estrechàndola contra su pecho, disfrutàndo de la sensación de poder abrazarla sin resticciones... -¿Cómo dormiste?-preguntó sonriendo con picardía. -Como tronco-le regaló una enorme sonrisa, elevánd
Dos semanas habían transcurrido desde el anuncio del compromiso, los preparativos iban viento en popa, todo siendo dirigido para el día de la celebración. Nael, había cumplido su palabra y a cada princesa se le había Sido asignado un pequeño palacio, las mujeres estaban ocupadas en la diferentes remodelaciones que debían hacerse a los palacios. Isabdiella y Drew, habían tomado la decisión de hospedarse en su propio palacio e ir haciendo las remodelaciones pertinentes, así mismo Suseth y Matt, también se habían alojado con ello. Por su parte Zashirah y Shemir, también asistían a diario a ocuparse de detalles en el que sería su hogar, Haimir y Naiara, se habían mudado al lugar, y estaban encargándose también de dirigir las remodelaciones, aunque no se le fue permitido a Zashirah mudarse al palacio hasta después de contraer matrimonio, Shemir si había decidido pasar allá las noches para hacerle compañía a sus padres, lo cual había entristecido un poco a la princesa, ya que los encuentro
Tras las palabras del Emir, surgió un largo y profundo silencio, tenso, tan tenso que podría cortarse. -Hubiese imaginando que en ausencia de respuesta habría entendido usted la negativa de la misma- dijo lentamente Nael. -Nuestras princesas son valiosas y jamás la obligaríamos a un matrimonio acordado. -El matrimonio es beneficioso para ambos, creo que las princesas lo entenderían, mi hijo también es valioso y por ello ofrezco su mano, mi deseo es cederle el trono, así que estamos hablando que su futura esposa será reina de nuestra nación, lo cuál es magnífico para ambos pueblos, desde que esos bárbaros han cometido la locura que han llevado a cabo en sus tierras, por lo cual vuelvo a discúlpame y...-Una disculpa no devuelve la vida de Rav, sus hombres han asesinado a un Norusakistan, dejaron huérfana a una de nuestras mujeres- los ojos de Nael, centellaron de ira.-Lo sé, Majestad, y eso me avergüenza profundamente, pero no son mis hombres y... -Son sus hombres- dijo Vanessa muy
Después de haber tenido una comida bastante tensa, todos decidieron seguir la sugerencia de Nael y pasar a uno de los salones para beber té. Rápidamente se formaron pequeños grupos para conversar y Zahiry se sentía demasiado tensa, con ganas de huir, sin embargo su madre le había dejado bastante claro que aquello no era auna opción.-Solo soporta un poco más, ya nos retiratemos, no lo arruines Zahiry, Nael estará muy enojado y tu tío también. -¿Entonces qué debo hacer, sentarme y sonreír?, ¿fingir que me siento honrada con la presencia de ese viejo infeliz?-¡Por Alá, calla!- Vanessa la miró severamente- cuando son asunto de estado, debemos ser prudente, eres una princesa y debes comportarte como se espera que lo hagas.-Lo único que le ruego a Alá, es que ese viejo se marche mañana a primera hora. -Tesoro...-comenzó Suseth- ¿y no crees que sería justo darle una oportunidad?- las presentes se giraron hacia ella mirándola como si hubiese perdido la razón - no, no me miren así, me ref
-¿Estás bien?- Ivette observó con preocupación su ceño fruncido y rostro cargado de incomodidad. -No, no lo estoy, la presencia y propuesta del Emir, son indignantes, he tenido que contenerme para no decirle a la cara todo lo que opino. -Y realmente te felicito, puedo imaginar lo difícil que ha sido, y aún así, has permanecido en silencio. -En silencio pero con ganas de saltar sobre él. ¿Has visto a mi pequeña?, ¡estaba furiosa!, y con justa razón. -Solo espero que no se ahogue en un vaso de agua.- sonrió, se acercó a su esposo y depositó un tierno beso en sus labios- están creciendo tan rápido...-¿Me dirás qué es buena idea que acepte tan infame invitación?- preguntó casi con enojo. -No lo sé, creo que ella tomará la decisión correcta, sin importar qué decida tendrá mi apoyo incondicional. -Mi niña, no tiene apariencia Oriental, quizás sea vista cómo una verdadera foránea por las personas del Emirato, además, ella en un lugar que no es el suyo, en un palacio que no es el suyo,
El gran día había llegado, Palacio, no, no solo Palacio, Norusakistan en pleno estaba convulsionado por la boda de la mayor de las gemelas, la unión matrimonial de Zashirah Mubarack. —El día ha llegado— dijo Vanessa con el pequeño Zhamir dormido en sus brazos, depositó un beso en la pequeña frente de su amado hijo, Príncipe heredero al trono, la siguiente generación que daría continuidad a la dinastía Mubarack. Zhamir Mubarack, dormia plácidamente en los brazos de su madre, disfrutando de su inocencia y su vida que por el momento no tenía ninguna preocupación y obligación, pero que sin duda alguna, esas obligaciones y preocupaciones, llegarían a medida que avanzará en edad y se preparara para ocupar su lugar como futuro jeque.-Estoy muy feliz por Zash, también por Shemir, ambos se merecen ésta felicidad, ruego a Alá que les otorgue su bendición. -Amén- respondió una sonriente Vanessa.-Me siento dichosa que después de tanto esfuerzo y dedicación de parte de Zashirah, sus sueños se
Todos los presentes disfrutaban de la fiesta, la gran celebración en honor a la nueva unión matrimonial, Shemir y Zashirah, se paseaban agradeciendo a los presentes sus presencias, mientras les llenaban de abundantes deseos de dicha, prosperidad y sobre todo; fertilidad, aquello generaba un leve rubor en el rostro de la princesa. -¿Estás feliz, mi flor de arena?- le preguntó su padre. -Nunca había estado tan feliz- admitió- él me ama, padre y yo lo amo, estamos unidos bajo la bendición de Alá, no necesito nada más. No debes preocuparte. -¿Se quedarán con nosotros, ésta noche?-No, padre- sonrió con ternura- nos iremos a nuestro Palacio - el rostro de Zahir palideció un poco. -Yo me aseguraré de mantenerlo lejos- se ofreció Ivette- espero que entiendas, querido, que los recién casados, necesitan tiempo y espacio. -¡Oh Alá!- fue lo único que dijo. Mucho más tarde, los invitados abandonaron Palacio, Hassam y Atzhiry agradecieron la invitación y también se marcharon... ellos se prep
La suave y enorme cama la recibió, su cuerpo fue depositado en ella con tanto cariño y delicadeza, que la princesa elevó su rostro y miró a su esposo con ternura, las manos de Shemir se dedicaron a tocar, acariciar y recorrer el cuerpo de su amada con deseo, pronto se ocupó en despojarla de la única prenda que la cubría...Cuando la masculina boca cubrió su erguido pezón, Zashirah no pudo menos que arquear la espalda y gemir de puro placer, mientras Shemir descubría cuáles eran sus puntos sensibles, dónde debía tocarla, besarla, acariciarla, para lograr empujarla a la cima... Le encantaba que el cuerpo de ella reaccionará tan bien a sus estímulos, era increíble, increíblemente hermosa y apasionada... movía las caderas contra la mano que la acariciaba y poco tardó en estallar en un orgasmo, no pudo contenerse y gimió con fuerza, Shemir disfrutó de la imágen, su rostro enrojecido, su boca entreabierta, su pecho subiendo y bajando en una lucha por oxígeno... sonrió... la besó y acarició