DANESA

Una cosa es el amor y otra cosa muy distinta es la lujuria, lo que no quiere decir que estas dos cosas no puedan venir juntas. Lo he comprobado, vivido y experimentado con un hombre que me ama, a su vez que no se le apaga el hambre que siente por mi.

No sé cuántas veces me lo hizo anoche, un día antes de nuestra boda, termine en su boca, con el adentro, en el baño como y desnuda sobre la cama. .

Sinceramente debo decir que duele mi entrepierna, mis piernas tiemblan, el pecho me vibra, el sabor de su sexo lo tengo en mi boca, sus gemidos retumban en mi oído. Voy a unirme a él y mi cuerpo está marcado por sus besos, por sus agarres llenos de lujuria y el placer qué provocó en mí.

A decir verdad, perdí la cuente de cuantas veces me cogió, perdí la noción del tiempo sólo me dejé llevar por este amor pasional e intenso que sentimos los dos. Tú lo sientes, se percibe cuando saboreas este sentimiento e, incluso lo expresas porque ya sabes si lo que sientes y es atracción, amor o l