Aquella noche Adele no regresó a la casa, Stefano se levantó temprano, se duchó, se vistió y bajó, se preparó su desató, y salió como cada mañana al orfanato, no le importó el no ver a Lena por ahí, estacionó su carro y caminó al interior de lugar, fue al consultorio donde trabajaba como ayudante, trabajo que le consiguió Adell, él siempre atento a los cuidado de los niños enfermos, y fue entonces que decidió ayudar como un auxiliar, no tenía idea de cómo lo hacía, pero siempre lo hacía bien.- Buen día Mike, Saludó entrando y viendo a su amigo ahí dentro esperando lo.- Bien día Sharif Daniels, ¿sabes? Tengo una curiosidad!.- ¿Cuál? Dime.- Tienes que mirar esto.Dijo su nuevo amigo, mostrándole es vídeo en su celular, era uno donde se presentaba un desfile de ropa interior, de una de las marcan más reconocidas a nivel internacional, era el aniversario de aquella empresa de ropa, y promocionaban una campaña. Le mostraba un anuncio del evento a realizarse, mostrando a sus modelos má
Stefano salió del lugar, no quería seguir viendo aquella escena de una familia feliz, sintió su corazón romperse en mil pedazos, sentía que escuchaba caer los fragmentos de su alma a suelo, Subió a su auto, la imagen de ese hombre que abrazaba a su mujer era demasiado para él. Metido en sus pensamientos no se fijó y terminó chocando contra un poste.Despertó aturdido,con un fuerte dolor de cabeza miro a todos lados y cuando se recuperó de su aturdimiento centró la mirada de la enfermera.- ¿Que pasó? - Shuu, no hables, llamaré al doctor. Dijo la enfermera mientras media la presión.Salió y llamó al doctor, lo reviso realizó la escala de Glasgow y es resultado fue de cuatro cinco y seis, están en esa valoración el doctor pidió hacer estudios para descartar cualquier inconveniente a futuro.- Todo estaba bien, recuperó la memoria, los resultados de Glasgow fue satisfactoria pero aún así lo tendremos en observaciones en las siguientes 48 horas.Los días pasaron tres para ser. Stefano l
Me llevé un gran susto, al ver el caballo intentar saltar, gracias a Dios alguien fué muy ágil.Correr al hospital fue una locura, y mucho peor lo que sucedió después, encontrar a Stefano con un collarín fué impactante, ver a Lugg correr a sus brazos, me derritió el alma, verlo después de tantos años, es algo que no esperaba, ver cómo se complementan en ese abrazo, hubo un lenguaje que solo ellos lo entendieron, miré a Alessandro, ver el dolor en sus ojos al mirar esa complicidad que su hija tiene con su otro padre. Será difícil para ellos compartir el amor de Luggina. Verlos en ese duelo de miradas, yo no sé que hacer tengo sentimientos encontrados quiero correr a sus brazos pero saber que nunca intentó comunicarse ¡no! ¿ El hizo su vida.?.- Puedo tener un momento con mi hija? La pregunta de Stefano,me saca de mis cavilaciones, lo observo y veo que habla sin quitar la mirada de Alessandro.- Mamita, tío papito, ¿Puedo hablar con mi padre? Por favor.Y es Alessandro quién responde
Stefano, salió del lugar manejó si saber dónde ir, sintió la necesidad de olvidar de emborracharse , no le importaba su estado de salud, llegó al Club y caminó en dirección al bar, pidió una botella y se fue a la mesa, se sirvió si primer trago lo bebió todo de una sola. Maldijo aquella mujer. - Se recriminaba mentalmente La frustración era tanta, que bebió otro y otro hasta que el sonido de su celular, lo sacó de sus frustrados pensamientos.Lo miró pensó en ignorarlo, pero decidió responder.- ¡Bueno!.- Respondió Stéfano algo alterado. - Tenemos que hablar, nos vemos en el Shari Vari Rome. - Le dice Alessandro muy contento.-- Estoy en él, te espero.Colgó la llamada y esperó, sirvió un trago más y dió tiempo de que aquel hombre llegara. La espera no fue mucha, veinte minutos después viendo entrar al hombre, por el cuál tenía unas ganas tan grandes de romperle la cara.Bebió su último trago y se paró frente a su considerado rival. - Pensó - ¡Alessandro!.- ¡Stefano!.El momento
Stefano y Alexa, se alejaron del lugar, habían hecho una gran amistad, salían de paseo con sus hijos, al cine y los llevaban al centro ecuestre para las prácticas.Stefano vió la tristeza en los ojos de Alexa al ver cómo Alessandro se alejaba con Pierina.Alexa sentía una presión en el pecho, últimamente no se sentía del todo bien, sentía mucho cansancio, mucho sueño, se llevó las manos a su cabeza y se tambaleó y Stefano logró sujetarla para que no caiga al suelo.- ¿Te sientes bien? Preguntó Stefano.- ¡Si! Estoy bien, fue solo un mareo, talvez hay poca oxigenación en mi cerebro, últimamente he vomitado mucho. - Vamos te llevo al médico. -- Dijo tomándola de la mano y llevándola a la enfermería.- ¿¡Tu eres médico!?- ¡Si!, pediatra, no general.Rieron y siguieron caminando llegaron al consultorio, el doctor la atendió y ordenó exámenes.Alessandro, Pierina y Luggina salieron del lugar, pues le tocaba a él llevarla, el regreso a la mansión era en un silencio sepulcral, la pequeñ
Una semana pasó del encuentro entres Stefano y Pierina, él contó lo sucedido entre Adele y él, y el por qué de la separación entre ellos.Pierina sintió que su conciencia jamás la dejaría en paz, siempre le recordaría la intensión de querer morir con su hija dentro sin importarle nada. Jamás le confesaría a Stefano la intención que tuvo.Así pasaron los días que se convirtieron en meses, cinco exactamente. Decidieron darle una oportunidad más a su amor, y el resultado de ello era que Pierina y Stefano esperaban la llegadas de sus cuatro hijos gemelos dos niñas y dos niños.- Aquí estan, miren tienen el tamaño y el peso exacto para as semanas que tienen. - Les explicaba el Doctor mientras recorría su abultado vientre.Luggina no podía ser más feliz, que tener a su padre en casa nuevamente y esperando a sus hermanos. Pero como la felicidad no es redonda como una naranja, ver a Alessandro preocupado por querer encontrar a Alexa y sin éxito, la ponía triste.La última ubicación fue en
Dos semanas después, Alessandro estaba de regreso a Roma con la que ahora es su familia, su mujer y su hijo. Dante ya no registraba como hijo de madre soltera, ahora era Dante Berlusconi Leroux. Cuando llegaron un gran recibimiento los esperaba con pancartas hechas por su hija. Los vieron venir y su hija corriendo a sus brazos fue a su encuentro.- ¡Papá Volviste! ya te extrañaba.La tomó en sus brazos dando vueltas mientras ella reía feliz.- Yo también te extrañé mi amor. - Respondió un Alessandro feliz. Tenía a su familia ya su hija.La sorpresa más grande del día fue ver a los padres de Alessandro en el aeropuerto llegando de Alemania.- ¡Padre! No me dijiste que venías.Dijo abrazando a su madre y luego a su padre.- Quise venir a ver cómo ibas, darte una sorpresa y los sorprendidos somos nosotros .Dijo mirando a Alexa. Alessandro Se acercó a ella tomándola de la mano, y caminando a ellos.- Padre, madre les presento a mi mujer y a mis hijos, Luggina y Dante.Luggina se acercó a
Adele vigilaba a Stefano a través de Àrtur Cox, su amigo y complice, sabía los horarios de llegada y salida, sabía que no faltaba mucho para el nacimiento del bebé de ellos.- Adele. Esto no saldrá bien. Ten mucho cuidado con lo que vaz a hacer. ¿ Estás loca sabías? Salió una carcajada de los labios de Adele que Ártur no le quedó dudas.Se cuestionó mentalmente.Y es que era tan inestable emocionalmente que confundía la realidad con la fantasía.- Solo tendré al hijo de mi prometido, el debe regresar a mi lado. Sonrió y miró a todos lados con un gesto que le confirmó a Ártur que su amiga no estaba bien. Salió del lugar no sin antes darle una última mirada, no la vería más sería una locura de su parte ayudarla, Adell ya no era la mujer de antes.Los días pasaron convirtiéndose en semanas y así transcurrió un mes y medio.Alessandro estaba en su despacho cuando escuchó el grito de Alexa en el piso de arriba.- ¡Álex! Rápido por favor, tus hijos ya vienen.Alessandro corrió a su encue