—Espero que tengas un lindo día amor, te vengo a buscar a la hora del almuerzo, ¿va? —dice Arden estacionándose en casa de Melissa.
—Gracias amor, pero recuerda que hay posibilidades de que Melissa no venga.Se baja del auto, para luego abrir la puerta trasera y sacar a Ollie.—Pero tu y yo tenemos una cita en el almuerzo —dice Arden volteándose a verla.Dione se impresiona y cierra la puerta, Arden sale del auto y la ayuda.—¿Cita? Seguramente era una sorpresa porque ni yo sabía —bromea y Arden la persigue hasta la puerta.—¿Bromeas? Siempre nos llamábamos para comer juntos y tengo pensado seguir con eso, además sabes que me gusta hacer citas espontáneas de vez en cuando. —Se encoge de hombros.—Bueno Arden, pero si estoy disponible, aceptaré la cita, ¿Si? —pregunta a ver si estaba de acuerdo.—Tienes razón amor. —Sonríe y besa su mejilla.Arden ha sido positivo, tal vez hoy no pueda, pero mañana si,Dione saca a Ollie del coche y queda en sus brazos, mientras que el chófer desarma el coche para que esté sea más fácil de guardar en el maletero, una vez que la ayuda a entrar en los asientos traseros, el chófer se monta de piloto y lleva a Dione en la dirección que le indico. Llegan rápido al lugar indicado, no era tan lejos el colegio, pero si a unos treinta minutos caminando tal vez. Nuevamente ocurre el mismo proceso al bajar, Dione es ayudada por el chófer y esta le paga. —Que tenga un feliz día, por cierto, lindo bebé. Sonríe el señor yéndose hacia el otro lado de su auto después de recibir su pago. —Oh, este no es mi hijo. —Se incómoda. —¿Ah no? Lo siento, igual se vería bien si lo fuera. —Solo fue amigable y se va. Dione no pierde tiempo y camina hacia la escuela junto con Ollie en el coche, no había prisa, pero tampoco quería ser desinteresada, de hecho, le sorprende que Ollie no se haya despertado ya, además de que lo que dijo el taxista la h
—Tal vez así lo suene, pero no vine aquí a que usted solo hablé que esté chico es problemático, se supone que hay que ayudarlo a ser mejor para nuestro futuro del país, lo que ha hecho es crearle inseguridades, no sabe con lo que tiene que lidiar en casa, ¿y ahora también en el colegio? ¿Por qué? ¿Por un bullying y un director que está ciego? —reclama Dione.Kay esboza una sonrisa porque siente que su niñera ha destrozado a su director.—No señorita, lo lamento, ambos estarán castigados. —Se retracta por su actitud anterior.—¿Cómo? ¿Acaso pensaba solo castigar a Kay? —se ofende Dione.—Solo lo que admiten su error se salvan del castigo —comenta Kay recordando una de las políticas de la escuela.—No creo que el otro muchacho haya admitido su error o que esté muy arrepentido, porque se sigue metiendo con Kay, ¿o no? —Resopla su nariz algo molesta—. Puedo aceptar que ambos vayan al castigo, pero Kay solo no.—¿Por qué tengo que ir al castigo? —Se molesta
Lena y Logan estudiaban en la misma escuela privada, era la misma donde estudiaban sus hermanos mayores, solo que esta era una sede para los de primaria y por eso tienen un autobús escolar, solo que Logan no tiene permitido subirse solo por ahora.Ya sé que dirán, sería lo mismo que Lena y Logan los lleven juntos ya que estudian en la misma escuela, pero Lena le suplicó a su madre irse en bus porque sus amigas iban en bus y simplemente quería ser como ellas, un capricho más complacido y Logan no va en bus porque sus hermanos no estarían pendientes de él, además Melissa creyó que no debería ser así ya que Logan no es responsabilidad de sus hermanos.—¿Qué desean para almorzar? —pregunta Arden.Él permite qué sus hermanos se suban al auto en los asientos traseros con sus cinturones y luego sube él.—¡Hamburguesas con papas! —dice Logan animado.—Que no se te olvide el helado campeón, por asistir al colegio y tener una conducta intachable. —Lo ve con orgullo a
—La comida de Kay se guardará para cuando quiera comer, también estará la comida de Maya para cuando llegue —avisa Dione sirviendo la comida a cada pequeño.—Conozco a Kay y estoy segura de que prefiere pasar hambre —dice Lena.—No puede ser. —Dione no puede creerlo.—Lo sé, es un tonto, la comida no tiene la culpa —Lena se encoge de hombros.—Entiendo que no he convivido con ustedes para que me quieran, pero tampoco hay razón para odiarme—dice Arden.Él mira a sus hermanos y estos solo levantan sus hombros sin saber.—Yo no te odio, solo que quieras mandarnos o buscarnos conversación me parece extraño y algunas veces desagradable, me traes desconfianza, sé que no quieres estar aquí con nosotros y eso se nota. —Lena rueda sus ojos mientras lleva unas papas fritas a su boca.—Ya te expliqué que mi asunto no es con ustedes, es con nuestro padre, tal vez me gustaría pasar tiempo con ustedes si él no estuviera de por medio —responde malhumorado.—
—Ahora que soy marico por leer el mensaje, podré terminar con mi novia sin problemas, ¿no Arden? —bromea uno de sus compañeros.—Solo termínale Rodrigo —responde Arden rodando sus ojos, pues sabía de lo que estaba hablando.—Tienes razón, no me creerá que me volví gay porque lo leí en un auto. —Se hace el pensativo.—Que te unas a la comunidad es una ofensa —bromea otras de sus compañeras.Arden escucha risas entre ellos antes de entrar a su oficina. Al estar adentro comienza a buscar unos papeles para su siguiente reunión.—Tal vez yo no sea gay por leer el mensaje, pero si puedo solucionar tu picazón con mi lengua, solo necesitaré frotarlo —comenta una voz reconocida en su puerta.—No es buen momento Eva. —No quería lidiar con sus chistes.—¿Cómo no? Solo tienes que colocar tus bolas dentro de mi culo para poder rascarnos —seduce Eva.—Eso no tiene sentido. —Arden la ve extrañado.—Tu —entra su padre Jacob señalando a Arden—, a mi ofici
Arden sale del edificio y espera que el valet le entregué nuevamente su auto, entra de piloto y deja los papeles en el lado del copiloto, saca su celular y llama a su novia.—Aló —responde enseguida.—Princesa, necesito que me hagas un favor urgente. —Se escuchaba muy preocupado—. ¿Estás ocupada? —pregunta antes de pedírselo.—Bueno, estoy terminando de ayudar las tareas de Logan y ahora veré si Lena necesita ayuda, ¿qué sucede? —Nota la desesperación.Dione corta la llamada después de escuchar las indicaciones de su novio, así que con cierto cuidado, se asegura de que cada pequeño este en su mundo.Logan y Ollie jugaban en su habitación, Lena escuchaba música también en su habitación mientras hacía tarea y Kay, pues estaba encerrado en la suya, ni siquiera Dione pudo entrar, así que le daría su espacio.Sabía que le debían un tour por la casa grande, pero gracias a las indicaciones de Arden, sabía a dónde tenía que ir, llega a la oficina del señor King
—Entiendo, pásale seguro a la puerta, saldremos por la venta —ordena Kay y Dione hace caso.Cierra la puerta y le pasa seguro, en lo que Kay termina, apaga la laptop y la manilla de la puerta se mueve.—¿Puedes creer que siempre olvidó que la mantengo cerrada? —dice el señor King desde el otro lado.—Eres muy despistado papi.Dione y Kay se asustan, así que se apresuran con su huida por la ventana, el cual fue un éxito que estuvo a solo minutos de ser descubiertos.La salida por la ventana daba a los lados lateral de la casa, por lo que tenían dos opciones, ir al patio trasero y fingir que siempre estuvieron ahí o ir al frente y fingir lo mismo, aunque sería más sospechoso porque el señor King no lo vio cuando entró, así que optaron por atrás, tomar una pelota y comenzar a jugar.—Eso estuvo cerca. —Kay le lanza la pelota y Dione la ataja.—Si, ¿qué era lo que tenía el vídeo? —Le regresa la pelota.—Ahm, nada importante. —Se pone nerviosa.
—Kay por favor, solo le estoy informando algo que no se había dejado claro… ¿Estás de acuerdo Dione?—Si, me parece perfecto, ¿También trabajaré los fines de semana.—De momento no, pero si lo llegamos a necesitar también será algo extra.—Está bien.—Bueno, Melissa habló conmigo y dijo que tú le dijiste que Kay no hizo nada malo, pero por alguna razón el director lo llamo a él, a ti y luego a mí para asegurarse de que Dione es una real trabajadora mía —dice el señor King—, ¿que fue lo que realmente pasó? Se cruza de brazos y se queda al frente de ambos, apoyando se trasero en el escritorio.—Nada, no pasó nada. —Kay se levanta molesto—. ¿Ya me dirás mi castigo?—Ese si será hablado con tu madre.—¿Entonces para que nos hiciste perder tiempo?—No es perder el tiempo Kay, solo quiero saber que sucedió para poder decidir con tu madre que castigo darte.—¿Para que quieres saber? Si para ti es más fácil castigarme, ¿Qué cambio ahora que me quieras escuchar? —Kay, solo quiero