Después de semejante sueño que había tenido, me había despertado a las siete de la mañana, con Tyler a mi lado. Había abierto mis ojos, sintiéndome determinada ante lo que pienso hacer y, aunque me cueste, haré hasta lo imposible para cumplir con mi propósito.
Me levanté de aquella cama con lentitud, evitando despertar a Tyler, cuando sentí sus manos aferrándose a mi cintura, deteniéndome en el proceso, atrayéndome a él.
- ¿A dónde vas, princesa? - Sonreí un poco, mirándolo con amor.
- Iré a entrenar con Daniel. Lo necesito. - Tyler arrugó su entrecejo, negando en silencio, mostrando su oposición esta vez.
- No irás. No después de lo que hizo contigo, Gabriella. - Medio sonreí.
Él s&oacut
Comencé a sacudir mi cabeza en señal de afirmación, ya que mis palabras no parecían salir, y Tyler esperaba por una respuesta. Como pude, pasé en seco el nudo de mi garganta, acercándome a él, tomando su rostro entre mis manos.- S-sí, Ty, sí quiero. - Mis palabras salieron en un susurro que él escuchó a la perfección.Se colocó de pie, colocando el anillo en mi dedo, dejando un beso en el dorso de mi mano para, luego, tomar mi rostro entre sus manos, secando mis lágrimas con sus pulgares, dejando un beso tierno sobre mis labios.- Tomaré estas lágrimas como lágrimas de emoción. - Reí un poco, colocando mis manos sobre su pecho, asintiendo.- Lo son, tonto. No me esperaba algo como esto. - Él rió con suavidad, dejando un beso en mi frente, hab
*Cuatro semanas después.*Desperté en nuestra habitación, rodeada por los brazos de mi bello prometido.Me sentía algo ansiosa debido a las apariciones más frecuentes de Caio en mi día a día, atormentando mi existencia; no sé lo que planea, pero sea lo que sea, se está metiendo debajo de mi piel y no me gusta en lo absoluto.Y a todo esto le debo agregar también la nueva noticia, que me tiene ansiosa por igual y creo que hasta peor.Me levanto de la cama con cuidado, dirigiéndome al baño.Al estar dentro, renuevo mi ropa sin problema y abro la ducha, metiéndome bajo el agua caliente. Al sentirla caer sobre mi piel, esta relaja cada músculo de mi cuerpo, haciéndome sentir descansada y menos ansiosa
- Tyler. - Hablé con toda la calma posible, viendo cómo el cuerpo de Ty se estremecía de a poco.Me dí cuenta que no se encontraban solos. Casi todos estaban aquí, exceptuando por Spencer y Ryan, que no tenía ni la más remota idea de dónde podían estar. Todos me miraban en silencio mientras, yo, me acercaba a Tyler; sólo yo puedo ayudarlo a calmar su animal interior.Coloqué mi mano sobre su mejilla mientras él cerraba sus ojos, inhalando con fuerza el aire, botándolo con cuidado sobre mi rostro. Sonreí al sentir su aroma mentolado golpearme.- Viene por ti. - Abrió sus ojos, mirándome con dolor contenido. Asentí en silencio, intentando quitarle aquel peso.- Lo sé, amor. No pierdas los estribos todavía. - Él suspiró, asintiendo con rendici&oa
¿A quién intenta asustar? ¿A mi madre o a mí?Escucho un golpe en la puerta trasera que me hace tensar con rapidez, colocando una de mis manos sobre uno de los sai mientras camino hacia ella; respiro con alivio al ver el cuerpo de Tyler a través de la ventana de la puerta, mirando con sospecha los alrededores. Al abrir la puerta, me ubico a su lado, observándolo con ansiedad.- ¿Hallaste algo? - Negó en silencio, mirando el bosque frente a nosotros. - ¿Qué sucede?- Siguen aquí; puedo escucharlos, sentirlos. Sólo están bien camuflados. - Siento que mi cuerpo recibe un sacudón fuerte al escuchar aquello. - ¿Y Helena?Reacciono de mi estupidez, entrando nuevamente a la casa, buscando a mi madre en la habitación; al entrar en ella, hablo.- ¿Mamá
*POV's Tyler*Noto cómo Gabriella sale corriendo hacia el bosque, en un intento desesperado por hallar una solución; intento ir tras ella pero Caio me detiene, atravesándose en mi camino. Gruño en su dirección, intentando apartarlo de mi camino, pero el muy infeliz se abalanza sobre mí, queriendo morder mi cuello, pecho y costados.Concentro mi mente en todo lo que siente Gabriella, dejándome apreciar su cansancio y agotamiento conforme pasan los segundos, pero también puedo apreciar la determinación que la invade por salir de esta.Siento un fuerte golpe que me regresa a mi realidad, haciéndome gruñir con fastidio.¡¡Este infeliz ya me está aburriendo!! Lo sé, me tiene en las mismas.Concentro mi enojo sobre él, alcanzando una de su
Hace un rato desperté. Carmen entró a la habitación unos momentos después y me ayudó a cambiar, aunque al cabo de unos minutos, también llegó Kai. Le pedí que fuera a la aldea de manera urgente en busca de ayuda y que llevara mi chaqueta con él, llevando consigo un mensaje que yo no había podido dar debido a todas las circunstancias.Sé que si lo ven llegar de sorpresa, sin nada que avale sus palabras, Tyler lo hará sufrir. O, lo que es más probable, lo asesine.Me alegré de saber que él está de nuestro lado y prometió que me ayudaría a escapar de ser necesario, pero en estos momentos me interesa más que busque ayuda porque nosotros solos no podremos.Todavía me encuentro en la cama, amarrada de manera ligera. Nadie, a parte de Kai y Carmen, ha entrado a la habitación y eso me tiene algo decepcionada y frustrada. Estar en esta misma posición desde hace horas me tiene estresada y con un dolor en la espalda bastante insoportable; me siento incluso ansiosa.Bufo con frustración, decidien
Esperé el momento justo para poder llevar a cabo mi plan. Tyler debe estar buscándome como loco; si yo siento la ansiedad y dolor, no me imagino cómo debe estar sintiéndose él.Unas dos horas han debido pasar y Carmen ya vino hasta mi puerta, pasando una hoja por debajo de esta, diciéndome que la distracción sucedería en cualquier momento. Terminé de sujetar las sábanas a uno de los postes de la cama, dejando el resto en el borde de la ventana, lista para lanzarla y salir, descendiendo por ellas.Escuché un leve estruendo resonar fuera de la casa, que hizo estremecer todo el lugar; lo tomé como mi señal.Las voces de los guardias y demás gente, se escuchaban por todos lados, averiguando lo que había sucedido y aproveché esa oportunidad. Lancé la sábana por la ventana y me subí a ella, sosteniéndome con fuerza, descendiendo por aquel muro de roca con cuidado. Creí que sería algo fácil de hacer pero me llevé la sorpresa del año al ver que esto es otro castillo, casi tan alto como el ante
- Verás, querida Gabi, tu padre y yo siempre hemos sido mejores amigos. Sus padres, y los míos, nos trataban como si fuésemos sus propios hijos. - William sonrió, mirando a mi padre. - Cuando este engendro decidió abandonar toda esta vida, tus abuelos se sintieron demasiado tristes, pero optaron por cederle el puesto al más cercano a ellos.- Y ese "cercano" fue este idiota. - Reí con suavidad al escucharlos. - Fue tanta mi decisión y determinación que, como ves, toda mi vida la rehice fuera de aquí. No quería saber nada sobre este lugar. - Asentí, haciendo otra pregunta.- Pero William también tenía sangre de Alpha pura. Si no, ¿cómo habría hecho con Tyler? - Ellos asintieron.- La sangre de Alpha vino de su padre. Le sucedió lo mismo que a mí; conoció a su esposa, quien tenía un leve rastro de linaje de Alpha. - Miré a mi padre, asintiendo. - Pero la sangre de Alpha, totalmente pura, vino por mí. William y yo hicimos una transferencia, un pequeño pacto. - Levanté mis ceja con cierta