Capítulo doce

CAPÍTULO 12

—No quiere comer, sólo la he visto hacerlo masticando alguna que otra fruta, pero las deja por la mitad y estas se pudren a un lado de su cama—le susurra la abuela de Charlotte en el pórtico—. Sólo duerme y cuando se despierta, mira por el ventanal el rio correr. Tiene una bonita vista pero se queda horas y horas observándola. Tampoco habla.

Sebastián ha ido a verla infinidad de veces y siempre tiene la misma respuesta por parte de su abuela materna, quien tiene ojeras negras, aspecto agotado y los ojos rojos por el llanto de su hija muerta.

—He hablado con psicólogos, pero tampoco desea hablar cuando estos la visitan. También debo evadir a la prensa quien no para de acecharnos. Esto es tan…—la voz de la mujer se quiebra tras llevarse el puño a los labios y contener un sollozo—, tan desgarrador que no merecían ese final. Mi pequeña…yo…

Sebastian la abraza al ver que lo necesita, pero teme por la salud mental de Charlotte. Literalmente huyó del fuego mientras que sus padres
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo