El niño Black, fue llevado a una habitación, por petición del padre era una de las mejores del hospital, había sido desesperante escucharlo llorar cuando le tomaron muestras de sangre, ahora parecía tener papitis, quería que Alessandro, estuviera muy cerca de él Dariana, no se le había separado por un solo momento, el que lo dejaran internado no se lo esperaba, debía avisarle a sus padres — Cariño, saldré a hacer una llamada, ya vuelvo — el niño no dejó salir a su madre, lloró a los gritos, así que después de una mirada de molestia del padre hacia Dary, ella desistió y solo envió un par de mensajes * Damiano, regresa a Rusia sin mi, me quedaré con mi hijo, él ha sido internado para hacerle estudios, gracias por todo* *Papá, han dejado hospitalizado a Daniel, me quedaré aquí por un tiempo, P.D. Alessandro, ya lo ha visto, fue casualidad, pero está aquí* — Mamá ven, sientate aquí — después de un rato el niño se quedó dormido mientras que tomaba la mano de ambos padres, el
— ¿Un alma en pena, bisabuelo? — Alessandro, preguntaba — Así es, la primera vez que lo ví, estaba en la sala de descanso, él estaba detrás de un sillón, el asistente de Angelina, lo había llevado ahí y salió a por algo, entonces él me habló, me dijo que se llamaba Lucien, igual que yo, y que buscaba a su padre, al verlo vestido como me solían vestir a mi a su edad, en verdad creí que era un fantasma porque yo no sabía de su existencia — ¿Bisabuela, tuviste un hijo de tu esposo y no se lo dijiste? — Fué por qué se portó muy mal — Cuando todo se aclaró, y Angelina, quiso regresar a Inglaterra, le advertí que solamente un padre Black, puede criar a un hijo Black, no es que dudara de sus capacidades, pero son niños muy especiales, a veces algo difíciles, ella se quedó, nos seguimos amando desde entonces y evitó así una tragedia, ahora lo puedes ver con tus propios ojos, Angelina, lo que a Daniel Alejandro, le hace falta, es tener a su padre cerca — Señor Black.... — Oh, no,
Los padres, después de comer algo regresaron a la habitación, ya Angelina le daba a Daniel Alejandro, una merienda de frutas y gelatina, también unas galletas de almendras que el niño disfrutaba Lucien Black segundo y su hijo Lucano, entraron a la habitación, a presentarse — Hola, campeón, yo soy tu tío abuelo Lucien Black, soy hermano de tu abuelo Angelo — Tu te pareces a mi tatarabuelo, el abuelo Angelo, se parece a mí tatarabuela — Pero que niño tan inteligente, así es, hay dos líneas muy pronunciadas con respecto al físico en la familia Black - Di Monti, tú eres idéntico a los Di Monti, la línea de mamá aquí presente — Yo soy tu tío Lucano, hemos venido a visitarte — Lucano, tenía en las manos un juguete didáctico, el niño no dejaba de mirarlo — ¿Qué tienes ahí? ¿trajiste algo para mí? ¿voy a morir? ¿por qué me traen obsequios?Lucano, se quedó sin palabras, ¿en qué momento le había sugerido al niño, que iba a morir? — Por supuesto que no vas a morir, la familia B
El CEO Ramsés, llamó a su hija, era la noche especial de nieto y abuelo, en el que solían armar legos y un enorme rompecabezas, además de beber chocolate que Adriana, la madre de Aithana, le preparaba — Aithana, le llamé a mi nieto y me dijo que no vendría a vernos hoy porque está castigado, ¿qué pasó? — Dallán, coloreó con sus crayones el sillón de la sala, Drago, lo ha castigado, es su deber como padre no dejar que haga lo que se le venga en gana — Entiendo, tiene toda la razón, pero... podría dejar el castigo para mañana, tu madre y yo ya tenemos todo listo para la noche con Dallán, hasta tenemos preparada la película que quería ver, esa de calabozos y dragones, te propongo algo, hablaremos con él sobre su comportamiento — Dame unos minutos, ya te regreso la llamada, Drago, cariño, era mi padre, hoy es su noche con su nieto, ¿podrías posponerle el castigo y hacerlo efectivo hasta mañana? — Aithana, así no funcionan las cosas, mi suegro debe entenderme — Prometió que
La mansión, era muy bella, no tenía vecinos y colindaba con un bosque, los empleados recibieron a su señor con las reverencias merecidas, todo estaba muy misterioso — Black, ¿por qué no has traído a esta propiedad? no estoy entendiendo nada — Drago, habló — Les invitaría un té o una copa de vino antes de mostrar lo que prometí, pero el tiempo apremia, Daniel Alejandro, se puede poner ansioso si nos demoramos demasiado, así que... pasemos de una vez, síganme por favor, y antes de juzgarme por lo que van a ver, piensen en lo mucho que Dariana, sufrió al sentirse traicionada por mí, y en cada una de sus lágrimas El CEO, los guió a una puerta que quedaba en un piso inferior donde estaba una gran cava llena de vino, todo se veía normal hasta que abrió la puerta, después de caminar por un largo pasillo, se encontraron con una celda, en ellas estaban el señor Gama y su hija Julia Gama, vestidos en harapos— ¿Pero qué es esto? — Danilo, estaba muy impresionado, Dariana, sentía que se i
Dariana, tenía mucho para pensar, su padre tenía razón en algo, si amaba a Alessandro, debía aceptarlo con su lado brillante y con su lado oscuro, también en qué fué su decisión tener una relación con él a escondidas suyas por cierto, dormir con él, gestar a su hijo y casarse con él, era momento de asumir las consecuencias de sus actos — Drago, ¿cómo está Dallán? ¿está en casa? — No, él está en la mansión Ballesteros, teniendo una pijamada con sus abuelos, ya sabes, una noche de abuelo y nieto, arman legos, beben chocolate, ver una película, charlar de buenos comportamientos — Vaya, Ballesteros, no pierde el tiempo, ahora me está robando a mi nieto, pero ya estoy aquí, y sé que tengo muy buenas cosas que enseñarle a Dallán — El CEO, no dejaría ir tan fácilmente a su heredero — Tío Rogelio, ¿qué esto que tienes en tu habitación? ¿por qué estos globos están tan resbalosos? abuelo, mira, aquí hay muchos, juguemos, tú inflalos — Dallán, había encontrado toda una tira de condon
La sensación de pensar a su amada Dariana, en los brazos de Damiano Stavros, fue desquiciante para el CEO Black, una tortura indescriptible, imaginarla disfrutando de las caricias de otras manos que no eran las suyas, lo hacía arden en celos — Alessandro, ¿a dónde me llevas? ¡bájame de inmediato! — por más que Dariana, se resistió, el hombre no escuchó, la llevó a la habitación, ahí se quitó el sacó, se desabotonó el chaleco frente a la mirada de la bella ojiverde — ¿Tú... hiciste ejercicio? — ¿Y que demonios más hacía sin poder follar, mi esposa estaba ausente, pero ahora ya está de vuelta y tengo la intención de recuperar todo el tiempo perdido Alessandro, subió a la cama, fijo su azul mirada en su mujer, la había extrañado incansablemente, besos sus labios con pasión, con deseo, recorrió con sus manos sus piernas y su redondo trasero Dariana, se estremecía con cada caricia hecha por él, ella también lo había extrañado con cada fibra de su ser, que la besara como solo é
El CEO, tenía que actuar rápido, poner a salvo a sus dos tesoros del animal, acostó a Dariana, en la cama sin perder de vista al peligroso escorpión, y pidió al niño — ¡Daniel Alejandro, ven acá, sostente de mi pierna y no te sueltes! ¡¿cómo demonios se te ocurrió comprar a ese animal precisamente?! ¿en dónde lo viste? — Lo ví en un documental con el abuelo de Dallán, ahí decía que eran silenciosos y si no los molestabas no te molestaban, ¿qué le pasó a mamá? ¿la asustó Tadeus? — ¡Carajo, niño, qué demonios contigo! ¿qué no ves que ese animal es venenoso? si te pica te puedes morir, ahora tú madre perdió el conocimiento del susto — Alessandro, estaba que se jalaba los cabellos — ¿Me puede matar? hay no, entonces matalo, papá, que no me pique, eres malo Tadeus, no puedes vivir en esta casa — el niño, regañaba al animal — Sube a la cama con mamá, deja busco con que lo mato, está enorme, ¿otro más grande para comprar, no había? — Si, pero ese se lo envié a Dallán, para qu