[IZAN]
Días después: sábado
Soy muy consciente de que la decisión que estoy por tomar podría llevarme directamente a la muerte si algo sale mal, pero entre estar sin ella y mi hijo, o estar muerto, prefiero lo segundo. El campo de golf está bastante lleno de gente y mi suegro está conversando con un señor que quiero suponer es quien el tío de Mia envió para distraerlo. Me quito el guante, dejo el palo de golf en su lugar, y me alejo simulando que iré dentro del club para ir al baño hasta que en el camino me encuentro con Mateo sentado en una banca, él me hace una señal y de inmediato lo sigo hasta que llegamos a un carrito de golf que esta custodiado por un hombre de cabello cobrizo —¿Cómo está Mia? — Pregunto preocupado, pero él no me responde, simplemente arranca el carrito y conduce hasta que llegamos a una especi
[MÍA]Al día siguienteLos días siguen pasando e Izan no está conmigo, lo extraño demasiado, cada día que pasa lo necesito más y más. Nuestra bebé sigue creciendo dentro de mi y no sé como hacer para detener el tiempo, no quiero que nazca sin su papá a nuestro lado… —Sobrina, ¿Cómo estás? — Escucho la voz de mi tío y al voltearme lo veo saliendo al jardín.—Hola, bien, ¿y tú? — Lo saludo sin ánimos y me vuelvo a acomodar mirando hacia el frente en este sillón de jardín.—Esa pequeña cada vez está más grande— Comenta y se sienta a mi lado mientras que él le hace una señal a sus hombres para que se alejen de nosotros, y es que si, hace meses que vivo custodiada porque según él estoy en peligro…—Siete m
[IZAN]2 días despuésSi antes no había momento en que no pensara en ella, ahora es mucho peor. Llevo las ultimas 48 horas soñando despierto y dormido con Mía y con nuestra hija. Su imagen no se sale de mi cabeza y es que se ve tan hermosa embarazada que es imposible no pensarla —Babe, ¿ya estás listo? — Escucho la voz de Giovanna y juro que a cada minuto que paso con ella más la odio.Ajusto el moño de mi esmoquin y asiento —Ya estoy listo— Respondo y me giro con la intención de salir de la habitación.—¿No dirás nada de como me veo? — Me cuestiona y a este punto ella ya debería saber que no importa que tan hermosa sea por fuera, ella no me atrae en absoluto.—Sabes que te queda bien, no debo decírtelo— Me limito a contestar e intento salirme de la habitación, pero ella me sujeta del brazo
[IZAN]Estamos mi “suegro”, mi hermano, mi padre y yo sentados en los sillones ubicados en una de las áreas VIP más alejadas de todo el casino, cada uno de nosotros tiene un vaso de whiskey en la mano y en el caso de mi suegro, él también tiene un habano que pareciera disfrutar como una de las mejores cosas de la vida —Todo está saliendo de maravilla— Habla finalmente.—Mejor de lo que se esperaba, la mercancía es de alta calidad y los clientes pagaran una fortuna por ellas— Añade mi hermano y me da asco escucharlo hablar así.—Si, y de eso se encargara Izan— Señala Lorenzo y me mira.—¿De que cosa? — Cuestiono y bebo un sorbo de whiskey para disimular mi sorpresa.—De negociar la mercadería nueva— Habla y no sé cuanto tiempo pueda aguantar de que hablen de esta manera de las mujeres.&md
[IZAN]Camino lentamente rumbo a la habitación donde esta Giovanna mientras que en mi cabeza doy vueltas a la idea de ¿como ha quedado embarazada? si entre ella y yo no hubo nada desde que me obligaron a regresar con ella. Trato de recordar si tal vez pude haber hecho algo en una noche donde me pasé de copas o si ella pudo tener la macabra idea de drogarme para provocar algo como esto, pero todas esas teorías se desvanecen enseguida. Mi mano ahora esta sobre el picaporte y al abrir la puerta su mirada se cruza con la mía.—Izan— Trata de adelantarse, pero levanto mi mano en señal de que calle y cierro la puerta detrás de mi para después acercarme a ella.—Por una puta vez en tu vida se sincera— Es lo único que digo y sus ojos de inmediato se cristalizan.—¡Todo esto es tu culpa! Tú no me has querido tocar en todos estos meses y así como los hom
[IZAN]Mateo estaciona el auto frente a lo que pareciera ser un galpón abandonado y una vez que apaga el coche, baja de este y rápidamente yo hago lo mismo —¿Dónde estamos? — Pregunto bastante confundido.—Ven, no hagas tantas preguntas— Me indica y sigue caminando hasta que abre el inmenso portón que hay frente a nosotros y entramos.El lugar es oscuro, a primera vista pareciera estar completamente vacío, pero de repente nos encontramos con una especie de pared falsa donde hay una puerta que él abre con llave y al cruzarla, me siento dentro de una película de esas donde se muestran las oficinas secretas del FBI o de la CIA, y es que de hecho estoy dentro de una oficina de la CIA donde hay decenas de monitores, computadoras, y gente trabajando —Guau— Es lo único que consigo decir y es que a pesar de todo el caos interno que siento por lo de Giovanna, esto es muy di
[IZAN]Al día siguienteSon apenas las seis de la mañana cuando me encuentro frente a la puerta de la casa de mi supuesto suegro con mi teatro de hombre despechado que se fue a un bar a ahogar sus penas. No tengo idea si Giovanna le ha contado la verdad o no, pero por si acaso necesito mi cuartada. Toco el timbre y a los pocos minutos es la ama de llaves quien me abre y me deja pasar.—El señor Lorenzo estará con usted en un momento— Me indica y yo tan solo asiento mientas me siento en uno de los sofás que hay en este enorme salón.Miro a mi alrededor y a cada minuto que pasa más asco me da saber de la manera que se ha pagado todos estos lujos. No comprendo como pueden ser así… Pienso en que mi padre quiere convertirme es uno más de ellos y me dan ganas de llorar, ¿Cómo es que un padre puede querer esto para su hijo? Yo pienso en mi hija y pienso en que quiero
[IZAN]Disimular todo el día con Giovanna ha sido una tortura, lo único que quería hacer era reclamarle que prácticamente me obligara a volver con ella para después enredarse con mi hermano, pero soy consciente de que no lo puedo arruinar todo cuando estoy tan cerca de terminar con toda esta porquería. Miro el reloj mientras termino de vestirme y respiro profundo 《Tú puedes, piensa en tu hija y en Mía》Me aliento y muevo mi cabeza de un lado a otro como intentando relajar mis músculos, pero es prácticamente imposible, el estrés es demasiado.Busco la pistola que me ha dado Lorenzo y la engancho en mi pantalón tal y como él me lo ha enseñado, pero solo para disimular, realmente no pretendo usarla —¿Ya te vas? — Me interrumpe su voz y al levantar mi mirada, la veo entrando a la habitación.—Si— Respondo fríamente y comienzo
[IZAN]Ver la cara de las mujeres mientras se suben al vehículo que las llevara a su destino, me rompe el corazón. Cada una de ellas sabe la pesadilla que les espera y yo quisiera poder decirles que no se preocupen, que todo ira bien, pero no puedo, no si quiero que todo esto marche como se ha planeado. Una vez que todas ellas están en el vehículo, subo yo también y le hago una seña al chofer para que arranque 《Aquí vamos》 Digo por dentro y ruego al cielo que el plan de Mateo no falle. El vehículo comienza a moverse y yo trato de no mirar a las mujeres para que no se den cuenta de lo que esta por ocurrir, y es que no hay lugar para el fracaso esta noche.[…]Poco a poco fui cumpliendo con la supuesta entrega de cada una de las mujeres, aunque en realidad sé que apenas bajaban del vehículo, ya había un operativo armado para hacer que cada uno de los involucrados en cada prost&iacu