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Capítulo treinta y cinco.

Cristóbal Foster.

Quién hubiera pensado que algún día sería padre, ya que mi infancia fue tan mala. Tan pronto como supe que iba a ser padre, me golpeó una ola de felicidad, confieso que después lloré en secreto. No me gusta llorar delante de nadie, pero no pude contener las lágrimas, estoy tan feliz. Tener un hijo con la mujer que amo es algo muy bueno y sorprendente. ''Confieso que nunca me gustaron los niños porque eran demasiado ruidosos, pero ahora voy a tener un hijo.

Tengo miedo de tocar a mi hija, ella es tan pura y yo ya soy alguien corrompido por el mal. Ella va a tener un padre al que le encanta torturar, no le importa matar gente, solo pensar que podría odiarme me hace sentir como una mierda. Cuando supimos el sexo del bebé me quedé en shock, vamos a tener una hija, una niña preciosa. '' Solo de pensar que en el futuro tendrá a alguien, ya me dan ganas de matar a esta basura.

Y, por supuesto, Melissa me regañó por pensar de esa manera, dijo que no deberíamos privar a nuest
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