Pov LeaSentí como sus manos cálidas empezaron a recorrer mi cuerpo, una serie de sensaciones empezaban a tomar cabida en mi.¿De verdad esto estaba pasando? ¿Leandro y yo por fin estaríamos juntos?Pensé cuando nuestros labios se fundieron en un beso cálido y necesitado, la verdad; el me gustaba y que esto de verdad estuviera a punto de suceder me parecía un sueño irreal—Leand...No dejo que culminar la frase, ya que profundizo el beso, está vez empezando a despojarme de la ropa, sus caricias eran calidad y ansiosa, cuando al fin nuestras miradas se cruzaron, en ellos pude ver el deseo, no puse objeción alguna, por que de verdad era algo que yo deseaba demasiado.—Lea al fin serás míaSusurro sobre mi cuello, empezando a descender hasta llegar a mi pecho, en donde tomo uno de estos y empezó a succionarlo, mi espalda se arqueo debido al placer que generó y cuando menos lo espere mi pelvis rozó con su ereccion.—Te necesitó Lea, como tu a miContinuaba descendiendo por todo mi abdomen
Pov Leandro.—!Mierda¡Espete para mi mismo algo molesto por no poder conciliar el sueño.¿Que me estaba pasando?¿Por que lea no salía de mi cabeza?Esa mujer se había adueñado de cada uno de mis pensamientos y ni dormir tranquilo podía.¿como podía negarse a tener una relación conmigo?.Yo era el partido perfecto para cualquier mujer, era guapo, con dinero y prestigio, cualquier mujer con sentido común moriría por ser mi novia.No entendía que pasaba con ella, que si bien me dijo que le gustaba, no accedió del todo a entablar una relación conmigo y eso me tenia un poco confundido.Para despejar un poco la mente, me levante y me fui directo a la sala común, ya era algo tarde y todas luces de la suite estaban apagadas, eso quería decir que lea estaba dormida, durante el día la pasé encerrado, trabajando un poco, por ese motivo, no la vi.Camine a la amplia ventana, para observar la ciudad de berna, se veía magnífica desde aquí, justo en ese instante el teléfono en mi bolsillo empezó a
Pov Lea—Mamá, mama ¿cuando regresas?La voz de Dante, interrumpio la pequeña charla que sostenía con mi madre mediante video llamada, tenía que explicarle por que el viaje se había extendido más de lo debido, no acostumbraba a dejar a Dante solo y menos por tanto tiempo, de hecho las pocas veces que lo hacia era debido al trabajo, pero jamás por más de doce horas.—Creo que en 3 días mi cielo ¿Te estás alimentado? ¿Has obedecido a la abuela?Pregunte aunque Dante era un niño muy tranquilo e inteligente, nunca estába demás preguntar, aunque por lo qué mi madre me había contado, se estaba portando muy bien.—Un beso, te amo mamiMi bebé me arrojo un beso atravez de la pantalla y me corazón se estrujo, lo extrañaba y no verlo, me tenia un poco triste, solía quedarme con el en su habitación hasta dormirse y ahora, solo tenía que conformarme con hablar con el una vez al día, debido a la diferencia de horario.—Yo también y no olvides lavarte los dientes antes de ir a la cama.Le dije para
Pov leandroSe veía tan hermosa dormida, que sentí pesar al tener que despertarla, por eso apenas el chófer que envió guillermo se detuvo frente al hotel, cargue a lea en mis brazos, ella estaba un poco ebria, con todo eso, de tener que lidiar con nadia y Esteban durante la cena, fue algo estresante, incluso yo me sentí tentada a tomar más de la cuenta, pero debido a que tenia que controlarme para no hablar demás y cuidar de lea, me contuve.—Buenas noches señor nastronardiSaludo el botones y con un leve asentamiento, me dirigí a mi habitación, el trayecto a la habitación fue silencioso y extrañe escuchar su voz, pero la dicha de tenerla en mis brazos, compensaba cualquier ausencia de palabra.Camine por el extenso pasillo y apenas llegue a la puerta de la suite, me quedé observandola por un momento prolongado, se veía tan pacífica, tan vulnerable, que tuve que agitar mi cabeza para salir de la ensoñación que me provocaba su belleza.Todo se encontraba en total penumbra y entre esta,
Pov LeaAbrí mis ojos y la luz que se colaba por mi ventana a medio abrir, me dejo ver mi desnudez.¿En verdad había pasado? ¿Leandro y yo habíamos estado juntos o todo había sido un sueño?La puerta se abrió de pronto y por esta entró, el hombre que robaba mis suspiros a diarios, traia puesto unos monos y su torso desnudo, con el desayuno en sus manos.—Buenos díasDijo acercandose a mi, para colocar el desayuno sobre la cama—HolaRespondí muerta de la vergüenza aferrándome a la sabana por mi desnudez, era más que obvio que mi sueño era real y si había pasado la mejor noche de mi vida con leandro.La vergüenza no me permitía verlo ¿Que pensaría de mi? Después de haber tomado un par de tragos y entregarme a él así nada más.—Leacoloco su mano bajo mi mentón y lo elevo para ver a mis ojos.—No te atormentes por lo que paso, para mi fue maravillosoSus ojos tenían un brillo inusual y la forma tan cálida en la que hablo, hizo que mis nervios y vergüenza se evaporaran enseguida.—Leand
Pov Lea4 semana después...—Felicidades, todo marcha de maravillas.Uno de los accionistas de empresas mastronardi se encontraba reunido evaluando el nuevo proyecto, esta demás decir que este estaba relaciónado con nuestro viaje a Suiza.—Gracias, espero que esto nos eleve a otro nivel.Ambos se colocaron de pie luego de evaluar dicho proyecto, mientras tanto yo me encontraba a su lado, verificando que todo saliera según lo planeado.—Siendo así, cuenten con mi apoyo.El hombre permaneció hablando por un breve momento hasta despedirse y marcharse.—Todo esta saliendo bien, creo que te has vuelto mi mejor amuleto.Dijo leandro acercándose a mi, para besarme de manera frenética en la privacidad de la sala de juntas.Nuestra relación marchaba de maravillas, estas última semana leandro y yo, nos habíamos hecho muy cercanos, cabe destacar que su familia con nuestras cercanía, han asimilado que esto es más real de lo que ellos pensaban—¿Que te parece si luego de terminar vamos a comer alg
Pov LeaVi como leandro rodeo a nadia con sus brazos de manera protectora y una pequeña molestia se instalo en mi pecho.—Esteban...Es..un desgraciadoDijo en medio de hipos y me sentí ignorada al ver como leandro acunaba su rostro en sus manos, tratando de reconfortarla.—Cálmate y explícame que sucedió¿Sucedió? eso me preguntaba yo, como era posible que hace unos instantes estábamos hablando de lo más tranquilo y ahora de la nada aparecía nadia para acabar con el mágico momento—El me...estabaRompió a llorar sin culminar la frase—!Sshhh!! nadia tranquilaLeandro trataba de calmarla, pero a ella las lágrimas no la dejaban hablar—Juagando conmigo, él quería era crear una sociedad para arrebatarme lo que me correspondía.El rostro de leandro se torno rojo debido a la molestia que genero escuchar esas palabras.—Es un desgraciado me las va a pagar.Dijo leandro soltando a nadia para salir enseguida de su casa, pero las manos de esta no lo dejaron salir por que lo retuvieron antes de
Pov Lea—Termino aquí y corro por los archivos para la junta.Me dije a mi misma, tratando de ordenar todo los documentos para la nueva junta, leandro aun no había llegado, por lo que tenía que dejar en orden su desayuno y sus cosas.—Buenos días.Dijo la madre de leandro, ingresando a la oficina de manera abrupta sin siquiera pedir permiso, la mujer me regalo una mirada despectiva, sin detener su marcha la cual iba dirigida a la caja fuerte del señor mastronardi.—!Lina¡ ayúdame aquí.Ordenó soltando su bolsa sobre el escritorio de su hijo, para luchar con la caja fuerte.—Lea, mi nombre es Lea señora mastronardiLa corregí, ella conocía mi nombre a la perfección pero lo hacia solo para molestarme.—Como sea, ayúdame a colocar esto sobre el escritorioLa mujer conocía la clave a la perfección, así que luego de ingresar la contraseña abrió esta y se encontraba tan centrada en sacar el monto de documentos que exigió mi ayuda, por lo que rodee mis ojos.—Esto me lo llevo, esto no y esto