Reencontrarse con Otto, hizo que el cuerpo de Amelia recordara todas las malas sensaciones que ella sintió aquel día en que él reveló su verdadero rostro.Su único deseo era salir corriendo de aquel lugar, pero tenía miedo de que él la viera y la persiguiera nuevamente.Así que se quedó quieto hasta que él se alejó de ella." ¡Está bien!" - susurró James sacando sus manos de su cara - ¡Está bien! - intentaba calmarla.De alguna manera extraña su voz la estaba calmando y el miedo que la dejó petrificada estaba perdiendo fuerzas." Señor... "- sus ojos que por un momento estaban sobre James siguió rápidamente Otto que pasó por él haciendo usar el cuerpo de James como escondite.James podía sentir la respiración pesada de Amelia contra su cuerpo mientras también sentía su cuerpo temblar.Curioso por saber quién estaba causando todo aquello, él miró, pero solo vio la espalda de Otto que se alejaba cada vez más de ellos."¡Ya se ha ido!"" ¿Ya se fue?" - Temida miró hacia los pasillos, pero
En frente de la mansión de los Collins, Amelia Green, una joven de veintidós años sentía su corazón casi salir por la boca, pues minutos antes había sido contratada para ser niñera de la pequeña Claire, su hija, que fue sacada de sus brazos recién nacida.Amelia no estaba segura de cómo su vida se había vuelto tan caótica como para convertirse en la niñera del niño que ella misma había engendrado, pero ella sabía exactamente dónde empezó todo, y todo comenzó con él, Otto, un hombre mayor cuya apariencia era fascinante.Otto Middle llamaba la atención por donde pasaba debido a su apariencia deslumbrante, su manera gentil de tratar a los demás, su voz grave, pero al mismo tiempo suave y sus palabras dulces como la miel.Ella lo conoció en una noche de primavera cuando el mismo entró en el restaurante en el que ella trabajaba, pero aún siendo un hombre seductor y gentil, Amelia veía la diferencia de edad como un obstáculo, después de todo, él era diez años mayor que ella.Pero después de
En el interior de la mansión de los Collins, mujeres de diversas edades y características entraban y salían."No, aún no he elegido una que sea perfecta para el puesto, pero no te preocupes, aún faltan bastantes para ser entrevistadas." - Odete hablaba por teléfono con James que estaba de viaje por trabajo.Odete era una mujer de veintinueve años que se vestía elegantemente, pelo corto corte Chanel y de apariencia seductora.Odete tenía un secreto que mantenía guardado desde su adolescencia, su pasión platónica por James que solo la veía como una hermana menor ya que la misma era hija de la niñera que cuidó de él por varios años y había permanecido en su familia hasta su muerte. Gracias a los padres de James, Odete fue capaz de estudiar en las mejores universidades graduándose en administración, pero tan pronto como supo que Sara lo había abandonado dejó todo para dedicarse a los cuidados de la casa, con la esperanza de que un día ella despertara el interés de él.Frente a la casa de
Caminando hacia la puerta de la residencia de los Collins, Amelia sentía sus manos sudar y sus piernas temblar.Su corazón estaba tan acelerado que ella podía sentir que él se detendría en cualquier momento.Con su pequeña maleta se acercó a la puerta, pero antes de que pudiera entrar fue sorprendida por Pedro que ya la estaba esperando."Buenos días señorita, Green!"" Buenos días!"- sonrió demostrando su nerviosismo."¿Sólo trajo eso?" - preguntó con sus ojos sobre la pequeña maleta que Amelia sostenía con su mano izquierda."Es todo lo que tengo!" - respondió avergonzada."Bien! ven conmigo!"El hombre vestido de uniforme blanco le dio espacio para entrar y la guió hasta las escaleras que daban acceso a los cuartos de la casa."Primero le mostraré el cuarto en que se quedará y sólo después le presentaré el resto de la casa" - decía mientras subía tranquilamente los escalones de la escalera "¡Llegamos!"El hombre se detuvo frente a una habitación de puerta rosa con detalles de marip
" ¿Pasó algo, Amelia?" - preguntó Odete al verla ruborizada frente a la puerta del cuarto de James."No, señora!" - intentó disimular."Entonces puede volver a sus servicios."" licencia!" A Odete no le gustó nada verla así, porque era una mujer y sabía muy bien lo que significaba esa expresión." ¿James?" - Golpeaste suavemente la puerta. "Puede entrar!""¿Ha pasado algo?""No, ¿por qué?" - respondió mientras separaba la ropa que iba a usar." Es que... déjalo!" - sonrió - "¿Qué te pareció la niñera?""De eso quería hablarte...""¿No te gusta?"" ¿Crees que ella es la indicada para cuidar de mi hija?"" ¿Por qué dices eso?""¿La viste? a pesar de ser joven, se viste de una manera extraña.""Siempre pensé que no te importaban las apariencias.""No es eso! es solo que... ella no se hace pasar por alguien calificado para cuidar a Claire."" ¿Crees que contrataría a alguien que no fuera eficiente?" - Se hizo la ofendida, pero estaba feliz de saber que él no se interesó por Amelia."Tie