Pensé en escapar... Pero no tengo tantas opciones donde ir, mi madre no lo comprendería o no le importaría, y no podría ir a mi casa ya que la última ves Neferet no tardó mucho en encontrarme. Pero pensé en las palabras de Neferet: siempre te protegeré.
No lo dejaría solo, tengo miedo al igual que Neferet pero tenía que confiar en el, quizás podría persuadir a su padre y así todo estaría bien, ¿porque el pedía tal cosa? Habían muchos rumores sobre el señor Raziel, pero nunca pensé que de verdad sería tan cruel, quizás por eso Neferet siempre era frío y no demostraba emoción alguna, su padre le había quitado toda felicidad quizás desde joven.
—Varick —gritaba con fuerza mientras corría en medio del bosque.Era su territorio, podía sentir el aroma de los lobos, seguramente yo olía a vampiro gracias a Neferet, solo esperaba que no me mataran.—por favor, necesito hablar contigo —supliqué mientras seguía corriendo en la oscuridad del bosque.Tropecé con una rama y caí al suelo golpeandome la cabeza, gemi de dolor al tocarme la cien, tenía un poco de sangre... Neferet no podría resistirse al aroma de mi sangre. Perdía la conciencia varios segundos pero luchaba por mantenerme consciente, solo había sido un golpe.—vaya que eres torpe —Varick apareció frente a mi con semblante tranquilo.
Varick caminaba junto a mi mirando el cielo con rostro sereno, tenía que volver al castillo pronto antes que Neferet se diera cuenta... Esperaba que no notará mi ausencia.—¿de verdad lo amas? —me pregunto al cabo de un rato.—si —respondí.Claro que lo amaba.—envidio eso, mi luna murió hace varios años —dijo con triztesa mientras fijaba su vista en la luna.—lo lamento Varick —me sorprendió que me contará algo tan personal.—bien sigue recto y llegaras al castil
—¿como te hiciste eso? —pregunta Neferet preocupado.—me caí —respondo avergonzada.Neferet hace gesto reprobatorio, diciéndome que debería de tener más cuidado, besa mi frente con cuidado y me acuna en su pecho, acaricia mi cabello mientras me tararea una canción.—es una linda melodía —susurro adormilada.—me la tarareaba mi madre antes de dormir —es la primera ves que menciona a su madre, me levanto para observarlo pero el cierra sus ojos y echa su cabeza hacia atrás.—¿donde está tu madre? &
La tarde transcurrió rápida entre todos los arreglos de la boda, me hicieron un peinado muy hermoso, una trenza rodeaba mi cabello con lindas flores sobre el peinado.Comenzaba a anochecer y no había visto a Neferet en todo el día, mi corazón latía con fuerza pues cada minuto se acerca a del gran momento, era hora de casarme con el, sería su esposa...Para siempre.Pero una pregunta hacía eco en mi cabeza, ¿me convertiría en vampiro? O ¿permanecería siempre como su sirvienta? De las dos maneras siempre estaría con Neferet pero me preguntaba que planes tenía conmigo para más adelante. Sacudí mi cabeza sacando esos pensamientos pues más adelante hablaríamos de ellos, con un
Neferet prometió que tendríamos una luna de miel si era lo que deseaba, sabía que se estaba esforzando mucho y eso era suficiente para mi, estar a su lado era lo único que me importaba en estos momentos pero también era algo riesgoso pues han pasado varios días desde que Neferet bebió de mi sangre y se que necesita tomar más, sus ojos carmín comienzan a perder brillo.—¿estas bien? —preguntó preocupada al ver que Neferet se mantiene con la mirada perdida.—claro —contesta con su voz apacible pero veo que sus manos están convertidas en puño.—volveré enseguida —salgo de la habitación antes de q
Desperté desorientada, no sabia cuanto tiempo había pasado, frote mis ojos con dificultad mientras me incorporaba.—Anne, por fin —Esmeralda sujetaba mi mano, aliviada.—¿donde estamos? —pregunté confundida.—en mi antigua casa, estaremos seguras aquí o al menos eso espero —se veía angustiada.—¿cuanto tiempo estuve dormida? ¿Neferet? —tenía miedo de que le pasara algo.—el se está ocupando del señor Raziel seguramente, estará bien —afirm&
—Anne —Esmeralda me sacudía levemente con ansiedad.—¿pasa algo? —pregunte mientras despertaba.—tenemos que irnos, algo esta mal —sus ojos no dejaban de ver la ventana que estaba frente a ella.Me levante de golpe y coji mis cosas tomándola de la mano.—son vampiros, corre —Esmeralda abrió la puerta con mucho cuidado y mirando a su al rededor.Corrimos en dirección al bosque para tratar de perder a los vampiros que estaban cerca del lugar.—¡allá van! —escuche un murmuró.
Observe a Neferet petrificada mientras una lagrima resbalaba por mi mejilla, Neferet fijo su vista en mi y sus ojos carmín parecían asustados.El miedo me impedía reaccionar, necesitaba correr lejos de aquel lugar pero era inútil pues el señor Raziel no me dejaría escapar, Esmeralda y los demás vampiros se encontraban afuera de la casa peleando entre ellos, no podía pedir ayuda.—Neferet —susurre aterrada.El señor Raziel me arrastro hasta llegar frente a Neferet e hizo un lado mi cabello dejando al descubierto mi cuello.—vamos hijo, bebe su sangre hasta la última gota —ordenó con enojo.Neferet dejó al cubierto sus co