Al día siguiente muy temprano sale a la plantación de acuerdo a la ubicación que el trabajador le había indicado, al llegar al lugar se da por enterado del desastre que la enfermedad les había causado a los cafetos, lo que no entendía el porqué de la indiferencia del hijo mayor encargado de esa área, había dejado que más de 106 manzanas que cubrían una determinada parcela cultivada estaba totalmente dañada. Como administrador y teniendo conocimiento de la situación no podía quedarse callado, tenía que hacer las averiguaciones. Después de meditar mucho por donde iniciar, decidió abordar al encargado de esa área, el hijo mayor de don Ricardo, era de carácter fuerte y prepotente, como un infeliz desdichado y con una enorme carga de resentimientos. Esteban era un hombre que tenía muchas carencias afectivas como sociales, de su padre nunca recibi&oac
Pregúntate si estas satisfecho contigo mismo por tus acciones y ¿a cuántos has agradado por todo eso? Fue por eso que aposté con todo por tus estudios, ¿me has devuelto la inversión? No porque necesite algo de ti, porque siempre creí que ayudándole desde un principio a los hijos para que alcen vuelo, eso les permita realizarse en lo que más quieran hacer de su vida y tampoco esperar que un día eso sea devuelto por el hijo, al contrario es nuestra responsabilidad cumplirles en todo momento, de esa manera no formar hijos cargados de reproches, no hacerles creer que como te ayudé como padre cuando eras joven y no tenías nada, ahora estas en la obligación de mantenerme, error, a los hijos se les forma para que enfrenten de mejor forma y por sí solo tomen las decisiones más acertadas, nunca los formé a ustedes para que en mi vejez me mantuvieran, al contrario me esforcé
Dicen que los mejores momentos llegan cuando menos te lo esperas y eso es lo que sucedió con nuestro primer encuentro, mi amor, besar es como volar muy alto hasta llegar al sol, mi primer beso con usted fue con la mirada que llegó a mi alma, quiero besarla hasta dejarla sin aliento. Perder el conocimiento, tocar su alma, llegar al cielo, perdernos hasta el infinito firmamento…La voz tierna y dulce que llegaba hasta el más profundo ser de Natalia y ella como manso corderito se dejaba consentir por aquellas mimosas palabras, que sin darse cuenta el joven deslizaba su mejilla lentamente con la de ella, suave y candorosamente, llegando sus labios hasta la comisura de los de ella, se fusionaron ambos como lumbre que flameaba, como chispa que cayó en estopa seca devoradas por llamas en estepa. Pasaron 43 segundos para volver a la realidad, misma que fue suspendida por Natalia, el joven muy caballeroso le ofrece disculpa que si se sobrepasó fue su
—A propósito de lo que usted me explica, la mucama me ha entregado una carta en donde el emisor nos dice que en tres días vendrá para leer el testamento que dejó mi padre y sugiere que todos sus hijos estén presentes y que dicho testamento solo puede ser leído cuando el administrador este presente cuando se efectúe la lectura de ese documento. Llegado el día acordado por el abogado y notario, se procedió hacer la lectura del testamento con todos los involucrados presentes, no sin antes pedir que sea el administrador que lea el documento, petición que le hizo don Ricardo en vida al abogado, el administrador procede con la lectura. TESTAMENTOYo, Ricardo
El tiempo transcurrió sin el más mínimo resquicio de represalia, hasta que una noche de luna llena Natalia había salido al corredor donde se sentía cómoda sentada en el exterior de su casa, apreciando la noche estrellada, su amado esposo acariciaba su vientre prominente, que era evidente, el nuevo ser viviente que ambos de manera ferviente daban gracias al omnipresente por la concepción y rogaban por su advenimiento. Natalia estaba en su séptimo mes de gestación fruto de la relación con Andrés y que a su vez los dos habían decidido cohabitar en la misma casa, después de que en silencio se casaron solo por las leyes terrenales. Conversaban amenamente, Andrés empujaba la silla donde estaba su amada sentada, una relación como un matrimonio de ensueño, por la ternura que irradiaban en ese momento, cuando inesperadamente dos camionetas a alta velocidad irrumpieron aquella propi
—No comparto tu manera de pensar, pero es la tuya, a tu edad, e independientemente de lo que te sucedió, en la vida solo hay dos opciones, que todos tenemos el libre albedrío de escoger, la buena o la mala, siempre has sido consciente de lo que has decidido hacer en tu vida, opciones tenías, quizás por cobardía de no enfrentar con más gallardía lo que decidías, te fuiste por lo más fácil, hablaste que las mujeres que no se forman desde temprano en principios se convierten en lo peor, mírate tú ahora en lo que te has convertido, ¿por querer tener en demasía? De manera clara y precisa le rebatía Andrés al secuestrador.—Es posible que tengas razón, pero hay una condición que como todo en la vida se requiere de mucho equilibrio, pues el mío lo perdí después de haber soportado tanto, hasta la culpa en mi
Después de presenciar tal acto, quedó extasiada, su cuerpo inmóvil, sin poder mover una tan sola articulación, pero si consciente de lo que había visto en aquella habitación, empezó a orar entre balbuceos y tartamudeos, ella sentía que oraba, después de unos minutos pudo retroceder como en cámara lenta, olvidarse de cerrar aquella puerta, y poder llegar a la suya, luego un temblor sacude su cuerpo, inexplicable a la vez, cae al piso, en silencio logra moverse y llega gateando hasta su cuarto, como pudo cerró la puerta, más candados no le puso, porque no los tenía, se tiró a la cama como pudo y se arropó desde los pies hasta la cabeza, el temblor se le fue quitando, pero el insomnio fue aumentando hasta en la madrugada dormida se fue quedando. Al día siguiente todos como de costumbre la mucama se levanta, sin contar nada de lo vivido, el niño como todo un buen reloji
A la mañana siguiente Agustín como de costumbre se levanta a la hora de siempre, levantó cuidadosamente el brazo de su madre que yacía sobre su cuerpo, salió de la cama con sigilo para no despertarla, pasaban las nueve de la mañana y Paquita le pregunta por su madre, él le contesta que cuando el salió de su cuarto quedaba dormida, sale de inmediato la mucama para la recámara, toca la puerta, pero nadie atiende, decide entrar, ve a Natalia muy bien abrigada durmiendo de lado frente a la puerta, se acerca donde ella, le habla, pero no le responde, toca su cuerpo para percatarse si le pasaba algo, aquel cuerpo un tanto pesado que no se movía, le toma el pulso, no se los siente, sale como loca de aquella habitación, en veloz carrera por el doctor del pueblo, después de unos minutos llega con él, este la observa, le toma los signos vitales, no respondía a nada, cuando este le dice:
—Acuéstese temprano que ya sabe que es lo que tiene que hacer mañana temprano, además mañana lo llevo a la escuela que es su primer día. Le dijo Paquita.—¿Por qué tengo que ir a la escuela? Pregunta Agustín. El estudio nos convierte en otras personas, se supone que, para hacer el bien, pero muchas veces esto resulta todo lo contrario, esa inteligencia desarrollada se desvía y toma un giro inesperado de lo que la gente espera como la familia, con el tiempo usted entenderá mejor las cosas mi niño. Fue la respuesta que le dio Paquita. En su primer día de clases un mundo totalmente desconocido para Agustín, apartado, no jugó con nadie, fue invitado, pero no aceptó unirse a ningún juego, tal parecía que era tímido, no sabía cómo relacionarse en un mundo del que no estaba acostumbrado. Esa misma tarde ve a su amigo del que no quer&