Maisie, que en un principio quería sentarse en el asiento del copiloto, se quedó sin palabras.

Tan pronto como se sentó en el asiento del pasajero trasero, Quincy se giró para mirarla y le dirigió una amplia sonrisa. “Buenos días, Señora Goldmann”.

Maisie rechinó los dientes. "Señora Goldmann tu tra…, ¡Conduce!”.

Habría completado la impertinente frase de no ser por la presencia de Colton.

Quincy hizo un puchero con los labios.

'La Señorita Vanderbilt es bastante temperamental. El Señor Goldmann tendrá que aguantar mucho en el futuro’.

Nolan se dio la vuelta y la miró.

El sentido de la moda de Maisie siempre había sido bueno. Llevaba un traje profesional, pero logró resaltar un estilo de moda único.

Parecía monótono usar una blusa básica de color negro puro en un traje de patrón negro sin botones, pero el degradado azul-negro y la falda dividida de encaje irregular contrastaban fuertemente con los tacones burdeos.

Hacía que el conjunto general no solo fuera menos monótono, sin