Al entender lo que ella quería decir, Maizie rechinó los dientes. "¿Cuánto necesitas?".

Katrina mostró ocho dedos. “$8,000,000”.

Maizie jadeó y casi se desmaya debido al asombro. “¿Y por qué mejor no robas un banco? ¿$8,000,000? ¿De dónde voy a sacar tanto dinero?".

“No finjas ser pobre, Señorita Hannigan”. Katrina cruzó los brazos sobre su pecho y se apoyó contra el respaldo de su silla. “$8,000,000 no es nada para ti. Conoces a muchos peces gordos en Bassburgh, quizá el padre del bebé...".

"¡Está bien, te ayudaré!". Maizie no pudo evitar interrumpirla mientras apretaba las manos que tenía bajo la mesa.

'Katrina conoce mi secreto, y no puedo permitir que arruine mi plan'.

Al ver que ella estaba dispuesta a ceder, Katrina recogió su bolso y se puso de pie. “Entonces esperaré las buenas noticias, Señorita Hannigan. Por cierto, puede que necesite que me consigas el dinero dentro de tres días".

Luego ella se dio la vuelta y salió de la cafetería.

Maizie estaba temblando de ira, mi