Nolan se acercó a Maisie y vio que estaba sentada de rodillas frente a la lápida de su madre con una mirada sombría. Le puso las manos sobre los hombros y miró la lápida.

“No te preocupes, madre. De ahora en adelante, cuidaré de Zee por el resto de su vida hasta que la muerte nos separe”.

Maisie levantó la cabeza y lo miró sorprendida, pero Nolan solo levantó las cejas en respuesta.

Nolan ayudó a Maisie a levantarse, y Maisie se dio la vuelta para mirar a Stephen. “Papá, ¿tienes algo que decirle a mamá?”.

Stephen se quedó momentáneamente perplejo. Su expresión abatida estaba llena de las cicatrices de las adversidades de la vida. Miró la lápida durante un rato antes de sonreír con amargura. “No. Ya le dije todo lo que quería decirle en mi corazón”.

…

Cuando Maisie regresó a su estudio, vio a Cherie paseándose de un lado a otro nerviosamente por el pasillo. Se acercó a ella y le preguntó: “¿Qué pasa?”.

Cuando Cherie la vio, se puso aún más nerviosa y dijo: “La policía encontró al