Alicia.
Entró a la tienda y me encuentro una escena que no esperaba, están dos tipos discutiendo.
-Pues sabes que puedes meterte tu maldito trabajo por el culo, renunció Andres, me escuchaste renunció.
El tipo me pasa echo una furia por un lado y miro cómo el otro sujeto se sienta en una silla para tatuar y da un gran suspiro.
*Vaya esto nos acaba de caer como anillo al dedo no crees Alicia.
*No sé tatuar Liz.
*Pero sabes dibujar que no es lo mismo tatuar y dibujar.
*Si me equivoco en el dibujo lo borro y si me equivoco en el tatuaje me parten el culo.
*Qué rico.
*Hay dios.
-Niña que quieres.
Dirijo mi atención al hombre que está en la silla es moreno, tiene los ojos verdes y el cabello oscuro.
-Ah bueno solo venía por curiosidad pero por lo visto veo que le hace falta un empleado y yo estoy buscando trabajo.
-Mira niña este trabajo no creo que sea para ti, sabes tatuar.
-
Alicia. Al principio esto de tatuar se me hizo algo extraño, ya que pues la tinta huele raro y el movimiento de la máquina hace que la mano me tiemble y tengo que hacer un poco de presión pero me está gustando ya que puedo dibujar, después de mi primer cliente pensé que no le gustarás pero cuando me felicitó me sentí realizada. Ya tengo aproximadamente cinco años aquí, me agrada estar con Andrés y Mónica, Andrés es un poco pesado pero Mónica tiene la sangre tan liviana que la adoro al parecer son pareja y formaron esta tienda, son como yo, me contaron que los demás de la manada los rechazaron solo porque no son exactamente iguales a ellos, que estupides y por lo que ellos me han contado Andrés se puede transformar y Mónica no, es una lástima ya que es tan animada de seguro su loba sería tada una bestia igual que yo soy toda una bestia salvaje. Estoy en la casa con la abuela ya que hoy es mi día de descanso. -Oye hija veo que has cambiado m
Alicia. Es seguido trabajando y ayudando a la abuela en la cacería, este mes nos ha ido muy bien, estoy actualmente en el supermercado, casi por lo general no ocupamos nada pero pues tengo que venir por algunos artículos de limpieza jabón, champú, papel higiénico cosas que no se pueden conseguir en el bosque, estoy actualmente en la zona de dulces tengo muchas ganas de comer azúcar, estoy escogiendo algunos chocolates y la voz de un hombre me llama la atención. -Te gustan las cosas dulces linda. Volteo a mi izquierda y está un hombre alto de cabello color café y ojos negros, me sonríe muy amablemente, hay es bastante guapo. -La verdad sí, me gustan las cosas dulces y a ti. -A mí me gustan más las cosas enchilosas ya sabes picante. -Interesante. Tomo una bolsa de chocolates y la hecho al carrito. -Bueno adiós. Lo dejo en el pasillo y me voy a pagar, puedo escucharlo cómo se acerca y hace fila detrás de mí.<
Alicia. Estoy en el trabajo y suena el celular del local está Mónica en la caja registradora y lo contesta, puedo escuchar la conversación ya que estoy cerca del mostrador. #Sí bueno. #Si ella está aquí espere que, que pasa espere. Me enderezó en la silla y pongo atención la chica que estoy tatuando también. #Aguarde, espere Alicia tu abuela. Apagó la máquina y me levanto, tomó el teléfono. #Abuela que pasa. #No me siento bien hija. #Voy para allá. Cuelgo el teléfono y tomo mis cosas. -Mónica dile a Andrés que, que tuve que irme con mi abuela se puso mala, adiós. No puedo decir palabras coherentes, ni hacer una conversación normal, salgo de la tienda me subo al auto, lo enciendo y piso el acelerador hasta el fondo, voy esquivando carros al mirar la entrada doy vuelta sin frenar, las llantas traseras derrapan en la graba, sigo derecho hasta llegar a la cabaña, abro la puerta y veo a mi abu
Victor. Este tiempo se me ha hecho eterno, Alicia me bloqueó del celular, cada día me desespero más al no poder tenerla cerca, siento que algo me falta una parte de mí, estoy en mi oficina revisando algunos papeles y contratos cuando una voz en mi cabeza me alerta. *Alfa está entrando un carro a toda velocidad al pueblo y no va a creer quién se acaba de bajar del vehículo y entró al hospital. *Quién se bajó del vehículo. *Creo que es Alicia su luna. Al oír eso sentí como Jacob pegó un brinco dentro de mí. *Está seguro. *Creo que sí la miré hace mucho pero si es ella. *No la pierdas de vista. *Sí señor. Podrá ser Alicia en el hospital estará mal o tal vez vendrá a ver a alguien, espero algunos minutos más qué el centinela me diga que pasa, es el beneficio de tener centinelas infiltrados en la policía, solo han pasado 5 minutos pero me parece algo eterno, no puedo ni siquiera concentrarme ya en los papeles
Alicia.Cuando siento que Victor ya no me está viendo me despegó un poco del médico, abre la puerta de la habitación y entró.-Muchas gracias señor.-Arturo.-Arturo muchas gracias.Lo miro como se va y me acerco a mi abuela, me siento en la silla al lado de ella y la observó dormir. Después de unos minutos la miro despertar.-¿Abuela cómo estás?-Estoy bien Alicia solo un poco aturdida, ¿dónde estamos estamos?.-Estamos en el hospital central que está en el pueblo de la manada de Víctor, abuela segura que estás bien.-Sí Alicia sí estoy bien solo me siento un poco cansada.-Descuida abuela yo estaré aquí para ti.Escuchó la puerta de la habitación abrierce es una enfermera.-Disculpe señorita pero se ha acabado la hora de visita.-Está bien gracias.Me acerco a mi abuela y le doy un beso en la frente, me retiro del cuarto y voy caminando por los pasillos para la salida.Victor.Pue
Alicia.Subo al auto y sigo enojada.*Quién berga secre para decirme qué puedo y que no puedo hacer, ni que fuera mi abuela, con una chingada está pero si bien pendejo, esta idiota.*Alicia lo hiciste enojar bastante.*Me vale una monda Liz no le pertenecemos a él entiende eso ya.*Alicia pero yo sí le pertenezco a el.*Pero yo no.*Alicia somos la misma.*Cállate ya, necesito comer algo y un trago.Conduzco al único lugar en dónde se que seré bienvenida, me dirijo al departamento de Hugo, al llegar tocó un par de veces y me abre la puerta, me mira con sorpresa.-Alicia eres tú.-La misma que viste y calza, qué no te gusta cómo me veo.-No pues este te ves muy bien, te queda muy bien el corte y el color del cabello.-Vamos a hablar un poco claro.Paso y me siento, le platico lo que ha pasado él está preocupado por mi abuela pero feliz por mí.-Bueno Alicia no creo que solo hagas venido a contar
Alicia.Mi abuela ya tiene dos días en el hospital, fui a la cabaña a recoger unas cuantas cosas, ropa principalmente porque no puedo estar todos los días usando camionetas tan pequeñas para mi busto y le llevo unos cambios a la abuela por si la dan de alta, dejó la maleta en casa y me dirijo al hospital, al llegar todavía no es hora de visita pero me encuentro con Víctor, está sentado en la sala de espera está leyendo un periódico en cuanto entró se percata de mi presencia me da una sonrisa yo volteó los ojos con enojo.*Este día será un martirio para mi.*Pero para mí es un exquisites estár tan cerca de el Alicia.*Deberias tener más amor a ti misma querida.Falta media hora para la hora de visita, estoy revisando mi celular, escucho una voz que hace siglos no escuchaba.-Maldita escuincla dime qué le hiciste a mi madre.Volteo y efectivamente está el maldito parásito y mi madre.-Hola papá hace mucho tiempo que no los miraba,
Alicia.Después de que Víctor se fue me quedé un rato más esperando a que ese par de alimañas salgan. Estoy parada viendo por la ventana cuando escucho pasos venir a toda velocidad volteo con curiosidad y son mis padres, vienen realmente molestos creo que mi abuela les dijo que no, se van sin siquiera despedirte de mí cosa que en verdad no me importa me deje de preocupar por ellos desde hace mucho tiempo.Me dirijo a la habitación de la abuela al entrar puedo ser como tiene la mirada perdida en la ventana, me acerco a ella ya que se mira melancólica.-Abuela estás bien.Voltea y me da una sonrisa triste.-Claro Alicia estoy bien.Da un gran suspiro, yo se lo que tiene está triste que solo sus hijos la vengan a visitar cuando ocupan dinero es difícil no sentir tristeza ya que uno como lobo siente la necesidad de estar con los suyos, me acerco a paso lento a la cama me recuesto junto a ella y me pegó a su cuerpo le doy un gran abrazo, intento darle