—¿Quién eres tú? —Yo soy al que todos llaman Luzbel, Lucifer, el primer Ángel caído, has escuchado de mí, dime quién no—. Me levanto de la silla y me desplazo a su mini bar. —Un tragó—. Le brindó el que he servido. —No gracias—. —Deberías aceptarlo, podría ser el último en toda tu m*****a existencia—. —No podrás contra nosotros—. —Tan seguro estás que tus experimentos podrán contra mí, crees que tus genes combinados podrían acabar conmigo—. Me tomo todo el trago. —Nosotros somos el futuro—. Rio a carcajadas. —Ustedes son el futuro a quien quieres engañar, sin el ADN de los licántropos y vampiros no tendrías nada—. Lo miro. —Hasta podría decir que tienen más fallas que las curas humanos, sabes que necesitas de ellos para poder seguir con tus estudios, pero ya tu fin está cerca Saúl—. —El tuyo se acaba hoy maldito demonio—. —Estoy maldito desde que fui desterrado, una maldición tuya no es nada—. Siento la presencia de más de mil seres. —Acaben con él—. Les ordena a esas abomina
Narra Emily. –Voy matar a Darían de un infarto, ataque o lo que suceda primero—. Destapó la boca de Bri. —Entonces si—. Asiento. —Quiero sorprenderlo no se quiero que la noticia sea especial para él—. Miro a Briana. Desde que me di cuenta hace diez días me hice la idea de querer darle una sorpresa a Darían, sé que le gustará, desde que llegó Yandar no para de decir que quiere uno. —Y qué piensas hacer—. —Algo se me ocurrirá no le digas a nadie—. —Está bien seré una tumba, pero él se dará cuenta—. Hice una mueca. —Si, pero lo haré esta noche antes que Adrián siento mis feromonas, si tu ni nadie la siente eso significa que mi lobito tampoco—. —Si, pero Adrián tiene el olfato más desarrollado—. —Lo haré esta misma tarde necesito algunas cosas crees que puedas ayudarme—. —Sera todo un placer ya que no me dejaste sorprender a mi lobo—. —Lo siento no fue mi intención, en verdad se me salió—. —Está bien no importa—. —Primero iré a comer, y luego trabajamos en la sorpresa—. Asie
No sé cuánto tiempo llevamos revisando todo el lugar, hemos revisado todo de manera minuciosa y no hemos encontrado nada. —No creo que ellos vuelvan a entrar por aquí Joseph—. —Es cierto y que harás con Yilema ya casi está recuperada—. Lo miro. Yilema no ha curado como todos los licántropos lo hacen, le mandé hacer unos estudios, pero con ella no habían hecho experimento, tal vez ni sabía de ellos, lo que me llevo a la conclusión de que no curaba rápido por lo que le hizo mi luna cuando la toco usando su nuevo don. —Tendrá que ir ante el consejo, yo daré su castigo—. —Es una lástima que alguien como ella estuviera confabulando en contra de Emily, que no vio lo que le hizo a Megan—. —Si, pero nadie aprende de los errores de los demás—. Empecé a caminar de vuelta a casa. —¿A dónde vas? —. Lo miré. —A casa—. —Tan pronto—. —Si quiero ver a mi luna y a mis hijos—. Fruncí el ceño. —¿Qué sucede Joseph estas raro miras el reloj a cada rato? —. —No es nada es que le dije a Briana q
Narra Emily.Esta vez sí pienso matar a Darían, como se atrevió a decirle a todos que estamos esperando un bebé, sé que se iban a enterar de todas maneras, ¿ya qué?, no se puede hacer nada, está feliz no tengo que utilizar mi don para saberlo, no les voy a negar que me asusté cuando me dijo que no, me decepcione escucharlo decir no, que casi hago una bola de fuego y se la lanzó, pero, lo recompuso cuando dijo que era la mejor noticia.Y ahora aquí estamos recibiendo felicitaciones de toda la manada, estoy agotada de estar de pie y con Yandar en brazos, la bolita de carne esta no quiere estar con Darían u alguien más…(**).—Qué bueno que terminó todo—. Digo al despedirnos del último que se nos acercó a felicitarnos.—Estas molesta verdad—. Suspiro.—Si quería decirle a Maikel primero y ver como recibía la noticia, pueda que se ponga celoso—. Lo miro, meto a Yandar en su coche.—Pero está feliz con Yandar—. Sonrió.—Si, pero Yandar no salió de mí y eso él lo sabe bien—.—Tienes razón m
—Veré que sabe mi padre—. Le dice Darían.—Espero y sepa algo yo investigaré por mi cuenta nada me es oculto y si ese ser trabaja en las sombras yo lo encontraré—.—Gracias Daimon—.—Lo hago por mi hija no por ti—.—Papá tienes que llevarte mejor con Darían—. Lo miro. —Ahora que serás abuelo tendrás que tratarlo más—. Papá me mira y luego a Darían.—¿Estas?, como no lo sentí—. Me mira por unos leves minutos. —Venia tan centrado en decirles la noticia que no sentí su presencia, es un lobo, pero tiene una pequeña parte demonio—.—Papá—. Lo regaño.—Lo siento mi amor—. Niego, y a Darían se le dibuja una gran sonrisa.—Va ser un lobito—. Asiento, en eso soy abrazada y llenada de besos.—Puedes dejar eso para después—. Le dice papá con cara de fastidio a Darían. —Ese es él engendro del lobo ese—. Miro a papá.—Es un bebé papá, él es inocente de todo lo que hizo su padre y su nombre es Yandar—.—Eso es muy cierto—. Me apoya Darían.—Como sea, iré con tu madre a darles las nuevas, sé que le
Narra Maikel. Al fin conozco donde vivió mamá, ella me dijo que mi papá vive aquí a unas dos horas, a veces siento el deseo de verlo, pero no quiero que mi mamá se moleste. Voy al árbol que hay en la casa de la abuela y me siento en el pasto. —Theo te gustaría ver a tu papá—. Le pregunto a mi lobo. —No sé—. Me responde. —¿Por qué? —. Le pregunto. —Él le hizo daño a mami—. Responde. —Si, pero yo quiero verlo, quiero saber si de verdad está arrepentido de hacerle daño a mami—. Digo mirando a los árboles. —Dile a mamá que quieres verlo—. Me dice Theo. —Tengo miedo de que mami se enoje o se ponga triste por querer conocer más a mi papá, además ella va tener un bebé y no quiero que le pase algo a mi hermanito—. Agacho la cabeza. —Yo no creo que le pase algo, solo dile la verdad a mami—. Me anima Theo. —Si voy a decirle—. Levanto la cabeza y veo a mamá. —Hola mi amor que haces aquí solo—. —Mami puedo hablar contigo—. —Si mi amor siempre cuando tú quieras puedes decirme lo qu
Narra Roberto. Miro a mi hijo lo veo hacer todas las muecas que hacía Emily, lo sé porque la veía a escondidas, si fui un cobarde que no supo ver y apreciar a esa bella chica que desprendía inocencia, esa inocencia que yo destruí por imbécil. Pero voy aprovechar esta tarde con mi hijo, lo voy hacer al máximo es lo único que tengo de mi mate, mi pareja que la diosa luna me dio y la perdí por idiota. Algún día él tendrá que tomar su lugar como Alpha de esta manada, y yo estaré ahí para enseñarle, no dejaré que mi padre dañe su mente cómo lo hizo conmigo haciéndome creer que los humanos son unos cobardes, si Emily era humana y soporto todo lo que le hice y le dio una oportunidad a nuestro hijo, entonces los humanos no son cobardes, y yo puedo dar certeza de ello viví como uno por varios años. —Te gustaba mamá antes que le hicieras daño—. Por poco y se me va el helado por la nariz. —Si me gustaba mucho—. —¿Puedes decirme cómo era? —Si claro, ella era una chica alegre, siempre sonre
—Nos vemos Alphas—. Asiento.—¿A dónde me lavo las manos? —.—Vamos te llevo al baño—. Nos levantamos y vamos al baño, se lava las manos y salimos.—A dónde vamos ahora, ya no quiero estar aquí, esa niña me está mirando mucho—. Sonrió.—Y no te gusta que te mire—.—No es eso, es que no quiero que ella me miré, así como mamá mira a papá Darían—.—¿Por qué no?—Por no quiero, ella no es mi mate—. Asiento.—Vamos te llevo a la plaza te quiero presentar como mi hijo—.—Y ¿Por qué tienes que hacer eso? —. Pregunta curioso.—Porque eres mi hijo, él hijo del Alpha—.—¡Oh! —. Salimos del local y caminamos a la plaza…Cuando estamos a unos metros de distancia veo a casi toda la manada reunida en la plaza donde está la espada enterrada en la piedra en forma de luna.—Esto será un caos Roberto te das cuenta que todos saben que Abigail era la supuesta luna—. Me dice Daniel.—Lo sé, yo me atendré a las consecuencias, igual ya el consejo lo sabe y no me castigaron porque jamás marque Abigail como m