Regrese a casa, subí a la habitación a prepararme para la cena, aún en mi cabeza rondaba lo que me dijo la muerte, fue un lindo gesto de parte de ella venir a visitarme, “la visita de la muerte”...Se llegó la hora del convivió con los invitados de Darían, baje ayudarlo a recibir a todos como la luna que soy, no les miento me siento exhausta supongo es mi parte humana que me pide que descanse.Algo me dice que está noche ocurrirá una desgracia, mi parte demonía esta alerta y no es por lo que me haya dicho mi querida Abu Yaria, lo presiento desde que me levanté, ¿que será no se?A lo lejos veo a Josué y su mate, se ven felices aunque no creo su papel de buen hombre, aún no tengo nada en contra suya pero se que tarde o temprano caerá y hay estaré yo en primera fila para exponerlo ante Darían, cuanto me gustaría hacerlo ya, pero eso sería como aprovecharme de mi puesto de luna, ahora me siento con las manos atadas, siento que si hago algo mal repercutirá en Darían como Alpha Rey y no qui
Narra Darían.Corrí lo más rápido, se que mi luna no está en peligro, pero tal vez su parte humana si salga lastimada, aún no entiendo bien como funcionan sus dones y lo que ella es.Al llegar a casa me dirigí a la habitación, di pasos largos, mi corazón estaba acelerado, no por correr si no por el miedo de que algo le sucediera a mi luna, a su parte humana.Al entrar a la habitación vi a una mujer vestida de negro con capucha negra, tenía una estaca de plata en las manos y estás levantadas sobre su cabeza.—Maldita debiste estar muerta como lo pensamos todos, tenías que ser un maldito demonio, jamás debiste volver aparecer, no eres mas que una impostora—. Mire hacia donde estaba Emily ella aún seguía dormida.Bajo la estaca, le agarre las manos y se la quite la tire ya que quemaba mis manos, la tome del cuello, era Abigail.—Tu maldita, no te cansas de hacerle mal a mi luna, debí dejar que te matara—.—¿Tu luna?, no ves que te tiene bajo algún conjuró—. Tenía la cabeza gacha, que bu
—Así que ya conocías a la luna suprema—.—Si la maldita vio cosas que no debió, debí acabar con ella ese día—.—¿Por que no lo hiciste? —. Pregunta mi luna. —Hubiera preferido eso, a tener pesadillas de lo que le hiciste a esa pobre humana y escuchar todas esas asquerosidades que me decías—. Josué la mira perplejo.—¿Pero como? —. Pregunta uno de los hombres.—En verdad creen que una estaca de plata envenenada clavada en mi corazón me mataría, les informo que un demonio no muere con nada, ya estamos muertos—.—Eso crees maldita voy a divertirme ahora si contigo—.—Si fuera en aquel entonces me hubiera intimidado esas palabras delta Josué—. Emily sonríe de manera sádica. —Pero ya no lo hacen, si al menos hubiera tenido una parte de mis dones de demonio hubiera acabado contigo por haber matado a esa chica sin compasión alguna, es hora de rendir cuenta Josué—.—Y que me vas hacer, lastimarme y torturarme como lo hiciste con el Alpha Roberto y Abigail—. Emily mueve su cabeza con esa sonri
Al llegar a esa casa y ver al delta Josué con ellos fue sorpresa para mí, pero Yilema bueno de ella si, cerca de Darían fingía y detrás de él tenía miles de pensamiento en mi contra.Pero Josué yo no le había hecho nada nunca, él fue el que me causo traumas a mi, por ello no tendría piedad.Deje salir a mi demonía, lo empecé atacar con todo lo que tenía, pero era fuerte, no tenía la misma fuerza que debe tener un licántropo, eso me llevo a la conclusión que también habían hecho experimento con él, nuestros puños y patadas chocaban, de una patada lo mandé volando hacia fuera.No pude ver en ningún momento quien era él que andaba tras de esto, se levantó con una gran sonrisa.Él empezó atacar, me lanzó zarpazos los cuales esquivaba, no estaba usando mi fuerza, me lanzaba puños, patadas bien coordinadas, en una de esas me dio un golpe en el antebrazo, me corto con sus garras, me lanzo una patada así logrando hacerme estrellar contra los árboles.Mis heridas sanaron de una vez, no como la
Narra Darían.Llevo más de diez horas viendo dormir a mi luna, me quedé dormido por cuatro horas se que esta viva por que aún respira, Maikel vino hace un momento pero Briana se lo llevó, no se por cuanto tiempo irá dormir ella.—¿Aun no despierta? —. Pregunta la señora Esther.—Aun no—.—Es razón para preocuparme—. La miro.—No señora Daimon me dijo que sólo estaba agotada que necesitaba descansar—.—Pero lleva más de catorce horas dormida tengo miedo—.—Cariño no te preocupes estas en tu último periodo de gestación—. Le dice Mario.—Lo se pero es mi niña no la estuve en mi vientre pero la amo como si fuese mía—.—Lo se, pero ella no estaría tranquila si algo le pasa a sus hermanos—. La mira con amor.—Señora Esther no sé preocupe ella estará bien, vaya descansar un rato, estoy seguro que cuando ella despierte será a los primeros que quiera ver—. Ella asiente y sale de la habitación cerrando la puerta.Me acosté al lado de ella le di un beso en la frente, tome su mano y la besé, cerr
—Lo se amor, te amo—.—Tengo que ver a mi bebé que hora es—. Muerdo mis labios.—¡Darían!—Lo siento amor pero todos pensábamos que ibas a invernar, o algo así—. Achina sus ojos. —Son las cinco treinta de la tarde amor—. Se levanta y me mira.—¿Que?, mi bebé debe estar preocupado, quien me manda a mi estar usando dones que aún no controlo—. Se levanta de la cama y empieza a dar vueltas, la miro embelesado.—Emily—. Digo casi gimiendo.—He dejado a mi monstruito solo todo el día—.—Mi luna—. La garganta se me a secado, no ve como me está poniendo.—Debe estar pensando que su madre ya no lo quiere—. Me levanto de la cama y la empotró contra el sofá.—No te das cuenta como me pones, caminado así desnuda de un lado para otro—. Tomo sus piernas y la subo, un gemido se le escapa cuando mi miembro roza su entrada.—Tengo que ir con... aaah—. Me introduzco dentro de ella. —Darían tengo que oh por la Diosa luna—. Camino con ella hacia el baño.La vuelvo hacer mía nuevamente, no duchamos, ya du
Al día siguiente convoqué a una reunión con los Alphas y el concejo, teníamos que tratar la situación que se había dado con nuestro nuevo enemigo, el rey de los vampiros se nos unió al igual que los líderes de algunos clanes.Ellos también le afectaba esta situación ya que también se está usando su ADN con fines de acabar con nuestra especie y eso no lo vamos a permitir.Después de la reunión y quedar en acuerdo de que cada especie investigaría por su cuenta hasta tener algo nos reuniríamos, no me pareció esa manera pero así lo quiso el rey de los vampiros.De igual forma mandaría a sus científico de más confianza para estudiar al cadáver que tenemos y digo él que tenemos ya que los otros dos desaparecieron como arte de magia, no creo que algunos de ellos vino y se llevó los cuerpos, no quiero culpar a mi querido suegro tampoco.En la tarde casi todo los Alphas estaban regresando a sus manadas, tienen que cuidar de ellas por si hay algún ataque, el único que seguía aquí era Roberto.E
—Cariño no creo que Joseph haya hecho el trabajo solo, tú debiste ayudar en algo—. Suelto la carcajada que estaba reteniendo. —Si ayude en algo pero le delegó ese cargo a él—. Niego, término de limpiar a la bolita de carne y lo visto. Tomo a Yandar en brazos y me siento en la mecedora, que Darían casi destruye al enterarse quien la había hecho, primero le pareció la más linda y bien tallada y cuando se enteró que fue Diego él que la hizo se puso histérico y la lanzó, si no hubiera tenido poderes se hubiera hecho papilla, eso fue hace dos días. Esta muy raro desde ese día, me enoje mucho con él que casi lo saco volando de aquí. —Bri como es el celo de los hombres lobos—. Bri me mira. —Son muy posesivos, territoriales y no se despegan de su pareja si la tienen y si no pues se pegan a cualquier piernas que vean por ahí—. —Genial ya no tengo dos lobitos posesivos ahora tengo tres, no es grandioso Yandar—. Sus ojitos se cierran y se abren. —Te deseo suerte con ello Emi cuando Adrián