MauricioAntes de acostarnos a dormir le prometí a Gabriela que la traería a conocer la famosa cascada de la que tanto disfrute cuando era niño. Es por eso que en este día nos encontramos rodeados de estos esplendorosos arboles donde el sonido del agua nos hace saber que estamos muy cerca.—Mi linda hemos llegado —le informo y la sonrisa que se le dibuja en su rostro parece de portada de revista.—Mi amor esto es un paraíso, con razón tú no querías salir de aquí —se expresa maravillosamente al divisar lo hermosa que se ve el agua cristalina en este lugar.—Ahora comprendes porque valían la pena todos los castigos de mi mamá —le digo divertido y me apresuro a bajar del caballo para luego amarrarlo y brindarle mis manos para ayudar a bajarla.—Por supuesto que te entiendo y aquí entre nos, yo también hubiese hecho lo mismo con tal de no salir nunca de aquí —confiesa abiertamente sin dejar de sujetar mis manos.—Me alegro que digas eso porque hoy pienso disfrutar, de este lugar, todo el
GabrielaNo comprendo cómo un hombre puede estar tan seguro de todo, lo veo sonriendo y casi puedo tener la certeza de que se siente victorioso aun sin haber empezado la carrera. Se perfectamente que desea que pierda porque a él le conviene más que a mí y con esa guiñada de ojo intenta distraerme pero me mantengo firme y respiro profundo, total quiero demostrarle que aunque no fui a ningún cursito puedo ser mejor que él, al menos en la natación.—Sigo su juego y con una sonrisa ilumino mi rostro —la meta será llegar hasta aquel tronco que está por esa piedra, el primero que llegue ese será el ganador —le digo señalando con mi mano izquierda y asiente.—De acuerdo ¿quién da la señal tu o yo? —me pregunta y no confió en su linda sonrisita que me huele a trampa.—Yo la doy. Prepárate para perder —contesto muy segura y continuo —en sus marcas, listo, fuera —grito a gran voz para luego sumergir nuestros cuerpos en la profundidad de esta agua tan cristalina. Es increíble ver lo maravillosa
MauricioSus manos están puestas en mi rostro mientras que sus piernas continúan enredadas a mi cintura, de esta forma confirmo que soy una vez más prisionero de sus encantos. Ella me mira y muero de la ternura al verla decidir de qué manera le es más fácil complacerme, no sabe si empezar por mi cuello o simplemente volver a mi boca para que continúe deleitándome con sus besos.—Con la yema de mis dedos acaricio sus labios — quieres que te enseñe, una de las cosas que gusta durante en el sexo —comento al verla un poco indecisa y asiente.—Me encantaría saberlo —responde con tanta inocencia que cautiva cada uno de mis sentidos en estos momentos.—Suavemente tomo su mano y la llevo hasta la parte baja de mi oreja —Si empiezas por aquí con tu boca, me harás olvidar hasta de que soy psicólogo y mira que estoy siendo bueno contigo porque no suelo revelar mis secretos —digo divertido.—Y como una buena practicante sigue mis instrucciones —por allí será —me advierte he inmediatamente llega h
GabrielaVivir estos momentos con el me parece un sueño, sobre todo si me pongo a pensar en la manera como nos conocimos y como poco a poco se fueron dando las cosas hasta llegar al punto donde nos encontramos hoy. Mi Iron Man es el mejor hombre del mundo, atento caballeroso responsable pero sobre todo con una carrera absolutamente brillante que es el blanco perfecto para que muchas mujeres fijen sus ojos en él. Y no es que yo me sienta insegura ni nada de eso, pero reconozco que sus atractivos físicos acompañados de los puntos que acabo de mencionar son una tentación para cualquiera, en una ocasión cuando hablaba con Carla ella me comentaba que existen profesiones que son muy llamativas tanto para hombres como para mujeres como por ejemplo los músicos, los policías pero sobre todo los que trabajan en el área de la salud, en ese momento no le di mucha importancia a su comentario pero hoy en día que estoy viviendo lo mejor de mi vida vuelven esas palabras a rondar por mi cabeza.Termin
MauricioLas dudas que despejamos al medio día nos sirvió para darnos cuenta de que nuestro amor es más fuerte que cualquiera cosa que quiera interponerse en nuestra felicidad. Sé que es normal que Gabriela pensara en esos pequeños detalles que me dijo y esta de lógica en mis pasadas relaciones una de las primeras cosas que afectaban era precisamente eso, siempre me pasaban celando porque le sonreía a una mujer o porque simplemente las pacientes me mandaban detalles debido a mi comportamiento hacia ellas. Pero eso no quiere decir que yo haya sido un mujeriego y que a todas me las haya llevado al dormitorio pasándome por alto las reglas establecidas en centro de salud Buenos Aires. Soy consciente de que la única mujer que me ha hecho saltar esas normas ha sido Gabriela y todavía no me explico cómo logró cautivarme pero de lo que si estoy seguro es del inmenso amor que siento por ella y por ella soy capaz de estar jugando con fuego.Termino de colocarme mis zapatos y voy al espejo acomo
GabrielaEn la cena prácticamente me la pase regañándolo con la mirada, solo a él se le ocurre tocarme de esa manera en el momento menos indicado. Aunque para ser sincera me gusta todo lo que me hace, con Mauricio he aprendido lo que se siente dar un beso, un abrazo, una caricia y ser correspondida pero sobre todo lo rico que es hacer el amor, parece mentira pero si me hubiesen dicho hace 3 meses atrás que me iba enamorar de este psicólogo tan hermoso, que conocí una tarde en mi peor momento, jamás lo hubiese creído y mucho menos después de todo lo que he pasado en mi vida, él me ha enseñado a ser fuerte, a creer en mi misma, sus palabras son una motivación para mí, sus besos me dan la tranquilidad que siempre he necesitado, sus caricias me ayudan a tener la seguridad que siempre me falto y su amor me ayuda a reponerme de ese pasado que tanto daño me hizo. Con Mauricio siento ganas de vivir de disfrutar de todo lo que siempre me negué hacer, de olvidar todas esas pesadillas y soñar so
MauricioSe me hace tan difícil imaginar que a partir de mañana nuevamente volveremos hacer psicólogo y paciente, sobre todo después de este fin de semana donde nos hemos demostrado cuanto nos amamos. Sinceramente creo que no volveremos hacer los mismos al estar a solas en ese consultorio, donde esas sillas, ese computador y todo lo que se respira en ese lugar han sido testigos del gran amor que sentimos, desde el primer día que nos conocimos. Nunca pensé que se me cruzaría por mi mente decir esto, pero ni siquiera con Verónica Santillana sentí todas estas sensaciones que Gabriela me ha hecho experimentar en estos 3 días, sus besos son una mezcla de dulzura y tentación al mismo tiempo que hacen que me pierda en el brillo de sus ojos, los cuales me miran como ese súper héroe que llego a su vida para salvarla de sus principales temores.La observo caminar y aparte de que se ve bien divina me felicito a mí mismo por tener a mi lado a una mujer tan encantadora, una mujer que pese a las ci
GabrielaLuego de regresar de esa preciosa hacienda lo primero que hizo Mauricio fue llevarme al apartamento donde vive mi amiga Carla, es que habíamos acordado que al llegar a la ciudad llegaríamos primero allí y luego ella me traería en su carro para que mi tía Rosiris no sospechara que me la pase todo el fin de semana con Mau ya que ella piensa que nos quedamos en una casa finca por un último trabajo para la presentación de la tesis en la universidad. Durante el trayecto le comente a mi amiga lo especial que fueron esas 48 horas con el amor de mi vida y que aunque no queríamos regresar nos toca volver a la triste realidad, el por su empleo y yo por mi tesis.—Bueno tía me despido y órale mucho a Dios para que mi tesis sea una de las mejores —le digo luego de acabar el desayuno.—Ya te dicho que no me llames tía porque parezco más bien tu hermana mayor, mejor llámame Roxi se escucha más juvenil, más refinado y por lo de la oración no te preocupes que yo tengo fé de que tú vas hacer