Gabriela¿Cómo será mi vida de casada con Mauricio? ¿Qué dirán las personas que nos conocen? ¿Cómo enfrentare la fama? Son preguntas que rondan por mi cabeza mientras estamos en la cocina preparando el desayuno. Para ser sincera no me esperaba esta noticia, ni mucho menos que la vida me sorprendiera de esta forma tan maravillosa, y lo digo por mi libro ese que se encuentra en revisión y prontamente verá la luz del día. Pero mientras eso llega aprovecho para disfrutar de estos pequeños momentos con mi súper héroe, que tal parece que no se las está llevando nada bien, con esas arepas que está cocinando. Solo me lo quedo viendo y la risa no se hace esperar —Como psicólogo eres excelente pero como cocinero eres malísimo —Bromeo al darme cuenta que las arepas están quemadas y la estufa esta toda llena de aceite sin contar la cantidad de masa que ha desperdiciado.—Un pequeño descuido pero tengo todo controlado —Habla divertido pero en medio de esta conversación una gota de agua cae en el
MauricioEl encuentro con la tía de Gabriela no estuvo nada fácil y más cuando me hizo prometer que me casaría con su sobrina en menos de un mes. Afortunadamente mi linda intervino diciendo que un mes era poco tiempo para organizar una boda, ella prefería realizarlo dentro de 4 meses, cosa que me parece justo ya que 3 meses culminara sus terapias y por fin vamos a poder gritarle al mundo entero que nos amamos.Mientras tanto me dirijo a la casa de mis padres, en menos de 3 semanas será la graduación de mi Gaby y pienso organizarle un pequeño compartir. También aprovechare ese día para presentarla oficialmente como mi novia y prometida, claramente esta solo la familia por el momento.— ¡Hijo! Que rico tenerte por aquí. Me imagino que te quedaras a cenar con nosotros —Propone mi madre luego de darme un beso en la mejilla.—Como decirle que no a la mejor madre del mundo —Respondo haciendo que se le dibuje una sonrisa en su rostro y voltee a ver a mi padre que está justo frente a mí.—Esc
Gabriela10 DE AGOSTOHace 5 años atrás veía este día tan lejos, tanto así que las horas de clases me parecían extensas y muchas veces hasta me aburrían ciertas materias. Yo creo que todos los que han pasado por la universidad pueden entenderme a la perfección, por más que tu ames la carrera hay semestres que ni por equivocación quisieras volver a mencionarlos. Y eso es normal lo más importante, es que de ellos aprendiste y te quedan las anécdotas para cuando estés en el lugar del profesor sepas cuán importante eran cada uno de sus regaños.Extrañare las veces que me enoje con mis compañeros por no traer la parte del trabajo que les correspondía para la exposición, o cuando se presentaban ciertas actividades y nada salía como lo esperábamos. Las horas de prácticas y todos los momentos donde estábamos felices por cualquier tontería que pasaba o de algún chiste rojo que se le ocurría al más extrovertido del salón. Son cosas que jamás se podrán olvidar y quedaran guardadas en nuestra mem
MauricioAntes de llevarla a casa de mis padres para presentarla oficialmente como mi prometida y novia pasamos por el que ahora es nuestro apartamento y rincón preferido para que se cambiara la toga que lleva puesta. Colocándose un precioso vestido color azul, del cual su tía en complicidad conmigo se encargó de comprar precisamente para esta noche de celebración.— ¿A dónde me llevas? —Pregunta mientras voy conduciendo por las vías de Miami florida y sonrió al ver que sus ojos buscan la verdad en los míos.—Para el futuro mi linda. Para ya vamos —Contesto haciendo que me mire más extrañada de lo que viene — ¿futuro? Por dios Mauricio tú te estas volviendo loco —Inquiere con una sonrisa en su rostro.—Como me encanta que seas tan espontanea. Sabes eso fue una de las cosas que me enamoro de ti —Confieso y se acomoda a medio lado tocándose el cabello.—De verdad te gusto así. ¿Con crisis de nervio y todo? —Averigua sin perder su sonrisa.—Si… —Contesto doblando a la derecha para entrar
GabrielaCuando mis compañeras de colegio me hablaban de cómo les gustaría que fueran sus compromisos matrimoniales. Jamás me imagine que todo fuera exactamente como alguna vez lo soñé. Con copas, champagne, cena familiar y nuestras amistades más cercanas para celebrar este maravilloso acontecimiento. Es que estoy sentada en la mesa de los Lescuyer y todavía no me creo que dentro de 3 meses estaré casada con Mauricio.El solo me mira y la felicidad que se le refleja en su rostro es evidente. Cabe recordar que mantener un noviazgo en secreto no es nada agradable, por eso en esta noche nos sentimos un poco liberados ya que no tendremos que escondernos delante de nuestras familias o intentar disimular que solo somos un par de conocidos. Realmente admito que esta ha sido la mejor decisión y aunque mis padres no están físicamente aquí, sé que desde el cielo me están dando la bendición, para que sea feliz junto al súper héroe de mi vida.Cruzo mi pierna he intento mantenerme lo más tranquil
MauricioAunque haya intentado disimularlo yo sé perfectamente que esa ida a la cocina, solo es una excusa para no estar en el mismo lugar de mi tío. Ya que desde que lo conoció le ha tenido cierta desconfianza y aunque le he explicado de que no se puede juzgar a las personas por el simple hecho de tener los ojos iguales, ella continua con la misma terquedad, si tan solo Gabriela se diera la oportunidad de tratarlo se daría cuenta, de que mi tío es un hombre intachable, con unos valores y una calidad humana inigualable.Tanto así que es uno de los empresarios más reconocidos en España y no solo por sus negocios, sino por su grandiosa labor con fundaciones, para jóvenes que han sido víctimas de abusos sexuales o niños que han sido abandonados por sus padres. Si tuviera que definir al tío Demetrio diría que es el mejor, porque aparte de tener ese corazón tan bondadoso fue la única persona que me apoyo cuando decidí estudiar psicología. Sin importar de que mis padres no estuviesen de acu
GabrielaDespedirse de la familia de Mauricio resulto más difícil de lo que pensé sobre todo porque estaba ese hombre allí, Demetrio Lescuyer que en todo momento no hizo otra cosa más que escanearme de pies a cabeza. Como si me deseara, claro está que lo disimulo muy bien con su estúpida sonrisa de hombre bueno y del cual no le creo ni el apellido.Luego decidí esperar a mi prometido en el jardín, eso con el fin de buscar a mi tía Rosiris a quien he visto durante toda la noche cerca de Alberto, el guardaespaldas de ese hombre repugnante y es precisamente eso lo que me preocupa, no me gustaría de que mi tía se involucrara con nada, que tuviera que estar, cerca de Demetrio ya basta y sobra con Mauricio que es su sobrino como para que ahora el guardaespaldas este metido las 24/7 en mi casa.—Ya nos podemos ir —Dice mi prometido al cerrar la puerta de su casa.—Estoy esperando a mi tía que está dialogando con Alberto —Le hago saber señalándole hacia donde se encuentran.—Vamos a buscarla
MauricioTe amo tanto —Digo mientras la coloco en medio de la cama haciendo una pausa en medio de nuestros besos deteniéndome un segundo para contemplar su hermoso rostro.—Yo también. No sabes cuantas noches me imagine estando así contigo, cuanta veces anhele de que te hacías realidad y podía besarte, acariciarte, sentirte, te amo con todas las fuerzas de mi alma Mauricio, soy toda tuya —Susurra mirándome a los ojos y nada más puedo perderme en el café de su mirada. Mi linda tiene todo lo que necesito, su voz es como una mañana de primavera donde los colores están más vivos que nunca, sus labios tiene la dulzura que cautivan todo lo que hay en mí y su cuerpo es la entrada a ese universo donde podemos tocar las estrellas.—Puedo —Me pide para desabotonarme la camisa y asiento —Soy todo tuyo —Digo he inmediatamente me la quita, dejándola puesta al lado de una de las almohadas.—Por si llega mi tía encontremos rápido la ropa —Me dice divertida haciéndome reír. Voy hasta la parte baja de