"Jackson. ¿Cómo diablos lograste comunicarte?" pregunté.

"No lo sé. Solo quería escuchar tu voz en el buzón. No esperaba que contestaras," dice poniéndose un poco emocionado.

"¿Por qué me llamas?" pregunté.

"¿Por qué te fuiste?" preguntó, su voz llena de preocupación.

"Porque tenía que hacerlo. Sabes que tenía que hacerlo," digo.

"¿Por qué?" preguntó.

"Porque no me aceptas. Necesitaba salir de allí. Tú lo sabes. Jackson, verte todos los días me estaba matando lentamente," digo.

"Lo sé. Lo sé ahora. Pero necesito que vuelvas a casa," dice.

"No puedo hacer eso. Tengo que quedarme aquí," digo. Y la estática en el teléfono empezó a empeorar.

"No necesitas quedarte allí," dice.

"Vincent creó este reino queriendo que viniera aquí con él si se probaba que yo era su hija. Pero mamá mintió y dijo que no lo era," expliqué.

"¿De qué estás hablando? Vincent no creó el reino," dice.

"¿Qué? ¿Qué quieres decir?" pregunté.

"Otras personas lo hicieron..." dice mientras la estática se volvió muy mala. A