Después bese su frente y le dije, “Anda sal de aquí porque no podre contenerme más” ella asentó con su cabeza sin poder decir una palabra y salió del cuarto, pero eso no lo entendió mi pene, cuando faje la mirada para ver dentro de mi bóxer, tenía una enorme erección, ese era el efecto que acusaba ella en mi con tan solo tenerla cerca.

“Marcus que quieres cenar?” la escuche decirme, mientras me colocaba la camisa y el short que ella me dio.

“Lo que tú quieras está bien” le conteste, pro mi cena favorita es ella, así que no tendría que pedir nada a domicilio, solo ponerse en la cama con sus piernas muy separadas y dejarme saborearla y comerla como si fuera mi última cena.

Sali del cuarto de Daniella, tratando de controlarme o tendría que tomar una ducha bastante fría, me acerque a ella y la vi algo pensativa, “En que piensas?” le pregunte.

“Sushi, sushi se me antojo, iré a ver el refrigerador debo tener el