Empezó por frotar su espalda a regañadietes. Odiaba reconocer que no era tan molesto como pensó, tampoco tan humillante. Subió las manos por sus omóplatos y bajó hasta llegar a su cintura,se detuvo justo ahí,debajo. Tocó sin querer más de lo que deseaba y pudo sentir como su cuerpo se estremecio sólo con ese roce.

Liam lo estaba provocando.

Ahora lo sabía.

—¿Pasa algo,porqué te detienes?—La voz de Liam se escuchaba tranquila y somnolienta. ¿Él era único que estaba incómodo ahí?.

—Nada—respondió rápidamente. El tarado tenía la piel muy caliente y bastante...¿suave?... Dejó de tocarlo de pronto.

Tampoco que tuviera intensión de seguir tocando a ése idiota. ¿Estaba haciendo calor de pronto?

¿Porque todo tenía que ser tan difícil en su vida?Lo peor. parecía que su cuerpo traicionero disfrutaba tenerlo de esa forma.

—Ya.

Dijo Kumy. Frustrado,enojado y terriblemente excitado.

—¿Hm?—Fue lo único que Liam respondió.

No esperó a que reaccionara,se bajó de golpe del cuerpo de Liam ¿era necesari