Sé que dijimos adiós

Pero no sé que fue para siempre.

***

Ni por un segundo Calvin soltó su mano que estaba fuertemente envuelta alrededor del hombro de Bella. Ni cuando salieron de la sala VIP del restaurante, ni cuando los dos bajaron las escaleras cargadas de olor a flores y velas encendidas, ni cuando el camarero que abrió la puerta de salida del restaurante con una leve reverencia. Luego los miró sorprendido porque probablemente estaba confundido en cuanto a por qué Bella podía salir con diferentes hombres.

Calvin decidió ignorar todo eso, ignorando las miradas de los sirvientes que lo miraron con el ceño fruncido cuando irrumpió sin permiso.

En su memoria solo estaba Bella, y las emociones que se desbordaron cuando se enteró que la mujer había ido a encontrarse con Stevan cuando la mujer ni siquiera levantó el teléfono y respondió sus mensajes.

Y las emociones desbordantes explotaron cuando vio a Stevan abrazando a Bella y frotando con cariño la cabeza de la mujer. Sólo ha