Jared luego de irse directamente a la empresa empezo a encargarse de algunos papeleos que tenía pendiente, tenía que ser muy cuidadoso con todo lo que estaba haciendo para que nadie de la empresa se enterará aun de lo que sucedía, especialmente James, esto lo habia fundado él, por lo que a pesar de que ya no era jefe estaba pendiente de todo lo que sucedía, por esa razón tenia que tener mucho más cuidado, porque este estaba muy al pendiente y sería la persona más perjudicada, con esto lo hundiría rápidamente hasta el fondo, y no debería dejar que nadie pueda tener sospechas y si las tienen no se puedan comprobar de ninguna manera. Cuando termino con esto, decidió llamar a Liam, que no contestara ayer cuando lo estuvieron llamando estaba totalmente fuera de lugar, no era algo que estaba permitido, cuando lo contrato había dejado claro que podía necesitarlo a cualquier hora y él debía estar ahí, siempre había cumplido con esto hasta ayer. “Señor.” Dijo Liam al contestar la llamada. “
Después de terminar con todo su trabajo en la empresa Jared decidió que quería comprar algo lindo para Carolyn, ella podía decir que quería hacer como si nada hubiese pasado entre ellos, pero él no podía hacer eso, no cuando paso todo el día pensando en esa maravillosa noche, ahora estaba mucho más decidido a hacer que ella aceptara darle una segunda oportunidad.Primero paso por una floristería donde compro un enorme ramo de rosas y luego por una prestigiosa joyería, a la cuales solo tenían acceso las personas con más dinero del pais, cada pieza que vendían era demasiado costosa para la gente común, en ese lugar compro para Carolyn un hermoso y costoso collar y al ver una linda tiara de niña decidió comprársela a Ava, sabía que a su hija le encantaría.Cuando llego a casa ninguna de las dos estaban en la sala, por lo que le preguntó al ama de llaves y esta última le indicó que deberían estar en la habitación de Ava.“Hola princesa.” Saludó Jared al abrir la puerta y vio a Carolyn aco
“¿Nos vamos?” preguntó Jared sin poder quitarle los ojos de encima a Carolyn, ella tenia puesto un hermoso vestido rojo el cual le quedaba espectacular, robaría todas las miradas, especialmente la suya, cada vez le parecía más hermosa. Hoy iba a ser un gran día para ellos, los accionistas habían convocado a una junta para pedirle explicaciones a Jared de lo que estaba ocurriendo con la empresa y porque todo parecía empeorar, por lo cual era el momento perfecto para darle paso a la segunda parte de su plan. “Si.” Afirmó Carolyn luego de terminar de pintar sus labios de rojo. “Entonces vamos.” Dijo Jared con una pequeña sonrisa y ella asintió. Los dos fueron a la habitación de Ava para decirle adiós a su pequeña y luego salieron hacia el auto de Jared. Al llegar a la empresa, Jared abrió la puerta para Carolyn y la ayudo a bajar, pero no soltó su mano después de eso y aunque ella se sentía nerviosa, no intento soltarse mientras caminaban hacia el interior de la empresa. Cuando ent
“¿Esto es lo que quieres que haga Carolyn? Si es lo que deseas lo haré.” Dijo James mirándola directamente a los ojos, sintiéndose totalmente derrotado, no solo iba a perder su empresa si no que ya había perdido a la mujer que amaba hace mucho por su estupidez y ambición, ahora se daba cuenta que ya no había vuelta atrás, era imposible que Carolyn volviera a su lado. “No se de que habla señor Whatson, aquí no importa lo que yo quiera, si no lo que es mejor para la empresa.” Respondió Carolyn con frialdad, como si no tuviera nada que ver con él y esto fue como otra aguja que se enterraba en el corazón de James. “Carolyn solo necesito que me digas si con esto basta y lo firmare.” Insistió James sin dejar de mirarla. “Señor Whatson le agradezco que deje de llamar a mi esposa de manera tan personal, además ella no tiene nada que ver en esto, yo quiero es que usted no pueda fugarse con el dinero de la empresa, necesitamos una solución.” Intervino Jared. “Esta bien, firmare el acuerdo.”
James sintiéndose totalmente miserable luego de haber salido de la empresa, decidió ir por unas copas, intentando sobrellevar lo que le sucedía, a pesar de que sabía que su estomago dolería por esto, poco le importaba en este momento, estaba furioso con él mismo por haberse equivocado tanto, por dejarse llevar por Emily. Había estado tan equivocado, pero ahora nada de esto se podía cambiar, de nada servía el arrepentimiento ni los lamentos cuando ya no hay forma de arreglar nada. Luego beber unas cuantas copas, empezó a sentirse mal y tomo la decisión de irse a su casa, lo que no esperaba es que al llegar Emily estuviera esperándolo en la puerta cuando lo menos que quería hacer era tratar con ella, la culpaba por sus desgracias. “James necesito hablar contigo.” Dijo ella aproximándose hacia él apenas lo vio bajar del auto. “No quiero verte, aléjate.” Mascullo él sin mirarla, mientras buscaba las llaves de su casa en el bolsillo, estaba un poco desorientado por el alcohol, pero te
“Si no me lo dices, le diré a James lo que me pediste.” Amenazó Emily furiosa y de inmediato escucho a Robert soltar una carcajada. “¿De verdad todavía cree que a él le importa lo que suceda con usted? A él no le importa ni un poco nada que tenga que ver contigo.” Dijo él con algo de diversión en su voz y Emily sintió como la ira y la tristeza se iban expandiendo más en ella, nunca pensó que iba a ser tratada de esta manera por quien era el asistente de James. “Claro que le importa, tú no lo conoces lo suficiente, ya veras.” Replicó Emily, aunque sabia que Robert tenia razón en este momento, no estaba dispuesta a que él la humillara y estaba a punto de terminar con la llamada cuando volvió a escuchar la voz de Robert. “¿Sabe algo señorita Emily? No me gustan las amenazas, nunca pensé en utilizar esto, pero como usted decidió comenzar, quiero aclararle que si no viene esta noche a la dirección que le voy a mandar, revelare algo que no le conviene, si reveló esto quizás pueda termina
El día había sido un poco duro, porque los accionistas habían estado viniendo mucho a su oficina a hacer preguntas, por lo que tuvo menos tiempo para hacer lo que le correspondía y debió quedarse un poco más en la empresa, pero por fin ya había terminado y ella podría volver a casa con su familia. Carolyn recogió todas sus cosas y cuando salió de su oficina no podía ver a nadie, así que iba camino a tomar el ascensor, pero en ese momento vio como una sombra pasaba, así que de inmediato se puso alerta y volteó hacía atrás para sorprenderse al ver quien venía hacia ella caminando sigilosamente, al mismo tiempo que dejaba caer su cartera. Emily que planeaba sorprenderla sonrió siniestramente al ver que ya Carolyn había notado su presencia. “Emily, no deberías estar aquí.” Regaño Carolyn mirándola con frialdad, tratando de parecer tranquila, pero sabía que aquí había algo mal, Emily no parecía estar bien, su cabello estaba desordenado y la sonrisa y mirada que tenía daban un poco de mie
"¿Que no lo haga? Tú me quitaste todo y mereces morir, además no te puedo dejar ir luego de confesarte todo lo que hice.” Dijo Emily con una sonrisa siniestra y antes de que pudiera hacerle algo, Carolyn le dio una patada para alejarla al menos un poco antes de intentar huir, pero Emily venía tras ella lista para apuñalarla, pero antes de que esto pudiera ocurrir un cuerpo se interpuso entre el cuchillo y Carolyn. El cuchillo atravesó la dura espalda de Jared antes de que Emily pudiera darse cuenta de lo ocurrido y retroceder asustada, dejando el cuchillo aun en la espalda de Jared y este se volteo a mirarla furioso, poniendo a Carolyn que aun estaba conmocionada detrás de él. Emily se puso pálida al darse cuenta como ese demonio la miraba, por más que ella estuviera loca en este momento, sabía que Jared podía ser muy despiadado, la mirada que él tenia era aterradora. “Lo siento, yo no quería lastimarlo a usted.” Dijo Emily mientras daba pasos hacía atrás y Jared se iba acercando a