Punto de vista Bella
Cuando llegué a clases, era algo así
como un cubito de hielo. Camino a la universidad me di cuenta que hacía más frio de lo normal, es que decidí reposar un rato y me quedé dormida, con el apuro salí a las carreras y me olvidé del abrigo y ya no me dió tiempo de regresar a casa, si lo hacía llegaría tarde e interrumpiría al profesor y no quería ser el centro de atención otra vez.Entré a la sala de conferencias diez minutos antes de que comenzara la clase, muchos alumnos ya esperaban, miré a mi alrededor en busca de un asiento vacío y vi una cara que se me hizo familiar. No pude evitar sonreírle. Era el chico que me ayudo la vez pasada. Caminé hasta llegar a su puesto, con su mano izquierda me señaló el lugar junto a él, así que alli me senté.
- Oh! , pero si es mi héroe
- bromeé recordando el episodio del primer día.- Me siento ofendido, después que salvé tu trasero, ¿todo lo que obtengo es esto?. Al menos esperaba una compensación monetaria, un café o que supieras mi nombre
- se pudo reir.Le di una leve palmada en el hombro, y el cayó por completo de su asiento y se tumbó en el suelo. Haciéndose el herido. Todos voltearon a mirar y detuvieron sus conversaciones para ver al tipo que estaba haciendo un show, agonizando dramáticamente.
- ¡Oh, Dios mío! ¿Qué te hice? ¿No sabes que la violencia nunca es buena?
Ya sabes, mata el alma y la envenena- me gritó en broma muerto de la risa.- ¡Mierda, siéntate. La gente está mirando! Además, eso que dijiste pertenece a la venganza no a la violencia
- hablé en un estallido de risa fuera de lo normal.Parecíamos dos locos haciendo un espectáculo. Adiós a la idea de no ser el centro de atención.
- Está bien, me voy a portar como alguien normal, solo si me haces un favor
- dijo con una sonrisa picaraInmediatamente pensé:
"El único tipo de favores que quieren los chicos lindos son los favores sexuales, y definitivamente NO voy hacer eso por muy hermoso que sea".
- No, olvídalo. Deja de fantasear, estamos a punto de iniciar la clase y no quiero problemas con el profesor, vamos, acomódate bien y comportate que no estamos solos.
Justo cuando
él estaba punto de responder, el maestro entró y comenzó la clase. Mis ojos se encontraron con los suyos y una sonrisa malvada lo iluminó. Respiró profundo y estaba a punto de levantar la voz para avergonzarme una vez más, pero rápidamente puse mi palma sobre su boca.- ¡Bien, lo haré! sea lo que sea que ibas a gritar ahórratelo, me tienes.
Te haré ese favor, ahora ten compasión de mi- dije mientras le suplicaba que no siguiera llamando la atención. Me sonrió, mostrando dos lindos hoyuelos en sus mejillas.- ¡Genial! Por cierto, ¿Me puedes decir tu nombre? - me preguntó mientras me tendía la mano para que la estrechara.
- Mi nombre es Bella. ¿Y el tuyo? No puedo recordarlo, o prefieres que te llame mi héroe, gracias por salvarme el trasero - le dije haciendo que
estallara de risa.-
Bella, soy Aker y es un placer conocer la violencia con la que me tratarás por el resto de la carrera- dijo sonriendo con un brillo especial en sus ojos.Definitivamente este chico y yo nos llevaremos muy bien.
Ojalá podamos ser amigos.
Cuando por fin terminó la clase,
recogí mis cosas y me despedí de Aker. Me estaba preparando mentalmente para enfrentar el frío de regreso a casa.Está bien, a veces exagero, no es que sea un frio invernal, solo que no puedo soportarlo como cualquier otra persona normal haría. Pero estoy pagando mi descuido con mucho valor.
Salí
de la universidad y apenas di unos pasos cuando Aker me toma de la mano y me sube a la acera con él.- ¿Aker, pero qué estás haciendo?
- Vas a cumplir tu promesa niña tonta
- dijo mientras me halaba más fuerte.Mi respiración se aceleró y rápidamente retiré mi mano y comencé a alejarme de él. Tenía miedo, había olvidado que acepté hacer cualquier cosa por él y ahora estaba arrepentida, ni siquiera lo conocía, me senti atrapada... ahora que lo pienso, hubiese preferido la vergüenza en clases, total no era tan grave como lo pensé, peor era someterme a Aker. Oh! en qué clase de lío estaba metida y yo que pensé que llegaría a quererlo como un amigo y tenerlo junto a mi durante toda la carrera.
- No, no quiero ... no lo haré -
Aker se volvió hacia mí con el ceño fruncido. Caminó lentamente, como si estuviera tratando de calmarme.
- Bella sólo quería llevarte conmigo a tomar un café
Quedé con la boca abierta."¿Qué tan equivocada había estado? ¿De verdad puedo llegar a tener esta clase de pensamientos tan perversos? Dios!, no puedo creer que lo haya juzgado a priori."
No sabía qué hacer y él lo notó.
- ¿Qué creías?... ¡Oh Dios!, ¿Pensaste que estaba tratando de seducirte? Cariño, tu cara es muy expresiva - soltó la carcajada y nuevamente llamó la atención de la gente. Cuando finalmente se calmó y pudo respirar, se secó las lágrimas y dijo:
- Hermosa, no me había reído así en años. Bella, escúchame bien, soy muy gay y estoy completamente enamorado de mi guapísimo novio.
Yo lo intuía. Su actitud, su vestimenta, su delicadeza y forma de caminar. ¡Que vergüenza! Como pude confundirme y pensar que me estaba pidiendo sexo. Debo ser más tolerante con los chicos. No todos son iguales, no puedo seguir así o perderé la oportunidad de hacer amigos reales en la universidad. Gracias a Dios, Aker se lo tomo ligeramente, de verdad me agradaba y perderlo antes de conocerlo hubiese sido algo muy triste.
Me sentía como una estúpida estatua, perdida en mis pensamientos negativos y agrediendome por mí falta de tacto. Aker lo comprendió y siguió hablando como loco.
- A mi novio le preocupaba que no hiciera amigos y como él no puede estar conmigo todo el tiempo, quería traerme a la universidad todos los días y yo me negué. Para que dejara de ser un novio sobreprotector le dije que ya había encontrado una amiga y
que la invitaría a tomar un café para presentársela y comprobara que tú eres muy real y que no me importa que seas violenta - de nuevo soltó la carcajada- ¡Aker! No soy violenta, eres un exagerado
- dije sonriendo-
Ok lo que digas Bella, en fin, el vendrá con su mejor amigo, por favor no me maltrates delante de ellos o mi novio no me dejara salir contigo nunca más - dijo haciendo un puchero, pero sus ojos brillaban, le encantaba jugar de esa manera.No pude evitar reírme y pensar en lo linda que debe ser su relación con su novio guapo y sobreprotector.
- Bueno, será un honor para mí hacer el papel de tu falsa amiga
- le dije, un poco desilusinada porque entendí que solo quería traerme para demostrarle a su novio que yo sí existía y no porque me consideraba su amiga.Pero bueno Bella ¿que querías? metiste la pata al pensar que sólo quería acostarse contigo, ¿quién quiere ser amigo de alguien así?
Mis pensamientos me apuñalaban y Aker parecía leer la mente, porque levanto mi cara con delicadeza y me sonrió.
- Bella. Ya eres mi mejor amiga. No te desharás tan fácil de mi, así que deja de pensar desde tu desconfianza, tu me agradas, ¿o porque crees que salvé tu trasero? - sonrió y me reí con él.
- Vamos a Baguelos - dijo eufórico me alegré y le dije que trabajaba allí. Tambien le conté mi vicio del café. A él ambién le encantaba el lugar, entonces le hablé de las diferentes bebidas que ofrecíamos y de algunas mezclas secretas del menú que me encantaban, también le expliqué cómo sé preparaban y el tipo de máquinas que usábamos.
A medida que nos acercábamos más a la cafetería, mi estómago comenzó a apretarse y mi respiración se aceleró. Me sentía extraña, como si tuviera mariposas revoloteando en mi estomago. Es como si mi cuerpo presintiera que algo iba a suceder, no me había pasado nunca, pero no le dije nada a Aker, estaba muy emocionado y no quería distraerlo.
Una vez que llegamos, el maravilloso aroma de los granos de café flotaba en el aire. El lugar olía a gloria. Caminamos hacia la barra, y pedimos dos cafés, mientras esperamos al empleado, Aker me dice que su novio y su amigo están sentados al otro lado.
Volteo y mi
mirada se fija en el hombre más guapo que yo había visto en mi vida. ¡Que hermoso Dios mio! Su cabello era de color castaño cobrizo. ¡Y sus ojos! Que belleza, grises como del color de las nubes cuando está a punto dellover. Los podría mirar durante horas.Al contemplar su cuerpo me estremecí, nunca vi a un hombre tan bien definido y bien cuidado, su anatomía era perfecta.Le sostengo la mirada y revolvió mi ser de una manera que nunca antes sentí.
Pero cómo puede ser posible, si ni siquiera conozco su nombre
Me hizo sonrojar y tuve que bajar la mirada, fue tal el impacto que me produjo, que
sentí un calor repentino pero muy placentero. Ay Dios aún me mira, ¿que hago¡ mi piel estaba erizada, pero me sentía divina, sin miedo, de verdad no entendía las reacciones de mi cuerpo, estaban desquiciadas igual que mis pensamientos.Aker interrumpe mis reflexiones confusas, me toca el hombro y me trae de vuelta.
- ¿Si dime? - digo mientras levanto la cabeza para ver qué quiere.
Él solo se ríe.- ¿Vas a ordenar? O tengo que hacerlo por ti mientras regresas del mundo mágico en el que te encuentras.
Entrecerré mis ojos, demostrándole que su comentario estaba de más. De nuevo escuché su risa limpia.
- Parece que hoy es el día de ser la payasa personal de Aker- le dije como si estuviera molesta.
-Hoy serás más que eso Bella, tenlo por seguro
Creo que me estoy arrepintiendo de haberlo acompañado.
Despues de mi guerra de miradas hacia Aker noto que quien nos esta atendiendo fue un chico que entrené y que como yo se mudo hace poco a esta ciudad. - ¡Bella! ¡Es genial verte de nuevo! Extraño tener los turnos contigo, la cafeteria no es lo mismo cuando no estas presente- dice con esa sonrisa de conquistador que suele funcionar con todas, pero ahora descubro que no es así conmigo. Es decir, antes me sonreía de esa forma y me hacia sonrojar mientras trabajabamos juntos en los turnos dobles que haciamos cuando necesitabamos dinero extra. Pero ahora no surte ningun efecto, me resulta muy infantil su actitud, me hace desear estar en presencia de un verdadero hombre y no la de un niño... Sacudo mi cabeza con asombro, no se porque estoy pensando en ello. Abro los ojos con sorpresa cuando mi mente traicionera evoca la imagen del dios griego que esta junto al novio de Aker, como señalando que a quien querria estar viendo en este momento era a él y no mi
Los cuatro hablamos durante horas. Nos reímos y aprendí más sobre quien sería mi mejor amigo. Aparentemente, era un chico problematico y algo loco que le encantaba gastar bromas a sus conocidos. Segun él, si no las hacia perdería su encanto y el lugar donde viven perdería el brillo único que solo el es capaz de dar. En un momento de curiosidad saque mi celular y me di cuenta de las llamadas y mensajes que dejo mi madre. Oh rayos, estoy en problemas. - M****a- murmuré. - ¿Qué ocurre? - Mi mamá ha estado tratando de comunicarse conmigo y será mejor que conteste o tendré problemas al llegar a casa- Dije levantandome de la mesa y llamando a mi mamá quien contesto rápido. - Bella, ¿dónde estás? ¡Te he estado llamando y tu clase terminó hace horas! ¡Deberías haber vuelto! - Lo siento mama, se me olvido decirte que estaria en Baguelos con unos amigos, se me paso el tiempo y ni siquiera escuche mi celular. - Está bien, me preocupé al ve
Que verguenza. - Oye, mamá... te presento a Travis. - Bien Travis, es un gusto conocerte. ¿Vas a la universidad con Bella? - No, señora. Me gradué el año pasado, pero soy amigo de uno de sus compañeros. Esa información me golpea, por supuesto que es alguien mayor que yo, esto me hace tomar consciencia de que aun no se nada sobre él y ya estoy teniendo pensamientos que no deberia tener por un desconocido. - Me alegro saber ¿Qué has estu...?- Mi mamá fue interrumpida por los gritos de mi hermana. - ¡Bella! ¡Tuve el mejor día de mi vida! Hoy en la guardería hicimos....- Lissy deja de hablar cuando se da cuenta del hombre a mi lado. Sé exactamente cuándo lo ve porque sus ojos se agrandan como platos y me abraza con más fuerza- ¿Quién es ese grandulón?- susurra, pero como es pequeña, en realidad no susurra bien, por lo que resulta más una voz ronca. - Es mi nuevo amigo. Puedes hablar con él cariño, es una persona muy agr
Todo lo que puedo escuchar es el sonido de mi corazón latiendo y mis respiraciones dificultosas mientras corro. Mi vida académica depende de ello. Me he quedado dormida de nuevo. Esta es mi primera clase de Valores y responsabilidad ciudadana, así que llegar tarde es especialmente horrible. Finalmente llego dos minutos tarde y cuando abro la puerta, todas las cabezas se vuelven hacia mí como si yo fuera esa persona que no puede llegar a tiempo a clase. Incluso el profesor me fulmina con la mirada antes de volver a hablar. Al menos no dijo nada. Creo que en realidad me moriria si lo hiciera. Decido sentarme en la parte de atrás de la clase y el único asiento disponible en el área era uno al lado de un chico con cabello plateado. No parecía estar prestando atención y su mirada estaba enfocada en garabatos que hacia en su cuaderno. Al otro lado de mí, hay una chica que masticaba chicle mientras dibujaba lo que parece ser una rosa y una calavera Mientras me
* TOC TOC * - ¡Está bien! ¡Dame un minuto!- Refunfuño, fingiendo que él podía oírme desde su coche cuando todavía estaba dentro de la casa. Estoy corriendo por mi habitación, rociándome rápidamente con perfume y agarrando mis pertenencias mientras Aker toca la bocina. Llegó hace solo dos minutos y no deja de tocarla, me esta tocando los ovarios por ser tan impaciente. - ¡Cariño, tu amigo está aquí!- mi mamá grita desde la cocina, como si aún no fuera consciente de su presencia. Bajo las escaleras, me despido rápidamente de mi mamá y me dirijo a la puerta. - ¡Espera! hija, ¿alguna vez voy a encontrarme con tu amigo? Suspiro mientras le doy un rápido abrazo a mi mamá. - Eventualmente. Sin embargo, tengo que irme. Llego diez minutos tarde para recogerme- le digo frenéticamente mientras les grito 'te amo' y salgo por la puerta principal. Corro hacia el auto y tiro de la manija pero la pu
- Lo siento, llegamos tarde. Me retrasé- dije, sin querer culpar a Aker de nuestro retraso. Travis me da una pequeña sonrisa y luego agrega: - Está bien, sé quién tiene la culpa- Mira al otro lado de la cabina y sigo sus ojos para ver que está mirando a Aker con una mirada de complicidad. - Está bien, no fue completamente mi culpa. Bella estaba usando un atuendo de m****a y rectifiqué la situación. Entonces, de nada. Sé que solo está bromeando, pero una chica tiene que defenderse en algún momento. - En primer lugar, mi atuendo no era una m****a solo un poco informal, pero eso es lo que pasa cuando alguien no me dice a dónde vamos. En segundo lugar, llegaste tarde para empezar. Así que realmente todo es culpa tuya- respondo. Me recuesto contra el banco y cruzo los brazos sobre mi pecho y le doy la mirada más oscura que puedo y la dirijo a Aker. En lugar de las expresiones de miedo que esperaba, obtuve tres risas de los chic
- ¡Es enorme!- Aclaro. - Solo tómalo con tus manos- dice Aker mientras le da un mordisco inhumanamente grande a su hamburguesa - Está bien, bueno, no tengo manos monstruosas como todos ustedes, así que no va a ser elegante de ninguna manera- refunfuñé entre dientes, pero creo que todos me escucharon por sus sonrisas. Agarro la hamburguesa grande en mis manos y ya puedo sentir la grasa filtrándose en mis dedos. Abro la boca lo más que puedo e intento morder la hamburguesa, pero mi boca ni siquiera alcanza todo. Muerdo de todos modos, lo que comienza a exprimir el ketchup del lado opuesto de la hamburguesa y gotear en mi plato. - ¡Ven!- Digo, señalando con los ojos el desastre que ya he hecho con un bocado. Todos comemos en un cómodo silencio mientras disfrutamos de la increíble comida. Termino la mitad de mi hamburguesa y un puñado de papas fritas antes de llenarme, mientras los chicos terminan sus pedidos dobles y los acompañ
Llegamos a mi casa en menos de diez minutos y rápidamente me desabrocho el cinturón y salgo del auto. Trav me sigue de cerca y antes de que llegue a la puerta principal, mi madre la abre. - Hola, mamá- le digo. Me da una sonrisa de agradecimiento y abre la puerta aún más para permitirme entrar. Cuando ve a Trav, su sonrisa solo parece crecer. Lissy comienza a llorar de nuevo, así que mi mamá nos dice que la va a ver y nos deja a los dos solos en el porche delantero. - Me diverti esta noche, lamento que acabara de esta forma - Yo también me divertí esta noche. Me sonrió y en ese momento me olvidé por completo de dónde estaba, olvide todo mi alrededor porque junto a Travis, quien de alguna manera se ha vuelto realmente importante para mí en el corto período de tiempo que lo conozco. - Siento no haber tenido la oportunidad de comer postre - Eso solo significa que tenemos que salir a comer el postre en otro momento. - ¿Otro momento