EnzoComo si no estuviera ya lo suficiente sorprendido por la repentina energía y motivación de Nina, ella nos cuenta sus planes para ayudar a Selena a matricularse en algunas clases.Al principio, tuve que admitir que esta decisión me enfadó mucho. Después de todo, Selena convirtió nuestras vidas e
NinaSin decir una palabra, Selena hizo un sonido de jum y se fue por el pasillo. Enzo soltó un leve suspiro y fue a seguirla, pero yo lo detuve con el brazo y negué con la cabeza."No pasa nada", dije, mirando cómo desaparecía al doblar una esquina. "Luke la vigilará. Además, ¿adónde iría?".Enzo s
Nina"Está bien", dijo Enzo, mostrándome una pequeña sonrisa mientras se sentaba frente a mí. "Confío en ti. Y creo que jugaré hockey esta noche".Las palabras de Enzo hicieron que mi corazón saltara en mi pecho. Estaba tan feliz de que estuviera dispuesto a volver a jugar hockey. Aunque el mundo fu
Nina"Déjame enseñarte a patinar".Abrí los ojos ante las palabras de Enzo. Acababa de patinar en círculos alrededor de la pista con él después de patinar solo una vez antes, y no me caí ni una sola vez. Pero nunca pensé en patinar en serio. De hecho, ni siquiera consideré que el hockey o el patinaj
NinaEnzo y yo nos miramos, con los ojos muy abiertos y la boca abierta."¿Cuánto falta para que lleguen?". Preguntó Enzo, saliendo rápidamente de la pista y acercándose al banco para quitarse los patines. Yo lo seguí, aunque cuando intenté desatarme los patines, me temblaban tanto las manos que ape
Nina Mientras Enzo reunía al equipo de hockey y Luke evacuaba a los estudiantes a los túneles, donde era seguro, yo ideaba otro plan. No podía contárselo a nadie, ni siquiera a Enzo, Jessica o Lori. Era un plan demasiado peligroso y sabía que todos lo desaprobarían. Pero tenía que hacerlo; sabía q
Nina "De acuerdo", dijo Selena, bajando lentamente el cuchillo. "Iré contigo". Dejé escapar un suspiro de alivio ante las palabras de Selena y sonreí suavemente, luego la llevé hasta la puerta y se la abrí. Salió al pasillo, evitando el contacto visual, y caminó a mi lado con la cabeza gacha. Cuan
Empecé pasando suavemente la punta de la lengua por su tronco, pasando la lengua sobre la cabeza de su polla. Se estremeció bajo mis caricias. Cuando levanté la vista, tenía los ojos cerrados y volvía a apoyar las manos en la pared, como si mi lengua le hiciera perder tanta fuerza que apenas pudiera