Escucho que tocan mi puerta, suspiro con cansancio, sabía que era demasiado bueno para ser cierto que quizás padre iba a esperar más tiempo antes de llamarme a su despacho para regañarme, espero de todo corazón que esté de buen genio que quizás quiera solo castigarme o darme una fuerte reprimenda y ya, pero sí mi madre está con él, solo lo peor me espera.

Porque eso sería un verdadero infierno

Abro la puerta a medias y del otro lado está Camilo uno de los hombres que trabaja para mi padre es algo amable por decirlo así, me sonríe, pero puedo notar su incomodidad.

—Buenos días srta. Allecra, su padre la espera en el despacho, dijo que la quiere ver inmediatamente, ¿Me acompaña por favor?—aunque trata de que su rostro este sereno y amigable, fracasa ya que al final su sonrisa se convierte en una mueca.

Suspiro resignada, abro del todo la puerta y salg para cerrarla suavemente detrás de mí—¡Seguro!, lidera el camino amigo—entre más rápido me regañen más rápido podré volver a mi habitación a descansar.

En unos pocos minutos estamos de pie fuera del despacho de padre, Camilo se acerca y toca suavemente, recibe una respuesta de que pase, esté me abre la puerta haciéndome señas de que entre.

Pero una vez adentro me arrepiento, porque veo a Giulia Castagna Garibaldi mi madre, está muy bien maquillada y peinada, va vestida de diseñador de pies a cabeza, mi corazón se congela en mi pecho y mis venas se llenan de hielo producto del miedo, trato de no mostrar nada y tener mi rostro en blanco, porque si no, ella lo usará en mi contra.

Rápidamente miro al suelo y tapo mi rostro lo mejor que puedo con mi cabello y pregunto—¿Llamaste Padre?—silenciosamente le ruego a Dios, que me ayude está vez.

Por favor, que solo quiera regañarme.

Por favor, que solo quiera regañarme.

Por favor, que sea eso y nada más.

Cuando escucho la voz de mi madre—Por lo visto tengo una hija que es ciega porque solo se dirige a ti, creo que debes enseñarle modales querido, si no quieres que te haga quedar mal con la familia de su futuro esposo, ¡Adelante hazlo Stefano!, Amore mío no puedes permitir que me trate así—no sé como alguien como ella puede ser mi madre, a veces pienso que ella es igual de mala o peor que él.

Solo por que tenemos el mismo color de ojos y porque me parezco a su madre en ciertos rasgos, sé que  lamentablemente ella es mi madre, pero eso no evita que la odie con todo el alma, Giulia quiere que Isabella se parezca a ella en todo, desde su forma de vestir hasta como comportarse, siendo fría y desalmada, afortunadamente mi hermana saco un buen corazón no como esta mala mujer.

Oigo el movimiento de una silla que es arrastrada hacia atrás y los pasos rápidos que se acercan a mí, siento como una mano se cierra con fuerza en mi cabello levantando mi cabeza y con la otra me da una bofetada fuerte lastimando mi labio, de la fuerza del golpe me caigo de rodillas al suelo, sé que padre golpea duro, pero esta vez fue más de lo habitual.

Me pitan los oídos, estoy desorientada, mi cabeza explota con más dolor, pero padre no suelta su agarre en mi cabello, puedo sentir el tirón fuerte de su agarre y saborear la sangre de mi labio partido, me mira con un odio intenso—¿Por qué insistes en que llevarme la contraria Allecra?, te dije que estabas comprometida, ¿Porque sales a Marco's como una vil puttana?, bebes y dejas que Rafaelo te manosee en la pista de baile, ¿Quieres joderme es eso?— me zarandea con fuerza, no puedo evitar gemir de dolor y lamentarme.

—¡No!, padre no es así, ¡Mi scusi, ay Per favore!, No lo volveré hacer más, Luciano también va, no pensé que se enojaría—ruego como nunca antes lo he hecho, estoy enojada pero también muy adolorida, tengo que conseguir ser más sumisa para que no quiera golpearme con más fuerza.

Siento como me da otro revés fuerte y soy arrojada del todo al suelo, mi cabeza se golpea con fuerza en el suelo de mármol y me quedo aturdida por un momento.

Puedo respirar con un poco de alivio ya que mi padre no está tirando de mi cabello con fuerza, pero mi cabeza eso sí me está matando, mi rostro y mi labio palpitan, hago un esfuerzo para apoyarme en mi antebrazo y tomar bocanadas de aire, unos segundos después puedo enfocar bien mis ojos y ver lo que tengo frente a mí.

Lo veo algo distorsionado a padre, pero puedo asegurar que me devuelve la mirada con rabia y apretando los puños, la vena en su frente debe estar a punto de reventar, ¡Cómo quisiera que el cielo se apiade de mí y suceda eso!, para poder ser libre de la vida de infierno que llevo en está casa.

—Tienes suerte de que no te pueda golpear hasta la muerte porque te necesito, mañana conocerás a tu prometido, solo espero que hagas un buen trabajo porque lo juro por Dios, Allecra haré que trabajes día y noche en el peor burdel que poseo en las calles más bajas y feas de Londres, ¡Levántate y lárgate de aquí!, y no lo olvides a las 5 pm debes estar lista mañana, vamos a la casa de Dante Morello no me importa si te lo tienes que follar en el baño, pero has que ese bastardo arrogante, no salga con alguna excusa barata de que no va a aceptar el matrimonio—me hace un gesto de que salga de su despacho.

Como puedo logro levantarme y caminar hasta la puerta, la abro con manos temblorosas, una vez que puedo estabilizarme bien, salgo levantando mi cabeza, aunque ellos me odien soy una Cavour.

Debo de tratar de ser fuerte frente a estas personas que un día podrían llegar a estar bajo mi mando, aunque no es un secreto para ellos que padre me golpea, pero no puedo dejar que usen esas debilidades en mi contra, jamás.

Llego a mi cuarto y me voy directo al baño para verme en el espejo, lo que veo me deja de piedra.

¡Felicidades Padre!, buen trabajo con lo que le acabas de hacer a mi rostro, quiere que seduzca al porco al que me quiere entregar en matrimonio y me rompe el labio, debo manatener la calma, aunque Rafaelo no será de ayuda, Gabriel y Bellarosa tal vez sí me pueden ayudar, pero quizás no debo poner ese peso en ellos, no es mejor que por ahora no.

Si este tal Dante resulta ser una opción, debo explorarla no por mi bien ni el animal de mi padre, sino por el bien de Isabella, ella debe de tener una mejor vida que la que tengo yo en este momento, aunque padre aún no la golpea y parece ser paciente con ella.

Me pregunto, ¿Por qué entonces me odia tanto?, es verdad que Luciano e Isabella tienen el cabello rubio con reflejos rojizos igual que mi madre, pero padre y yo tenemos el mismo color de cabello, no entiendo el porqué me rechaza a mí.

Limpio mi rostro y la sangre de mi labio con mucho cuidado, me maquillo y trato de ponerme un labial con color fuerte un tono vino, y aunque si miras de cerca se nota lo hinchado.

El problema será mañana ojalá no se torne morado, salgo del baño, para ver que ambas ya están despiertas, me acerco a mi hermana y la abrazo fuerte,para después dejar un beso en su cabeza, juro que si algún día llego a ser madre no dejaré que nada ni nadie toque a mis hijos, de seguro yo tampoco lo haré, de la forma en que lo hacen conmigo, lastimarlos.

Bella nota lo hinchado que esta mi labio y veo como sus facciones se contorsionan con ira, le hago seña de que no diga nada y se dirige al baño hecha una furia, siento que Isabella me aprieta fuerte la cintura, miro hacia abajo y le sonrió .

—Hola, bella sorella, ¿Descansaste bien?—solo espero que ella mantenga su inocencia y no se convierta nunca en alguien como madre.

—Sí, Allecra si lo hice, ¿Te divertiste ayer hermana?, ¿Cuándo podre ir con ustedes a la disco? —pregunta toda entusiasmada, no puedo desilusionarla negándome, le acaricio su cabello.

—Cuando tengas 17 hermana te doy mi palabra, solo espera unos años y podremos ir juntas, pero eso sí, no puedes estar con chicos, solo bailar nada más, ¿Va bene sorella?—le digo sonriéndole.

Me sonríe de vuelta, de repente su mirada cae en mi labio hinchado y su sonrisa se borra de golpe, su cara se  transforma en una de horror completo y preocupación —¿Padre te volvió a golpear?, ¿Por qué lo hace?, no lo entiendo no se supone que nos debe de cuidar, no lo permitas Allecra pidamos ayuda, lguien debe poder ayudarte—no dejo que la desesperación y la tristeza me llene, tengo que ser fuerte por ella y por mí, porque así tenga que dar mi vida no dejaré que le pase nada a ella, con esto se forma un nuevo plan en mi cabeza, voy a exigir llevarme a Isabella conmigo.

Primero debo hacer mi mayor esfuerzo conociendo a este tal Dante, más tarde lo busco en internet a ver que sale de él para saber a que atenerme, si hay una posibilidad de que pueda llevarme a Isabella conmigo lo haré, no la dejaré en este lugar con está familia que de familia no tiene nada.

Le froto la espalda y le digo que nada pasara, aunque ni yo tengo seguridad de eso, pero hago que me crea, sacaré a mi hermana de esto y cuando lo logre haré que todos sus sueños se hagan realidad, deseo que ella se casé por amor no como yo…Que debo ser intercambiada para el beneficio de mi padre.

Dios por favor ayúdanos esta vez.