Miro a Dante y lo encuentro evaluándome esperando a que muestre alguna mala reacción, pero es una lastima tener que decepcionarlo, porque ninguna de las dos ha hecho que sienta algo al verlas aquí hoy en el día de nuestra boda.Enarco una ceja en su dirección y esbozo una pequeña sonrisa.Madre hace todo un drama luciendo ofendida, pero nadie le presta atención ni siquiera padre, Luciano me lleva a su lado y me deja ahí como si fuera un paquete que ha entregado finalmente a su dueño, no es mi padre quien lo hacer como debería ser, pero bueno, nada en está boda es normal ni tradicional.Me quedo de pie ahí observando a los dos sin emoción alguna en mi rostro, esperando que se deshaga de la fulana para poder empezar con la ceremonia, muero por quitarme este tonto vestido y el maquillaje.La fulana cuando recibe el suave toque de él en su cintura, da un paso atrás, ruedo los ojos y nos giramos para estar cara a cara con el juez, el cual luce claramente muy incómodo, no tiene muy claro q
DanteElla está muy diferente de la última vez que la vi, más fría y distante, como si no estuviera aquí y fuera solo un cascarón vacío.¿Será qué algo grave le pasó?, Tonto ese no es tu problema así que deja que ella lidie con su propia mierda.Lo que sí es mi problema es la presencia de Vanna aquí, le dije a Leonardo específicamente que no quería verla aquí hoy, aunque si fuera nunca más sería mucho mejor, ella recién volvió de su viaje fue a París, me molesta que apenas llega a la ciudad corre a verme como un cachorrito extrañando a su dueño.Ahora le estoy mostrando el camino a nuestra habitación a mi esposa, que raro se siente pensarlo y más raro se siente al decirlo.Avanzamos a la segunda planta alta de la casa, la guío dos puertas más adelante de dónde está mi propia habitación, nos detenemos y le hago un gesto que ese es el nuestro, sin dudarlo ella abre la puerta y entra, le digo a su hermana que espere aquí que ya le indico cual es el suyo, ella me dice que está bien que ah
DanteEs jodidamente perfecta, de pies a cabeza, si tan solo ella no fuera hija de ese bastardo, hasta pensaría en quedarme con ella, como mi esposa de verdad y por conveniencia, hasta puede que más adelante llegué a sentir algo por ella.Pero la fea realidad es otra y muy amarga de aceptar.Acaricio su cuerpo suavemente maravillado de lo perfecto que es parece que aún fuera puro, sin embargo al recordar que estuvo con otros más, eso provoca mi ira así que dejó de tratarla dulcemente y voy a tomar lo que por ley me pertenece, no seré gentil ni atento, ella no lo merece en lo absoluto.—Vamos arrodíllate en la cama Allecra, quiero verte bien, quiero un buen vistazo de lo qué es mío—quiero poder verla bien.Sin objetar ella lo hace, eso solo hace que se confirmen mis sospechas sobre ella, sí es experimentada entonces, una chica virgen se negaría a obedecer estaría en un mar de llanto porque le obligan a hacer algo así, juro que cuando acabe con ella quedará arruinada para cualquier ot
A la mañana siguiente...Siento la luz del sol que entra a raudales en la ventana de mi habitación, abro los ojos lentamente tapándome un poco con la almohada, esa luz me molesta.Algo somnolienta me pongo de pie y cierro las cortinas del todo, por lo visto Dante no volvió ayer, gracias al cielo.Me visto informalmente, jean rasgado en las rodillas de diseñador, zapatos de deporte bajos blancos, blusa rosa suelta algo alicrada, en mi bolso meto mi celular y mis llaves nuevas de la casa, las de mi auto, un gel de manos y brillo labial, con mi rímel incoloro que hoy quiero usar, me pongo una gorra no quiero prensa, pero por si acaso guardo unas gafas también en mi bolso.Salgo del dormitorio, para luego quedarme ahí de pie sin saber en qué dirección ir, no puedo evitar preguntarme cuál puerta será la de Isabella, ayer olvidé preguntarle a Dante.Como si la hubiera llamado con la mente, ella sale de su habitación, vestida con ropa informal igual que yo, le abro los brazos y ella corre a
DanteMe sirvo medio vaso de whisky en el pequeño bar que tengo en mi despacho, me lo bebo de golpe pero no hace nada para calmar está rabia tan grande que tengo y siento que quema por dentro.Lanzo el vaso contra la pared con tanta fuerza sin importarme en lo absoluto que se haga añicos dejando los vidrios esparcidos por el suelo.—¡Maldit* arpía!, tenlo por seguro que descubriré lo que estás ocultando, ese cuento de querer estudiar no te lo creo por nada— suelto un grito cargado de mucho enojo.Escucho la puerta abrirse y me giro para enfrentarla por si decidió regresar a fastidiar, pero no es ella, es Leo mi mejor amigo, le di una maldita tarea y no la pudo cumplir.—¿Por qué diablos la dejaste entrar?, te juro que si no fueras mi mejor amigo. ¡Per l'amour di Dio!, ya tuvieras una jodida bala en la cabeza—espeto muy cabreado apretando con fuerza mis puños.—Pues deja de comportarte como un imbécil, no es mi culpa que quieras follar en el despacho teniendo tantos cuartos a tú dispo
Llegamos, dejo estacionado y bien cerrado el coche, voy revisando mi bolso cuando choco con alguien, levanto la vista para pedir disculpas por estar distraída, me quedo muda es el hombre más guapo que he visto en mi vida, aunque actualmente los que están en ella son un asco, a excepción de Gabriel.Me sonríe—Mi error no vi por dónde iba, espero me disculpe bella dama—su forma de hablar y su acento hacen que sonría como una tonta, parece ser extranjero.¿Qué?, ¡Allecra, estás de broma!, solo sé educada y aléjate.—No pasa nada, en realidad fue mi culpa yo iba distraída no te vi y por eso fue que nos chocamos— aseguro con una sonrisa amigable.Estoy dispuesta a continuar mi camino, cuando agarra mi mano sin previo aviso, asustada la quito inmediatamente y me preparo para cualquier cosa que quiera decirme o hacerme—¡Disculpa, no quería asustarte al contrario!, quería invitarte un café y a tu hermosa amiga también, estoy muy apenado por haber sido atrevido y tocar tu mano—me insiste él,
AllecraExploró mi cuerpo con su boca, lengua y dedos, nada parecía ser suficiente para él, era como una persona hambrienta, sus besos me dejaban sin aliento y con ganas de más.Me sentí fascinada y asqueada al mismo tiempo tiempo, porque recordé que es un mujeriego, que cada vez que lo veo está con una mujer distinta, me enoje por haber sido una tonta y ceder a lo que él despertaba en mí.Cuando él pensó que había sido suficiente, subió suavemente por mi cuerpo tomándose todo el tiempo en besar cada pedazo de piel que encontraba, mordió suavemente a los lados de mis costados, los gemidos salían de mí cada vez más y agarré con fuerza su cabello con ambas manos, eso lo hacía gruñir de placer, siguió avanzando hasta que se metió mis pezones sensibles en su boca, mi espalda se levantó de la cama en un gran arco mientras él alternaba entre uno y otro succionando con fuerza para después morder un poco los duros picos, me dejé caer otra vez en al colchón soltando su cabello, lo sentí movers
—Quítate de encima por favor, quiero lavar todo rastro de ti de mi cuerpo, me siento asqueada en este momento—le hago saber lo más fría que puedo, cuando no es así.Se levanta de golpe como si lo hubiera quemado y me mira con sorna, busca su pantalón en el suelo y se lo pone de malas maneras, se sube el cierre pero no cierra el botón, recoge el resto de su ropa que está por la habitación esparcida y la lleva en sus manos, vuelve a cerciorarse que no se le queda nada y me mira con enojo.—¡Pues te quedarás así tal vez eso haga que te acostumbres más a mí!, vendré en la hora de la cena o quizás mañana, esposa aún no lo sé, pero te prometo que trataré de no olvidarme que estás aquí—sin más se va dejándome atada el muy cabrón.¡Después de matar a Rafaelo él será el segundo en mí lista!, eso es definitivo, hombres como ellos son los que merecen morir sin sentir remordimiento alguno.Dante¡Bruja descarada!, traicionera y rastrera igual a su padre.No sé qué artimañas exactamente está usand