"Lo siento, señora Kentworthy, pero tuvo un aborto espontáneo".

Las palabras seguían repitiéndose en la cabeza de Kenzie mientras se estaba taciturna dentro de su habitación, de vuelta en Braeton. El mismo día que supo que su embarazo había fracasado, se fue a ver a su familia.

Ella llevó consigo a Kimberly. Sin embargo, como Andrew no podía dejar la compañía de forma repentina, sobre todo cuando acababa de sacar una licencia para asistir a la boda de sus padres, él tuvo que quedarse al mando de Medios KNW Lifestyle.

Cuando ella llegó a Braeton, fue directamente a la casa de sus padres, sin hacer uso de la que su padre le había comprado a Kimberly. Kenzie quería estar en el espacio más familiar para ella, su zona de confort en la que creció la mayor parte de su vida.

Llevaba tres días seguidos de duelo en su habitación, en los que solo salía a ver cómo estaba su hija y a comer. No podía funcionar eficazmente en su rutina diaria, ni siquiera era capaz de disfrutar de su tiempo