Hanna BeckerNew YorkPermanecemos un rato así, sin movernos después de habernos entregado de nuevo al placer, estaba satisfecha, pero no totalmente, era como si no tuviera suficiente de mi esposo, aunado el estado hormonal en el que me encontraba todavía, que cada vez quería más de Devin. El pobre acababa agotado, pero sabía que le encantaba complacerme.Empezó a llenar mi cara de besos, mis hombros y fue bajando por la clavícula y luego se fue a mi cuello, Devin no sabía a lo que se enfrentaría si seguía incitándome, porque yo o lo iba a dejar salir de esta cama, abrí los ojos y lo miré con una sonrisa en mis labios, este hombre me encantaba, era tan dulce y tierno–Hola, amor, ¿todavía quieres un poco más?Le digo mirándolo con picardía, solo lo estoy probando, porque de seguro ya está cansado, no voy a ser tan mala con él, lo dejaré que duerma solo un rato para que retome las fuerzas que le he quitado. Devin es un amante excepcional, pero no lo voy a forzar a nada más, yo también
Hanna BeckerNew YorkNos abrazamos y así nos quedamos dormidos, por unas horas. A la mañana siguiente, me desperté con mucha hambre, Devin había agotado todas mis energías y el bebé estaba pidiendo alimento desde temprano, así que me dispuse a llamar al servicio a la habitación.Marqué al teléfono del restaurante, contaban con atención las 24 horas del día, así que no había problemas, si desde ya les pedía el desayuno, con Devin no había problema, ya cuando despertara lo estaría esperando su desayuno, lo dejaría descansar en verdad se las había lucido complaciéndome en esa súper noche de bodas.–Buenos días, señora, ¿En qué le podemos servir?–Buenos días, señor, queremos dos desayunos continentales, uno con té, y el otro con café y fruta de temporada, sería tan amable de traer uno ahora mismo con un té y el otro lo podría programar para dentro de dos horas por favor.–Por supuesto que sí, en un momento le llevamos el servicio, desea agregar a su fruta algún yogurt en especias, se lo
Devin BeckerNew YorkHanna y yo tuvimos que volver a la rutina de nuestras vidas el lunes siguiente de nuestra luna de miel, ese día ambos desayunamos en nuestra casa y nos fuimos juntos al estudio, en dónde se venía la prueba más importante de mi vida, la de hablar con Levina para decirle mi verdad, desde hoy ya no me quedaría a trabajar ahí, pues ya que estaba al 100% repuesto de mi accidente, hoy me tenía que presentar por primera vez en la escuela de cocina. Hanna y yo, estábamos solos en la que hasta hoy sería mi oficina, pues si todo salía bien como yo esperaba que sí, hoy por fin me libraba de ese lugar.–Devin, mi amor no estés tan nervioso – Hanna siempre me daba muchos ánimos – Sé que Levina te va a entender a la perfección y no te preocupes que el estudio quedará en las mejores manos, en las de Katie y en las mías.Yo confiaba 100 por ciento en ellas dos, son las mejores arquitectas y hacen una estupenda mancuerna, mi madre tenía que haber pensado en ellas primero antes de
Devin BeckerNew YorkLevina no se quedó muy conforme del todo con mi renuncia del estudio, pero también supo que no iba a poder hacer nada por impedir que me fuera a seguir con mis sueños y eso lo tenía que entender y lo bueno fue que días después de mi renuncia del estudio, ella ya estaba más tranquila y hasta me pidió que hiciéramos algo para Katie y para mi esposa.–Hijo, ya que quieres ser chef, yo quiero que prepares un banquete para las personas del estudio – Me dijo mi madre – Haré un evento para nombrar a mis sucesoras y tienes prohibido decirle a Hanna, eso será una sorpresa.Amaba a mi mamá, qué bueno, que ha sido comprensiva y que se había dado cuenta del malestar que yo siempre había tenido por estar trabajando en algo por obligación, no por gusto.–De acuerdo madre, así lo haremos – Dije encantado – No le diré ni una palabra a Katie, ni a Hanna y créeme que es la mejor decisión que has tomado, nombrando a ese par como tus sucesoras. Te van a llover éxitos y contratos.–G
Hanna BeckerNew YorkDevin se estaba comportando otra vez muy sospechoso, ahora no sabía por qué se había llevado a Daniel, algo se traía entre manos, pero no lo iba a presionar para que me dijera que era lo que tanto tramaba con su amigo. Pero mientras tanto yo me iba a dedicar a poner este estudio a un nivel mucho más alto en colaboración con mi cuñada.Levina nos había puesto a prueba y ya estaba viendo los resultados, teníamos que demostrarle con creces que estaba dejando su renombrado estudio en las mejores manos, en las mejores arquitectas, con nuestra mano derecha que será Daniel, él también tiene mucho potencial.–Hanna, ¿podemos ir adelantando esta maqueta? Quiero que el día de mañana le presentemos a mamá, la nueva casa de energía renovable, los dueños han mandado un material traído desde Alemania y ya lo he investigado, tiene muy buenos comentarios de los usuarios. Tenemos que brindar una nueva perspectiva a los clientes, dando como inicio a una nueva apertura de concient
Hanna BeckerNew YorkLlegada la hora de la comida, ya me había acabado un paquete completo de galletas y un termo con té helado, delicioso que mi amado esposo me preparaba, Devin se encargaba de mantener mis antojos, tanto era así que era capaz de traerme algo si se lo pedía, amaba a mi esposo al ver cómo me consentía, es un hombre tan atento, me derrite tanto amor. Me pregunto que estará haciendo ahora.–Hanna, en qué piensas cuñada, te estaba diciendo algo y te fuiste quien sabe para dónde.Como dice Katie, de repente me había metido en mis pensamientos y no le presté atención a lo que me dijo, por estar pensando en su hermano y en lo que está haciendo con su amigo.–Discúlpame Katie, estaba pensando en comida, ya las galletas no me satisfacen del todo.Ya necesitaba algo consistente, algo que me ayude a sostener hasta la hora de la comida, creo que es en lo que más pienso últimamente, mi bebé cada día va creciendo más y necesita de todos los nutrientes que yo le puedo incluir con
Devin BeckerNew YorkLa noche en la que teníamos que impresionar a Levina había llegado y eso lo sabe perfectamente Daniel, mi amigo no aguantaba la risa al llevar puesto un traje de chef y un gorro de pinche. Yo me encuentro perfecto e impecablemente vestido como chef y también me encuentro un poco nervioso, sé que mi madre se va a poner muy exigente y yo mismo me exijo demasiado para que este evento, marche a la perfección, pues hoy ascienden a Hanna y Katie a tomar el mando del estudio de manera oficial y yo quiero que este evento que es para mi hermana y mi mujer, quede de la mejor manera.–Devin, en serio ¿Es necesario que use este traje? Me siento muy raro – Daniel no se encontraba para nada cómodo – Mejor yo no figuraré en la cena, además no sé si vaya a venir Susan.Por supuesto que ella está invitada y ya se encontraba aquí, es la mejor amiga de mi esposa y por supuesto que debía estar en este evento de ascensos, Susan es una de las invitadas de honor.–Claro que vino amigo,
Devin BeckerNew YorkHanna y Katie se pusieron felices ante mi felicitación, ambas se merecían el puesto y Daniel y yo, muy emocionados, las felicitamos. Sé que, aunque mi mejor amigo no me lo iba a decir nunca, él mejor que nadie sabía que mi hermana me superaba en el estudio, pues ella, desde siempre, ha sido una muy buena arquitecta. Ella ama esto y yo, no puedo decir lo mismo.–Devin, mi amor – Me dijo Hanna – Gracias, por estas hermosas rosas que me has dado y por la cena que montaste para nosotras. Reconozco tu sazón y Levina está encantada.Había sido todo un éxito, mi esposa estaba teniendo un muy buen recibimiento y yo no me iba a quedar atrás sin felicitarla y sin entregarle un pequeño detalle.–Me da mucho gusto que te gusten, amor – La abracé y le di varios besos – Te amo, Hanna y me siento feliz porque tú estés triunfando. Eres la nueva encargada del estudio junto con Katie y honor a quien honor merece.–Qué bueno que lo reconoces hermanito – Dijo Katie a mis espaldas –