Miriam.
Casi no me creía que nos hubiéramos deshecho de todos los invitados, escapando de la fiesta por una puerta lateral, Kevin me agarraba por la cintura, mientras huíamos hacia la habitación que se nos había asignado. Al fin había cumplido lo que, me había prometido.Lo miré, era como un sueño para toda mujer. Su pelo oscuro, y esos ojos azul cristal, eran para desmayarte y despertar con ese hombre dentro de ti, eso debe de ser lo más cercano al cielo, para una mujer virgen como yo.Aunque lo de virgen esperaba que fuera un pequeño error de fabrica que, mi queridísimo marido solucionara lo antes posible. Mire mi atuendo y calculé que esto llevara al menos diez minutos desalojarlo de mi cuerpo.-” ¿Por qué elegí este vestido?, ¡Es qué soy tonta!, da igual voy desnudándome por el camino”- me dije mientras avanzaba de la mano por el pasillo del hotel con el niño de mamá, guiándome.-” ¿Se puede saber qué hace, señora Powell?”- me preguntó mi marido sonriendo mientras yo atacaba los cordones del corpiño.-” Pues ponerte las cosas fáciles niño de mamá. Llevo demasiado tiempo esperando esto para que kilos de tela me lo estropeen.”- dije cuando al fin comenzaron a ceder los cordones y note que mis senos podían moverse con libertad.-” Eres imposible preciosa tendremos una vida muy interesante, me dijo el cogiéndome las dos manos y de un movimiento me alzó en sus brazos. Sólo pude soltar un ligero grito de sorpresa, cuando sus labios tomaron los míos, y el deseo me invadió, dejandome sin argumentos para discutir con él. -” Esta es la única manera de callarte, Arpía, y me encanta dejarte callada, porque así puedo oírte gemir cuando te beso.-” Pues si ya lo sabes ¿Por qué ahora estoy hablando?”- pregunté provocadora.El volvió a devorarme los labios, así que casi ni me dí cuenta, cuando abrió la puerta de la suite.-” Así que aquí es donde estabais, los estaba buscando”- la voz de mi suegra me congeló.-” ¿Qué hacía esta mujer insoportable en mi suite nupcial?, pero ¿Dónde estaban los de seguridad? ¿ Cómo pudieron permitir que este ser se cuele en mi noche de bodas?”- mi mente era un río de quejas. Aunque yo no era la única afectada, la cara del niño de mamá era un poema, miraba a su madre como si fuera un ser de otro planeta.-” ¿Se puede saber, madre, que haces aquí?”- le dijo Kevin dejándome en el suelo mientras yo me agarraba el corpiño para que no se abriera y mis senos salieran de su confinamiento, dandole así un espectáculo gratuito a mi suegra, aunque por unos segundos pensé en no hacerlo, para ver si la madre de Kevin se asusta y se iba.-” Nada vine a darte las buenas noches. Hijo no deberías cargar a tu... digo que no deberías cargarla, no sabes calcular a ojo cuanto pesa y podrías lesionarte la espalda.”!--” Señora la acaba de cagar, no hay nada peor para una Arpía como yo, que le agiten un pañuelo delante”- pensé y sin más solté la última tira del corsé y dejé que este callera dejándome sólo con un sujetador sin asillas un liguero con unas tangas a juego, y unos zapatos de tacón no muy altos, pero si los sufientemente altos, para que mis piernas se vieran esbeltas.El gritó que dio la madre de mi esposo, me dejo claro que había conseguido mi objetivo.-” Eres tremenda preciosa”- oí que me decía al oído mi dulce tentación. Mientras sus manos acariciaban mi cadera, y sus labios se prendían en mis orejas.-” Esto es un escándalo Kevin si no fuera por... deberían darse cuenta de que hay un mayor frente a ustedes”- se quejó la señora Powell tapándose los ojos.-” Pues si ya es mayor, debería saber querida suegra lo que hace un hombre y una mujer en su noche de bodas, y si no quiere asistir a la clase particular que me va a dar su hijo toda la noche, podría hacer el favor de salir de esta habitación, porque a mí no me importa tener espectadores, tengo tantas ganas, y he esperado tanto, para tener a su hijo den…”- Kevin me besó para que no acabara la frase. Lástima hubiera quedado genial, mi contestación, pero si soy sincera sus besos son aún más geniales. Oí un grito de desesperación, y un portazo, pero yo estaba concentrada en que la lengua de mi dios griego entrara aún más dentro de mi boca.-” Eres muy ansiosa preciosa, me encanta desenvolver mis regalos, y tú ya le has quitado la primera capa”- me dijo recorriendo mis hombros con sus labios, mientras soltaba el sujetador y liberaba mis turgentes senos de su prisión. Sentí como que el suelo desaparecía, pero yo aun no podía abrir los ojos, pronto me sentí tumbada sobre una superficie, al abrir los ojos un dios griego había comenzado a desnudarse delaté de mí, mientras me miraba.Tuve la sensación de ser el cervatillo que el puma va a devorar, sabes que estas en peligro, pero deseas que comience cuanto antes.-” Te amo preciosa, esta noche intentare ir despacio te existiré hasta que me pidas más, pero si por lo que sea el dolor es muy fuerte, debes decírmelo, y yo pararé, llevo tanto tiempo deseándote que, puedo terminar haciéndote daño.”- -” No tengo miedo, siempre puedes repetirlo y mejorar”- le dije, y él con la voz ronca, estalló en carcajada, haciendo que yo me humedeciera al contemplarlo y oírlo reír.Se subió sobre mi y comenzó a besarme los labios, mientas sus manos recorrían mi cuerpo, acariciando cada zona que reclamaba su atención, en especial mis pechos y mis muslos.Era tanto el placer que sentía que, sería más que imposible que esto mejorara, hasta que sus labios tomaron posesión de mis aureolas, ahí perdí totalmente el control, si en algún momento tuve miedo o dudas por esa noche se borraron inmediatamente.La mentirosa de Emy nos había descrito que se sentía, pero ni se acercaba a la realidad de lo que mi marido le estaba haciendo a mi cuerpo.Pronto sus manos bajaron a mi entre piernas y mis gemidos se intensificaron cuando, como buen explorador y aventurero, Kevin Junior Powell, encontró el tesoro, y se dedicó a cuidarlo agasajarlo y sacarle brillo, mientras yo me retorcía de placer, y vi como oleadas y oleadas de deseo se acumulaban en ese punto mientras recorrían mi cuerpo, hasta que como una presa cuando se rompe, mis gritos de éxtasis se liberaron, dejándome totalmente flotando en la inmensidad.Cuando creí que todo había acabado el continuó, acariciándome y como si de un intruso se tratara unos de sus dedos entró en mi interior, pero en vez de sentirlo incomodo, o dolorosos, una nueva sensación de placer comenzó a crecer en mi interior.-” Tranquila pequeña. Pronto te adaptaras, te estoy excitado, para que sea lo menos doloroso posible”- me dijo al oído antes de morderme la oreja con suavidad, mientras continuaban moviendo sus dedos en mi interior y su boca succionaba mis pezones.Cuando ya no pude más, rogué que me hiciera suya. Mi cuerpo era como un reactor atómico, que había acumulada tanta energía que tenía que liberarla.-” ¿Estás segura, preciosa?”- me preguntó, pero yo sólo pude asentir, había perdido lo único que nunca perdía, mi capacidad de hablar, ya que era mi arma más peligrosa. Pero ahora esa arma se había quedado sin balas.Se coloco sobre mí y me abrió las piernas.-” Voy a entrar despacio, y …”- no lo deje terminar lo bese para que entrara en mí, de una vez. Lo sentí entrando, era grande, y de un rápido empujó, entró dentro de mí. Sentí, un dolor agudo atravesarme, me mordí el labio para no gritar y aguantarlo. Él se quedó quieto para que yo me adaptar a él.Me miró preocupado. -” ¿Te encuentras bien? Si quieres yo...”- el dolor paso enseguida y al fin recupere el habla.-” Señor Powell ahora somos unos, sólo te queda enseñarme a disfrutar, ¿A qué estás esperando?”- le dije él me sonrió-” Si señora Powell ahora eres definitivamente mía, solo me queda enseñarle la magia que creamos juntos.”- y comenzó a moverse, fue como si me subieran en una montaña rusa que subía, subía, subía, y cada vez estaba más alto, mi cuerpo no se controlaba, mis gemidos se mesclaban con los gruñidos de mi amante, y de repente, cuando creí que había llegado la cima, una la sensación que no había sentido nunca me recorrió entera, haciéndome estremecer de placer.Fue aquí donde supe que era un orgasmo, lo demás sólo fueron meras pantomimas, al lado de lo que este hombre, me hacía sentir.Pronto sus gruñidos se intensificaron, como sus movimientos, y me vi de nuevo subiendo en la vagoneta de la montaña rusa. Sólo pensaba que, si la caída era igual que al anterior no sobreviviría a esa noche, pero mi cuerpo me mando a callar, sólo sintió, y lo sintió todo, hasta que un lánguido y exhausto sueño me invadió, y me dejó dormir en los brazos de ese hombre.Mi primer amante, el hombre que amo, y el único hombre que tocara mi cuerpo el resto de mi vida, pero, no porque lo exija él, es porque, la marca que ha dejado en mi es tan profunda, que nadie podrá borrarla, nunca, ni yo quiero. Cuando me dormí no me di cuenta de que Kevin se había quedado despierto abrazándome. Kevin J.Esta mujer me vuelve loco, me he vuelto adicto a su cuerpo, a sus gemidos, a su olor, a la sensación tan maravillosa de estar dentro de ella.Había imaginado miles de veces nuestra primera vez, pero nada me había preparado para esto, para su virginidad picara, para la fuerza de su espíritu, para el olor de su piel, y la maravillosa sensación de estar dentro de ella, de oírla gemir. De sentirla retorcerse bajo mí, mientas disfrutaba de sus orgasmos, mi mujer lo tiene todo para acabar con mi tranquilidad mental, pero también está para llevarme al mayor de los placeres, a las puertas del paraíso.Deseaba despertar para volver hacerla mía otra vez, pero sabía que esto sería demasiado para su cuerpo, cuando se estaba empezando a adaptar a mí.Le acaricié la cara y le dibujé el contorno mientras me deleitaba con el olor de su pelo, acaricié sus caderas, y la atraje a mi cuerpo para sentir su calor, mientras mis manos inquietas recorrían su cuerpo dormido haciéndole una foto dactilar de él.Me detuve para dejarla dormir, aunque en cierta parte de mi cuerpo aun la reclamaba, yo debía respetar su cansancio y su sueño.-” No vas a continuar, ya que me despertaste, lo suyo es que sigas sin dejarme dormir a cambio de volver a hacerme disfrutar, no crees esposo.”- no pude evitar reírme.-” Lo se señora Powell como siempre ese cuerpo y su lengua de arpía, siempre tienen razón.”- y el resto de la noche se hizo mucho el amor, menos se durmió, más bien poco, espero que mañana estemos vivos, pero si no gracias, señor por esta noche.Kevin J.Pesé que dormiríamos toda la mañana, pero a primera hora Miriam recibió la llamada de sus cuatro de sus amigas, y ahora mismo estaba en la terraza, riéndose como una loca mientras compartí con ellas, lo que había calificado como la mejor experiencia de su vida.En cierta forme mi orgullo de hombre se vio reforzado, que tu mujer admita, que le haces volara, y si por ella fuera estaríamos haciendo eso a todas horas, contribuye a que tu autoestima de hombre salga muy reforzada.Mientras la oía hablar, me dirigí al salón de suite, para pedir el desayuno para los dos. Mientras esperaba que llegaran, recibí el mansaje de mi madre que verdaderamente me desconcertó. Ni casado me iba a librar de sus manipulaciones.-” Espero que hayas cumplido con tu parte hijo y qu dentro de quince días esa advenediza, este embarazada, desde que eso ocurra ya sólo quedara quedar con un trato con ella y que nos firme su cesión de las acciones de Powell Holding, que junto con las que heredaste de tu pa
Miriam.-” Creo que habéis tomado una magnifica decisión, aunque nos sé cómo se lo van a tomar vuestros esposos. Conociendo a mis nietos, seguro que contentos no van a estar. Pero ¿No sería mejor que lo hablaran con ello primero antes de tomar esta decisión?”- oí que nos decía el abuelo Kevin s.-” No creo que sea necesario, ya consiguieron que dejáramos nuestro trabajo, pero no queremos ser las típicas esposas de los herederos, que se quedan en casa y van a las reuniones sociales, Elena tiene su negocio, que gracias a la promoción que hace Powell Holding de su empresa ha crecido de manera exponencial, y ahora es una de las empresas de eventos, más cotizadas del país. Nosotras tenemos también que hacer nuestro trabajo, abuelo, y si queremos, ser de utilidad como futuras herederas, que mejor manera que conocer la empresa desde abajo, por eso Miriam y yo hemos decido, trabajar como secretarias para todo los jefes de los departamentos de todas las empresas del grupo. Así conocer cómo f
Miriam.Después de haces el amor varias veces en la ducha y mientras nos secábamos sobre el aparador del baño, la cena se había quedado fría y tenía que recalentarla, le advertí a mi esposo que no se le ocurriera bajar hasta que no le llamar, mientras volvía a calentaba la cena, porque si no, mis esfuerzos de hoy en la cocina se irían a la basura, ya que no creía que mi cena aguantase otro golpe de calor y supiera igual, ni yo, dado el estado que estaban mis músculos de todo mi cuerpo, y el temblor de mis piernas no ayudaban, después de varias horas de sexo enérgico, Todo ello sin alimentar mi cuerpo, ni saciar mi sed de agua, de lo otro estaba más que saciada. Mientras bajaba las escaleras, notaba como me costaba caminar, mis piernas estaban lánguidas, como perezosas, y doloridas, pero no era igual que como al dia siguiente que hicimos el amor por primera vez, que parecia un robot caminando, muchas veces Kevin tuvo que llevarme en sus brazos.El peor momento fue, cuando entramos en
Jason.-” ¡Qué tenga que estar aguantado los lloros de estos tres, en vez de estar en la cama con mi deliciosa esposa!, en ciertos momentos, odio ser el mejor amigo de mi jefe.”- pensé mientras oía a Michael por quinta vez quejarse de que su mujer quería controlarle la vida. -” Pero no, entiendes hermano es que no confía en mí, sino ¿Por qué tiene que estar ocultando que es mi esposa?, o peor ¿Por qué tiene que venir a las empresas en la que dirijo para conocerla?, ella ya tiene la suya, hay algo detrás de todo esto. Lo sé”- decía Michael mientras bebía ya su tercera copa. Keanu, permanecía serio, no hablaba, se mostraba totalmente taciturno, muy frío e inexpresivo. Era el único que no había hablado de lo enfadado que estaba, porque estaba enfadado, y mucho. Lo sé por la forma de su mirada, por como apretaba la mandíbula cada vez que se nombraba la decisión que había tomado sus mujeres, o que mañana en la mañana lo comunicaría el abuelo en la junta de accionista. Yo sabía que lo qu
Mariam.Aun no me puedo creer que los idiotas Powell, hayan reservado una suite para pasar la noche lejos de nosotras, pero cuando Emily nos lo dijo, y nos dio la idea de trasladar nuestra fiesta a la suite que habían reservado los tres herederos y el marido de Emily, lo hizo porque estaba muy enfada por que el marido de Ariana, ya que según Dartacan habían secuestrado a su marido esta noche. Después de defender su postura, a todas nos pareció la mejor idea.Había unas cuantas promesas que le iba arrancar al niño de mama esta noche, una era que a no ser que fuera un viaje de negocios, al que yo no pueda ir con él, tenía rotundamente prohibido dormir en otro sitio que no fuera a mi lado, no más faltaba que a un mes y medio de casarme, el idiota de Kevin se buscara otra cama sólo, porque si es acompañado me lo cargo a él y a la zorra que tenga en su cama. El niño de mamá sólo podía dormir en la mía, siempre que me hiciera el amor primero, sino ni eso.Cuando llegamos al hotel se nos co
Mariam.Al final, nuestros maridos no se tomaron tan mal la notificación a la junta de accionistas de Powell Holding, que las herederas mayoritarias del grupo, estuviera de incognito recorriendo todos los departamentos de las diferentes empresas como secretarias de los jefes de departamento, para conocer el funcionamiento de las empresas que iban a heredar.También era porque estaban tan agotados, que ni el eficaz Keanu Powell puso objeción. Aunque creo que eso fue más mérito de su esposa, Ariana, que del gran CEO. Lo peor era ver la sonrisa de triunfó que había en la cara del Presidente Powell, al saberse ganador sobre sus esquivos y alborotadores nietos.En cierta forma, los entendía su abuelo había conseguido lo que quería de ellos controlándolos por el único órgano de su cuerpo que él no controlaba, su corazón, desde el minuto uno que hizo que los herederos Powell fueran tras sus presas para poder heredar la empresa que por derecho de nacimiento les tocaba, habíamos jugado todos al
Mariam.-” ¿Se puede saber, Mariam, cuando te he criado yo tan egoísta?”- la frase de mi alma gemela, ósea mi padre, me dejo totalmente descolocada, tras contarle lo que había pasado, porque me había ido de la oficina de Kevin, sin hablar con él, la forma como me había comportado, a mi entender era correcta y pensé que mi padre así lo entendería. Lo miré extrañada ante su pregunta, a lo mejor mi padre no me había entendido lo que yo quería decir.-” ¿Qué dijiste? No entiendo. ¿Egoísta, yo?”- le pregunté. Mi padre me miró muy serio a los ojos.-” Si tu madre en vez de hablar conmigo sobre nuestro futuro y vida juntos, ósea sobre lo de tener hijos, sobre donde trabajaría, o si yo no podía reclamarla como mi mujer en el trabajo, sino tratarla como una desconocida, una empleada más, lo hubiera hablado con tu abuelo antes de conmigo, tú ahora mismo, Miriam Lugo García, esposa de Kevin junior Powell, no estarías aquí. Ni nos hubiéramos casado.”- la frase de mi padre me dejo descolocada, pens
Mariam.- “¿Está segura de lo que quieres hacer, Dogos?”- me dijo la sensata Elena, ósea Aramis.- “Déjala no vez que prácticamente tiene ya la maleta hecha, ya solicitó al personal el puesto de secretaria de dirección en Seattle, va a trabajar con el número dos de la empresa que dirige su marido.”- le respondió por mí, antes de que yo pudiera hacerlo, nuestra pequeña gran líder Pontos, ósea Arianna.- “¿y vosotras que vais a hacer para recuperar a vuestros maridos?”- pregunté abrazándolas mientras Emily nos miraba seria sin decir nada.- “Yo tengo que acompañar al jefe del departamento de logística internacional al evento que se realiza en las empresas de Nueva York. Los chicos se quedan con el abuelo Powell.”- nos dijo Arianna sería, como si nosotras no supiéramos que el serio, e infranqueable Keanu Powell no estuviera en esa ciudad en este momento y, además, tenía que dirigir ese evento y hacer de anfitrión. Las tres no pudimos evitar sonreír ante el descaro de Arianna.- “Pues