Mientras tanto en casa de Wilmer...
Anastasia salió de la habitación en busca del agua para Marleny, pero cuando llegó a la cocina Antonio también dentró y la abrazó.
- Estás hermosa mi amor. - Le dijo este al oído logrando calentar a la chica y haciendo que su parte íntima palpitara pidiendo los labios o el pene de su adorado hombre.
- No me calientes cariño porque tu cuñada me mandó a que le llevara agua y se molestará sino me doy prisa.
- Solo será un poquito gatita, vamos dime que sí. - habló el chico tomándola de la mano y la arrastró hacia un cubículo de la cocina que ahí no lo estaban utilizando en este momento.
El chico la subió en la barra del desayunador y se posicionó entre sus piernas mientras besaba su boca, sin embargo no pudieron hacer nada porque en ese momento Wilmer dentró a la cocina buscando a Anastasia porque la vio venir hacia aquí y él venía a preguntar por su esposa que no la veía abajo.
El hombre le dijo a Marleny que debía hacer sus necesidades en este lugar y que si lo hacía delante de él sería mucho mejor. Marleny que ya no aguantaba más las ganas, intentó agacharse en un rincón pero no podía porque su cuerpo dolía mucho, medio agachada y media de pie se hizo pipí y cuando terminó y voltió a ver, el hombre se estaba desvistiendo y caminó hacia ella. Marleny entró en pánico nuevamente y sus nervios se descontrolaron y llorando le pedía de por favor que ya no la tocara, que su vagina ya no soportaría otra violación más. Pero como siempre al hombre parecían exitarle los gritos de dolor de la chica, la volteó contra la pared con brusquedad golpeandole la cara y la penetró analmente con una sola estocada. La chica más gritaba y lloraba, la estubo torturando así por mucho rato y luego la tiró al piso y le dio varios golpes en el rostro y en la barriga para que no se moviera y siguió abusando sexualmente ella por la vagina, la chica sent
- Wilmer dime en este preciso momento ¿cómo está mi hijo? por favor dime que no me lo mató ese animal. - habló Marleny tomando fuerte de la mano a su esposo, aunque ella ya lo había escuchado decir que el bebé había fallecido pero estaba segura de que había sido un sueño lo que escuchó y no la realidad.Wilmer no hallaba la forma de decirle que su hijo no había sobrevivido, le dolía tanto verla a ella con su llanto. La abrazó y le dio un beso en la frente.- Mi amor tienes que ser fuerte por lo que te voy a decir. Nuestro bebé ya no está aquí. -Le dijo Wilmer tocándole su vientre.- Nooo, se escuchó un grito desgarrador en esa habitación, Marleny se puso como loca intentando levantarse y arrancándose el catéter que tenía puesto en su mano mientras Wilmer trataba de detenerla pero se le hacía complicado porque ella comenzó a gritar y a patalear.- Amor por favor cariño cálmate te harás más daño. - le decía Wi
- Por favor Antonio llámale a Wilmer para que se regrese.- ¿Pero porqué cuñada, qué es lo que pasa? preguntó Antonio preocupado.- Porque yo conozco a Wilmer como se pone de furioso, por favor no quiero que él se manche sus manos de sangre por mi culpa, y otra cosa es que no vale la pena hacerlo por ese viejo asqueroso.Por favor dile que se venga y que todo lo deje en manos de la policía.- Pidió la chica llorando y hasta temblaba por los nervios-.- Tranquilízate cuñada la policía no le hará nada a tu marido. Ellos están de acuerdo con lo que está pasando allá ahorita.-Le dijo el chico, pero ella estaba en su necedad de que su esposo se viniera. Y la verdad lo que a ella le daba miedo es que las autoridades levantaran cargos en contra de él porque seguramente él le estaba golpeando y por eso ella estaba asustada porque no quería ver a su gran amor en la cárcel por su culpa.- Dil
En la clínica...Toc - toc, toco la puerta con los nudillos de mis dedos para que él crea que es alguién más y no se imagine que soy yo.- Adelante.- Escucho que habla con su hermosa voz mi adorable esposo.- Vaya vaya ¿y esta visita tan hermosa a que se debe señora Montoya-. Dice Wilmer levantandose de su asiento y viniendo a mi encuentro.- Pues se debe a que hoy tengo ganas de almorzar junto a mi esposo-. Le respondo.- ¿Y la niña dónde está? Pregunta Wilmer y yo me pongó nerviosa porque seguramente me va a reclamar por no haberla traído conmigo.- La dejé en casa amor y antes de que me digas algo los guardaespaldas se quedaron cuidando de ella y nuestra nana también.- Ahora entiendo todo. ¿Lo que tú quieres es que almorcemos solos verdad?.- Sí cariño y ahorita mismo nos serviré la comida porque debes de tener hambre.- Sí, tengo hambre, mucha hambre pero no de comida. Tengo hambre de tu cuerpo, de tus besos.
Cuando la joven recepcionista le preguntó a Ana en que le podía ayudar, Ana le respondió que quiere ver al abogado Antonio Iraheta y la recepcionista se emocionó cuando esta le mencionó su nombre y se le salió decir que él es el abogado más guapo de ese edificio y más no sabía que con esas palabras mal dichas estaba enfureciendo a la fiera que llevaba por dentro Ana.- ¿Señorita usted conoce al abogado Antonio? preguntó la recepcionista ajena a la situación.- No señorita no lo conozco, pero me lo han recomendado para que lleve un caso muy importante de la empresa en la cual yo trabajo-. Le dijo Ana haciéndose la bruta porque quería ver qué decía esa muchacha acerca de su enamorado.- Pues le han recomendado un muy buen abogado señorita y créame que cuando le digo que es bueno no me refiero solo a su trabajo como abogado-.Dijo la chica mordiéndose su labio inferior y la pobre Anastasia se puso aún más furiosa pero no se lo demostró.Ella ya sabía
Narra Marleny...Estoy emocionada porque hoy por la tarde nos vamos de viaje los tres y según me ha contado Wilmer nos llevará a un lugar muy bonito, pero aún no me quiere decir a dónde es que vamos a ir.Él por el momento anda en el hospital trayendo unos documentos y echándole un último vistazo a los libros contables para verificar que todo quede en orden antes de partir.Ya tengo listas las tres maletas que llevaremos con nuestras pertenencias y ya casi se acerca la hora que Wilmer dijo que saldríamos y él aún no ha venido.Mi teléfono suena y de inmediato respondo la llamada porque es él que me está llamando.Llamada de Wilmer...- Hola mi amor ¿ya vienes? Le pregunto emocionada.- Sí ya casi llego, espérenme en la puerta para irnos rápido porque ya es tarde.- Está bien amor ahorita lo haremos.- Hija vámonos porque papá ya viene-. Le dije a la
Wilmer llamó a su esposa para que le dijera lo que hacía en este momento y así comprobar si era cierto de que había alguien vigilando a su mujer y a su hija.Y efectivamente tal y como aquella persona se lo dijo a su ex esposa, lo mismo le dijo Marleny que estaba haciendo ella. En ese momento el corazón de Wilmer comenzó a bombear de forma acelerada porque sabía que sus chicas estaban en peligro.Pero estaba dispuesto a hacer lo que su ex esposa le pidiera con tal de mantener a salvo a su única familia que eran su esposa y su hija.Marleny le dijo que estaba en el patio jugando con la pequeña Eliana y lo mismo le dijeron a Sandra que ella estaba en el patio jugando con la niña.- ¿Qué es lo que quieres Sandra? preguntó Wilmer preocupado pero se hacía el duro o el valiente para no darle a saber que está con mucho pánico de que les puedan hacer algo a su esposa y a su hija.- Yo te q
Marleny se quedó asombrada cuando Wilmer le comentó que su ex esposa había regresado y que quería quitarle a su hija.- ¿Qué pero como que ella ha regresado, y tú cómo lo sabes o es que acaso ya la has visto y no me lo has querido contar? Preguntó la chica furiosa al pensar que él le había ocultado semejante noticia.- No Marleny, ella llegó hoy al consultorio a buscarme. Yo no sabía que era ella, de lo contrario no le hubiese permitido la entrada o que se me acercara.- ¿Pero no te la puede quitar verdad? porque ya sabemos que los papeles de matrimonio que ella usa y aduce que son verdaderos son falsos, por lo tanto no puede hacer nada verdad Wilmer.- Ese es el problema cariño que ella ahora ya no utiliza esos papeles para chantajearme, ahora es algo peor, ella es miembro activa de una banda criminal y me amenazó con quitarme a la niña si no me separo de ti y me voy a vivir con ella.- Pero tú no le creíste verdad amor esa semejante tonte