Retrocediendo un poco en el tiempo de ese mismo día, Ángelo y Jin habían despedido a la pelinegra.- Bueno quedamos solos – hablo Ángelo, moviendo a su pequeño.- Solos – repitió divertido el castañito.- ¿Qué tal si hacemos un día de hombres? – sugirió Romeo, quien bajaba las escaleras en ese momento.- Esa idea me gusta, ¿te gusta Jin?- Siii.- Bien, ya tenemos un plan – dijo feliz Ángelo, pero en eso empezo a tener dudas - y am… ¿qué hacemos?- ¿En serio? – pregunto divertido Romeo.- Bueno sí, es que tus días de hombres no los puedo imitar para hacer con Jin – dijo recordando su infancia – ya que siempre juegas rudo y recuerdo que varias veces mi madre te regaño por lastimarme – se quejó frunciendo el ceño.- No es mi culpa que seas algo frágil – se defendió Romeo.- Puedo sugerir un día de juegos – intervino Giovanni – Stefanie tiene pedido una piscina inflable y según el clima habrá algo de calor, así que…- Un día afuera, suena bien – dijo Ángelo- Pide globos de agua, tengamo
Los días pasaban de forma eterna y algo tortuosa para ella, mientras maldecía a esa m*****a chiquilla a cada minuto que pasaba, ya que gracias a sus informantes descubrió que “esa” vivía en casa de Ángelo y peor… el maldito niño la llamaba “mamá”. - ¡LA QUIERO MUERTA! – grito mientras arrugaba el sobre que le habían entregado donde se miraban las fotos de ellos, donde parecían una verdadera familia. - Ya cálmate y deja de gritar – se quejó Alfredo, quien con sus manos tapaba sus oídos y la miraba con el ceño fruncido – siempre es lo mismo contigo, ya hartas. - TU cállate imbécil y… - dijo furiosa Alexa. - ¡CALLATE! – le ordeno molesto Alfredo, tomándola de sus cabellos para buscar someterla. - ¡Idiota, me lastimas! – se quejo ella sujetando la mano del castaño para tratar de hacer que la suelte. - Tú estás lastimando mis tímpanos con tus gritos – menciono molesto soltándola a la vez que la aventándola al suelo. - Ash, idiota eso duele – dijo ella masajeando su cabeza. - Ya deja
Al acercarse la hora del evento, todos los alumnos se encaminaron al instituto de San Giuliano Venice, el cual estaba a 3 cuadras de distancia de la posada. Al llegar a la escuela se podía ver todas las decoraciones que le habían colocado para esa celebración, así como las pancartas en las puertas de algunos edificios, listones que decoraban algunos postes de luz, árboles y pilares e igual se apreciaban varios puestos de comida y regalos para los visitantes- Vengan chicos, vamos a nuestros puestos – decía el maestro, que guiaba a sus alumnos a los lugares establecidos para escuchar las palabras de inauguración del director de la escuela anfitriona.- Bienvenidos jóvenes representantes de cada instituto prestigioso de este bello país, como la escuela anfitriona es un gran placer darles la bienvenida a todos y desearles una jornada de juegos exitosa y espero que todos sean justos y rectos en sus acciones para tener un buen juego - hablo mirando a todos los alumnos - entonces solo me qu
Stefanie estaba hablando con ellos sintiéndose cálida al sentir esos mimos y palabras de aliento que recibía de los 3, recordando que era el mismo sentimiento de cuando sus padres le felicitaban por sus buenas notas en la escuela; pero esa emoción desapareció de forma repentina.Mientras estaba hablando solo escucho un fuerte estallido seguida de una onda de aire que la tiro al suelo, donde esa onda expansiva corto la llamada e hizo que su teléfono saliera volando de sus manos a un lugar desconocido.Ella estaba algo aturdida y en eso miro a su alrededor, su visión era algo borrosa y sentía que por un momento no escuchaba nada, poco a poco empezo a calmarse notando a la gente y pasar a lo lejos buscando una salida y escapando del fuego.- ¡Ste… STEFANIE! – ese grito la hizo reaccionar mirando que a su lado estaba ese chico, Bernardino quien le estaba llamando y la estaba jalando para hacer que se pusiera de pie.- Que… - hablo confundida- REACCIONA, VEN – le dijo jalándola para que c
Ignorando la nueva alianza temporal que se habia creado en esos instantes, Stefanie y Bernardino estaban corriendo usando las tapas de metal de los botes de basura como escudos, ya que notaron que había varios francotiradores que les seguían desde los techos.- Que fastidio – dijo molesto buscando tomar lo primero que encontrara en el suelo para lanzárselo, a la vez que se cubría de un nuevo disparo.- ¿Tienes algún lugar en mente para escondernos? – pregunto Stefanie, quien logro bloquear otra bala a duras penas.- La verdad es que no – contesto.- Tch… y perdí mi teléfono en la explosión – se quejó Stefanie, ya que de tenerlo podría llamar e informar lo que estaba pensando.- Descuida, ya pedí refuerzos, con esto – dijo mostrando su cuello donde habia una soguilla de oro con un dije en forma de sol, el cual tenía una piedra roja en medio, la cual en esos momentos proyectaba una luz intermitente – e igual tiene un micrófono así que mandé un mensaje, así que debemos aguantar, en lo qu
Alexa estaba temblando porque no podía reconocer la voz de ese sujeto que la estaba amenazando ni identificar a los hombres que estaban apuntándola de frente, pero a juzgar por la ausencia del apoyo de sus francotiradores podía asumir que esos sujetos eran de otra mafia y los habían matado por hacer disturbios en sus dominios, por lo que busco tratar de poner las cosas a su favor. - Po.. por favor, no me hagan daño yo… yo solo estaba tratando de atrapar a esa mujer. - Suelta tu arma – repitió esa voz que no dejaba de presionar su arma contra la nuca de ella. - ¡Ella… ella puso las bombas! yo la descubrí y trataba de detenerla, ¡lo juro! - No jures en vano – dijo Stefanie, quien recién terminaba de limpiar la tierra de su cara y lograba abrir los ojos, notando la complicada situacion en la que se encontraba. - ¡De pie y las manos donde pueda verlas! – le ordeno uno de esos hombres, quien se acercó a Stefanie para sujetarla del brazo derecho y con algo de brusquedad la hizo ponerse
Por otro lado, Stefanie llego a la casa principal de los De Santis, acompañada de Marcelo para que el medico especial de la familia, la atendiera. Al llegar Stefanie noto la fuerte seguridad del lugar y como era diferente, pero ligeramente similar a la casa de Ángelo. - Por aquí, por favor – les hablo uno de los sirvientes de la casa, para guiarlos hasta el consultorio médico. Al llegar a la habitación notaron que parecía una habitación real de un hospital ya que hasta tenia los mejores equipos médicos en el lugar. - Stefanie – en eso la chica vio que su nuevo amigo estaba recostado en la cama con algunas vendas. - Joven amo no se mueva debe descansar – le reprendió de forma suave la mujer que lo estaba vendando. - Ven jovencita, siéntate aquí – escucho que le llamaba otra mujer, mirando que ella la sentaba en una cama libre para empezar a examinarla – agua oxigenada, gasas, algo de alcohol y… - ordeno materiales mientras examinaba con cuidado el cuerpo de la pelinegra, pero al l
La situación se empezaba a despejar y muchos se sintieron aliviados cuando se notifico que las llamas habían sido apagadas por completo, aunque aún se podía sentir la tristeza en el aire por las muertes creando un trago amargo para todos en esos momentos.Todas las mafias mandaron “ayuda” ya sea porque había un amigo o pariente que tenia a un chico que fue a la escuela a participar en el evento deportivo, donde buscaban presentar su ayuda y ganarse algo de buena reputación para usar a futuro; aunque la verdadera razón era para lograr averiguar ¿qué había pasado exactamente?, ya que hablar de un ataque con bombas era alarmante, mas porque ese lugar era territorio de los De Santis, por lo que aprovecharían su estadía en ese lugar para tratar de conseguir una oferta de alianza con ellos a cambio de su ayuda y apoyo en la investigación, o bien conseguir información de ellos para luego negociarla con el mejor postor.- Entiendo, gracias – hablo Camilo – ustedes igual descansen muchachos, n