Llegó el día de la boda, en casa de Arlenn ya estaban alistándola, su suegra, su madre, Gretta, su padre estaba ya listo esperando en la sala para irse con ella, en la habitación de la novia, parecía que era un tumulto enorme allí, camina para allá, camina para acá, el vestido estaba extendido en la cama con su respectivo velo, Arlenn salió de darse un baño, la esperaban ansiosas para vestirla.

Cuando ya estaba lista en el espejo se reflejaba una bella novia, feliz de ir a la iglesia para casarse con el hombre que ama, un hombre que le brinda amor verdadero con el cual será muy feliz, salieron de la habitación, el auto de su suegra estaba listo allí subió su padre también, los rostros de todos era de felicidad y se fueron rumbo a la iglesia.

En la mansión de los Collins, en cambio, a Hadrien lo tenían como títere vistiéndolo, acicalándole el cabello, Mateo era el principal gestor allí, lo revisaba a cada momento, cuando lo puso frente al espejo dijo.

—Primo tu novia cuando te vea, se v