HOLA, GRACIAS POR SU PACIENCIA, YA LOS CAPÍTULOS ESTÁN ACTUALIZADOS, LAS PERSONAS QUE AÚN NO HAN PODIDO LEER EL 7,8,9 PORQUE NO LES SALE LA EDICIÓN Y LAS PALABRAS CORRECTAS, ME PUEDEN HABLAR POR R E D E S Y DESDE ALLÍ LES AYUDO. UN ABRAZO ENORME A TODXS.
—¿Entonces todo ha sido una mentira?—No es lo que quiero decir.—Anika te confundio.—Si, pero no solo ella, toda la situación se ha convertido en un infierno para mí.—Eso te pasa por mentiroso.—Emma, no.—Ismael, si tu no cambias todo esto, si no dejas las mentiras a un lado, todo va a ser peor más adelante. Quiero que sepas que tus acciones causan más daño del que tus ojos ven.—¿De qué hablas?Mire al suelo, porque no podía decir nada más que eso. Tampoco valía la pena, pero me frustraba enormemente que ellos teniendo la oportunidad de amar, de ser felices, de hacer su vida como querían, no usarán la sensatez que la adultez les permitía para ser felices.Y yo que quería amar, me había enamorado de alguien que no tenía chance de nada con nadie. El conductor me esperaba en la puerta del hotel, como siempre con una sonrisa amable y palabras secas, tal vez si yo fuese una chica normal, una chica con poco dinero, pocas responsabilidades y una vida corriente en un campus universitari
—Está toda mojada —Derek colocó sobre mis hombros el saco de su traje. —No importa, me gusta. El frío hizo que mis huesos dolieran, mis manos temblaban pero cada segundo había valido la pena, mi madre llamó un par de veces hasta que ya resignada por mi mensaje de texto desistió de su misión. “Estoy bien, voy a pasar la noche con unos amigos”. Por supuesto que mi madre dejó de insistir cuando leyó la palabra amigos, ella nos conocía a Ismael y a mi mejor que a la palma de su mano, por lo que aquella simple palabra le dio un indicio de que estaba mintiendo. Yo no tenía amigos pues sólo contaba con Marc, su hermana Danna y mi hermano Ismael. Aunque tengo una personalidad irreverente y casi podría decirse que amable, para mi socializar con las demás personas es una tarea casi imposible. Así q ir entonces sin dudar al llegar a casa el interrogatorio de Alice sería amplio e insistente, mi madre era la mujer más tenaz que jamás había conocido, no descansaba hasta lograr su cometido. —S
—¿Qué haces acá? —lo miré un poco sorprendida y cansada.—Vine porque… Creo que debemos hablar.—No tengo tiempo ahora.—Anika, por favor.—Sam, tengo que hacer maletas, llamar a papá, tengo que… hacer muchas cosas.—Necesito que me escuches.—¿De qué hablas? Se puso de pie, se acercó a mí y me abrazó. Se veía realmente triste, contrariado, dolido. No sabía cómo interpretar esa actitud, pues Sam nunca antes la había tenido. —Voy a tomar una ducha y luego vendré aquí para que hablemos,—Si, te espero.Sam se sentó de nuevo en el sofá, pasó por un lado y me metí de lleno en mi habitación sin saber exactamente qué hacer, quería salir corriendo y refugiarme en mi soledad, pero también sabía que los problemas no se solucionan de esa manera.Tenía que renunciar y alejarme de Ismael, eso era un hecho.—Anika —Sam me llamaba desde la puerta. —Déjame en paz.—Por favor —su voz estaba cada vez más apagada.Suspire y deje que entrara a la habitación, había tomado una ducha rápida y solo había
Fue el sonido de un teléfono celular lo que hizo que Anika se pusiera de pie y limpiaba sus lágrimas, se sentía defraudada, molesta, dolida, abrumada, cansada y sobre todo muy tonta.Aunque se había esforzado enormemente por mantenerse alejada de su padre, siempre estuvo presente en cada paso que dio, mientras ella se creía independiente y libre, Sam fue esa sombra que hizo que su padre llegará a ayudarle o salvarla cuando se veía en aprietos. Al menos eso era lo que ella creía, el dolor y la rabia no la dejaban pensar con claridad. Pero la verdad es que Anika no sabía que Sam se había esforzado por mantenerla alejada de su padre, al principio por supuesto que el chico le pasaba información concreta al padre de esta, datos exactos, pero con el pasar del tiempo, los meses y que su amistad de hiciera más y más grande, Sam dejó de entregar la información que el hombre le solicitaba. Contrario a eso dedicó sus días a divertirse y compartir con Anika, de la que se había enamorado locamen
—¿Estás segura? —la mujer que ayudaba a Anika a limpiar su casa preguntaba anonadada. —Si, lo vas a necesitar más que yo, dile a tus hijos que vengan a ayudarte. Anika ya tenía todo listo para regresar junto a su padre, estaba hospedada en uno de los hoteles del magnate, porque había decidido que lo mejor sería entregar su puesto en las empresas de los Harper correctamente, después de todo ellos le habían abierto las puertas y le habían dado la oportunidad de aprender, aunque la historia con Ismael, su jefe no hubiese terminado correctamente. Mientras tanto había decidido regalar todo lo que componía su apartamento, muebles, electrodomésticos, decoración a esa mujer que le había ayudado durante su tiempo viviendo sola, sabía perfectamente que no iba a necesitar nada de lo que había conseguido por sus propios medios, pues su padre mantenía sus casas y hoteles con todo de última tecnología a disposición de su hija. —¿Cuándo piensas tomar el avión? —Mañana por la noche, hoy tengo q
Alice no esperaba que las cosas se dieran de esa forma, entre sus planes estaba más bien confrontar a los tres jóvenes, pero que estuvieran todos en sano juicio sin embargo no podía negar que había disfrutado del espectáculo, al menos hasta que Aiden se abalanzó sobre su hijo como una fiera hambrienta y sedienta por sangre. —¡MAL NACIDO! —El grito de Aiden, retumbó en los oídos de todos.Stan logró hacerse frente a su hijo que no retrocede ni un solo paso, se quedó tan firme que sorprendió a todos.Anika miró a su alrededor realmente avergonzada y quiso salir de allí pero la voz de Alice la detuvo.—No muevas un solo pie.Danna por su parte se volvió un mar de lágrimas allí luego de desatar aquel desastre, Marc la miraba fastidiado y su supuesto prometido ocultaba de la mejor manera posible la risa que no podía estallar, era un hombre que amaba el drama en todas sus expresiones. Emma estaba ebria, pero no tanto como Danna, por lo que para ella fue fácil deslizarse entre la gente y e
Subirse a un avión para muchos era significado de placer, de vacaciones, de negocios, pocas veces era un sinónimo de tristeza, pero allí estaba Anika en primera clase esperando que el avión en el que se acaba de subir iniciará vuelo en dirección a los brazos de su padre.—Anika —ella contestó su teléfono por última vez, era Ismael.—Ismael.—Gracias —la voz del joven era una mezcla entre vergüenza y felicidad. —¿Por qué? —Anika no quería darle importancia a las palabras de Ismael, pero sabía que ella había sido tan tonta como él, teniendo el amor enfrente se centró en cosas que no eran importantes.—Por todo, fue una buena amistad y eso lo valoró inmensamente. —Espero que seas feliz y no lo vuelvas a arruinar.—Ten por seguro que no puedo cometer el mismo error dos veces.Claro que no podía, Ismael estaba atado a Danna desde el mismísimo nacimiento de esa pequeña diablilla que le había robado el corazón, se sentía como un pervertido cuando sus sentimientos empezaron a creer en su in
Lo más difícil para Anika fue ver la soltura con la que Sam caminaba por entre las personas presentes en el lugar, tomado de la mano de esa hermosa mujer. Por primera vez dudaba de su belleza, aunque ella no era una mujer particularmente vanidosa, sabía que su melena roja y sus impactantes pecas hacían que las miradas masculinas se fijarán en su anatomía de manera más curiosa de lo usual. —¿De qué se trata esto? —le pregunto a su padre con algo de molestia.—Se comprometieron anoche, es la hija de uno de los productores de fármacos más grandes de la India. Poder y dinero Anika.—Entiendo.La chica no quiso decir nada más, no tenía ganas de hablar demasiado del asunto y en realidad hubiese preferido no tener que presenciar aquel acto. Era una ceremonia hermosa, pero a medida que avanzaba aquel evento, la mujer de impactantes ojos verdes no paraba de llorar. Anika no pudo soportar mucho más, mientras la chica lloraba incesantemente, Sam se mantenía rígido con una postura firme y los