MI ESTÚPIDO HERMANASTRO.CAPÍTULO 62.Trataba de no llorar, pero eso era demasiado, ver al amor de tu vida con una pistola en la cabeza no es nada fácil, mucho menos mantener la calma. —Haré todo lo que digan, pero no lastimen a nadie, pueden llevarse todo lo que quieran —susurré.—¡Aquí las órdenes las doy yo! —gritó molesto. Me llevé las manos al pecho porque sentía que el corazón se me iba a salir en cualquier momento, era doloroso. Bajé la mirada e hice conexión visual con Álex, me miró fijamente. »Pon mucha atención a todo lo que te diga, no pienso repetir.Asentí, mientras mordía mi labio inferior con fuerza tratando de ahogar los sollozos. Me tomó del brazo y me acercó a Álex, pero no me dejaron tocarlo. Mis manos y piernas empezaron a temblar, no podía detener las lágrimas. :—¿Cambiarás de lugar con tu noviecito?—sí, sí, sí, si… haré lo que me pidan —respondí sin dudarlo. —Quiere decir que si en este momento te digo que me lo llevó a él, ¿tú tomarás su lugar y vendrás con
MI ESTÚPIDO HERMANASTRO..EPÍLOGO. Pasamos por la clínica porque ya tenían los resultados de los análisis de Álex. —Bueno Álex, al parecer todo está muy bien —comentó el doctor. —¿Entonces porque últimamente todo me cae pesado? No puedo retener nada en el estómago, las náuseas no se me quitan con nada —preguntó Álex confundido. —¿Cuánto hace que usted presenta estos síntomas? —inquirió el doctor. —Una o dos semanas. —Algo pasa, no puede ser normal —comenté.—Álex todos los exámenes están bien — el doctor sonrió—,por tus síntomas podría decirse que estás embarazado.Cruzamos miradas, los dos quedamos en shock, recuerdos llegaron a nosotros, esto nos tomó por sorpresa, era imposible. Lo que el doctor dijo nos dejó en shock, nos congelamos.—¿Usted insinúa que Paola puede estar embarazada? —preguntó Álex. —Por los síntomas que tú presentas al parecer sí. Me puse pálida, ¿cómo podía estar embarazada si me estaba cuidando? Esto me tomó por sorpresa, no sabía ni cómo reaccionar, Ál
𝐌𝐈 𝐄𝐒𝐓Ú𝐏𝐈𝐃𝐎 𝐇𝐄𝐑𝐌𝐀𝐍𝐀𝐒𝐓𝐑𝐎. 𝐏𝐑Ó𝐋𝐎𝐆𝐎.𝐋𝐚 𝐯𝐢𝐝𝐚 𝐝𝐞 𝐏𝐚𝐨𝐥𝐚 𝐞𝐫𝐚 𝐩𝐞𝐫𝐟𝐞𝐜𝐭𝐚 𝐡𝐚𝐬𝐭𝐚 𝐪𝐮𝐞 𝐬𝐮 𝐦𝐮𝐧𝐝𝐨 𝐬𝐞 𝐩𝐚𝐫𝐭𝐢ó 𝐞𝐧 𝐝𝐨𝐬. 𝐄𝐫𝐚 𝐡𝐢𝐣𝐚 ú𝐧𝐢𝐜𝐚, 𝐚𝐦𝐚𝐛𝐚 𝐚 𝐬𝐮𝐬 𝐩𝐚𝐝𝐫𝐞𝐬, 𝐬𝐨𝐛𝐫𝐞 𝐭𝐨𝐝𝐨 𝐚 𝐬𝐮 𝐩𝐚𝐝𝐫𝐞; é𝐥 𝐞𝐫𝐚 𝐬𝐮 𝐨𝐫𝐠𝐮𝐥𝐥𝐨, 𝐬𝐮 𝐡é𝐫𝐨𝐞, 𝐬ó𝐥𝐨 𝐯𝐞í𝐚 𝐩𝐨𝐫 𝐬𝐮𝐬 𝐨𝐣𝐨𝐬. 𝐄𝐫𝐚 𝐮𝐧𝐚 𝐜𝐡𝐢𝐜𝐚 𝐟𝐞𝐥𝐢𝐳, 𝐭𝐞𝐧í𝐚 𝐭𝐨𝐝𝐨 𝐥𝐨 𝐪𝐮𝐞 𝐬𝐨ñ𝐚𝐛𝐚, 𝐮𝐧𝐚 𝐯𝐢𝐝𝐚 𝐥𝐥𝐞𝐧𝐚 𝐝𝐞 𝐥𝐮𝐣𝐨𝐬, 𝐮𝐧𝐨𝐬 𝐩𝐚𝐝𝐫𝐞𝐬 𝐦𝐚𝐫𝐚𝐯𝐢𝐥𝐥𝐨𝐬𝐨𝐬 𝐪𝐮𝐞 𝐬𝐞 𝐚𝐦𝐚𝐛𝐚𝐧, 𝐚𝐥 𝐦𝐞𝐧𝐨𝐬 𝐞𝐬𝐨 𝐩𝐞𝐧𝐬𝐚𝐛𝐚 𝐞𝐥𝐥𝐚. 𝐒𝐢𝐞𝐦𝐩𝐫𝐞 𝐜𝐫𝐞𝐲ó 𝐪𝐮𝐞 𝐬𝐮 𝐟𝐚𝐦𝐢𝐥𝐢𝐚 𝐞𝐫𝐚 𝐩𝐞𝐫𝐟𝐞𝐜𝐭𝐚, 𝐡𝐚𝐬𝐭𝐚 𝐪𝐮𝐞 𝐬𝐮𝐬 𝐩𝐚𝐝𝐫𝐞𝐬 𝐝𝐞𝐜𝐢𝐝𝐢𝐞𝐫𝐨𝐧 𝐝𝐢𝐯𝐨𝐫𝐜𝐢𝐚𝐫𝐬𝐞, 𝐞𝐬𝐞 𝐝í𝐚 𝐬𝐮 𝐦𝐮𝐧𝐝𝐨 𝐬𝐞 𝐩𝐚𝐫𝐭𝐢ó 𝐞𝐧 𝐝𝐨𝐬. 𝐍𝐮𝐧𝐜𝐚 𝐞𝐧𝐭𝐞𝐧𝐝𝐢ó 𝐩𝐨𝐫𝐪𝐮𝐞 𝐥𝐨 𝐡𝐢𝐜𝐢𝐞𝐫𝐨𝐧, 𝐦á𝐬 𝐛𝐢𝐞𝐧 𝐧𝐚𝐝𝐢𝐞 𝐥𝐞 𝐪𝐮𝐢𝐬𝐨 𝐝𝐞𝐜𝐢𝐫. 𝐄𝐥 𝐡𝐞𝐜𝐡𝐨 𝐞𝐬 𝐪𝐮𝐞 𝐞𝐥𝐥𝐚 𝐬𝐢𝐞𝐦𝐩𝐫
MI ESTÚPIDO HERMANASTRO. CAPÍTULO 1 ACTUALMENTE... Les contaré un poco de mí. Mi nombre es Paola Román Montalvo, hija única de padres divorciados, mi padre Aníbal Román, mi madre Estefanía Montalvo. Tengo 23 años. Soy de ojos grandes verde azul, papá decía que mis ojos eran únicos en el mundo, un día azul profundo, otros días verde como las esmeraldas, que me cambiaban como a los gatos. Es lo que más me gusta, mis ojos. Tengo pestañas largas y bien definidas, resaltan más mis ojos. Mi madre los tenía verdes y mi padre los tenía azules, tal vez por eso la mezcla. Soy alta, tengo el cabello negro y largo, unos labios carnosos, piel blanca, diría que una figura esbelta. Actualmente estoy en la universidad estudiando gastronomía. Pero empecemos desde el principio para que puedan entender. Volvamos unos años atrás, para ser exactos hasta mis 16. ❥๑━━━━━━━━━━━━━━━━━๑❥ Mi vida amorosa fue un caos total, crecí llena de odios y miedos. Mi mayor defecto siempre fue el orgullo, era demasia
MI ESTÚPIDO HERMANASTRO. CAPÍTULO 2 Me levanté temprano para ir al colegio, estaba sirviendo mi cereal, cuando alguien me empujó. —¿Qué rayos te pasa? —¡Estúpido! —grité. —¡Que pena querida hermana, eres tan insignificante que no te vi! —hizo una mueca de fastidio. —¡Hermana tuya por favor! —respiré mirándolo fijamente a los ojos con profundo odio igual que él a mí—,ni muerta, usted y yo no somos nada. Pasó por mi lado e hizo que me derramara el cereal encima, gruñí y le grité. »¡TE ODIO! Giró sobre su propio eje y mordió su manzana. —¡El cariño es mutuo querida! Siguió su camino. Como lo detestaba, no entendía cómo lo soportaba la novia, como escuchan, tenía una novia, aunque él cambiaba de novias como cambiaba de zapatos. La verdad no sabía que le veían, si nunca sonreía siempre traía el ceño fruncido, parecía con un limón en la boca en todo momento. Aunque Katia decía que él era guapísimo. Era alto, tenía una apariencia atlética, tenía un físico bien definido y musculoso
MI ESTÚPIDO HERMANASTRO.Capítulo 3Me levanté como era habitual para ir al colegio, evité encontrármelo. Salí con mi madre y después él con Rodrigo, cuando llegó al colegio solo cruzamos miradas llenas del mismo resentimiento de siempre.—Si las miradas mataran, ustedes estarían muertos —comentó Katia. —Tienes toda la razón, un día de estos vamos a terminar matándonos —escupí. —Amiga, ¿estás segura de que lo que ambos sienten es odio? —Sonrió, la miré con el ceño fruncido.—¿Qué insinúas? No ves que cada día nos soportamos menos, me choca tenerlo cerca, odio todo de él, es antipático, engreído, prepotente, amargado, me choca. Podría seguir y no terminaría nunca.Cuando levanté la mirada él entraba con su novia tomados de la mano, Katia solo observaba, yo puse mis ojos en blanco.—Si tú lo dices —se encogió de hombros.—Conozco esa cara, ¿qué estás pensando? —Pregunté. —No quisiera estar en tus zapatos el jueves —hizo una mueca exagerada.—Ni me lo recuerdes, mejor cambiemos de tema
MI ESTÚPIDO HERMANASTRO.Capítulo 4.Seguimos caminando, el calor era infernal, me quité el suéter quedando en un crop top blanco. Recogí mi cabello en un moño alto, Álex se quitó su camiseta, seguimos caminando, él sacó su botella de agua y le daba sorbos dejando escurrir unas gotas de agua por su pecho, mis ojos se fijaron en cada gota que escurría por su cuerpo marcado, cada cuadrito de su abdomen, pero qué rayos me pasaba, por qué estaba mirando al tonto ese, extendió su mano ofreciéndome agua. —¿Toma? —Lo miré incrédula, le dio otro sorbo y me la entregó de nuevo—,toma no te voy a envenenar, solo no quiero que tomes de tu estúpido jugo, o peor te deshidrates y tenga que cargarte, puedes estar tranquila tampoco haría algo para aprovecharme de ti, no eres de mi gusto. Me tragué el orgullo porque tenía mucha sed, tomé tres sorbos, el agua estaba deliciosa, sentía como refrescaba mi garganta, como algo involuntario mordí mis labio inferior, él me estaba mirando o eso creía, tal vez
MI ESTÚPIDO HERMANASTRO.Capítulo 5. ❀ •─────• ❀ •─────• ❀ Narra Álex… Estaba tan concentrado en el camino cuando escuché los gritos de los compañeros sobre todo los de Katia.—¡PAOLA!Mi hermanastra al parecer resbaló y cayó al agua, era un estanque muy profundo, Katia no dejaba de llorar.—¡Alguien que la ayude, Paola se va a hogar! —gritó como loca.—¿Ella sabe nadar? —pregunté con el ceño fruncido.—¡No sabe, no, ella no sabe nadar, no sabe! — respondió aterrada.Todo era caos, gritos, desesperación. El profesor y Juan estaban muy arriba de nosotros, yo estaba como en shock. La odiaba, muchas veces quise que desapareciera, pero esto era una rara sensación, sin pensarlo me lancé al agua, sentí el vacío al caer, ya que estábamos a varios metros, al entrar al agua empecé a nadar lo más rápido que podía, alcancé a tomarla de un brazo, ella trataba de luchar con las pocas fuerzas que tenía, sentí el pánico y su angustia, se aferró a mi cuello con fuerza, la sujeté de la cintura y en