Kiara lo miró a los ojos directamente, intentando encontrar esa frialdad que había ese día cuando la miró, pero aunque no había nada, solo preocupación y amor en los ojos de Dereck, ella no se sintió bien, quería alejarse de él, aunque al recordar a Alyssa, tuvo que voltear para ver si ella seguía junto a ellos para no preocuparla más con su reacción, pero afortunadamente la niña ya se había adelantado a entrar en casa y no había presenciado nada.

— Dereck necesito que me sueltes. — Musitó ella finalmente con voz rota y Dereck la miró cada vez más desconcertado, pero su corazón como si entendiera las cosas un poco más que él, se apretó.

— Kiara, por favor no me alejes y dime qué pasa para que podamos arreglarlo. — Insistió Dereck sin querer alejarse, sintiendo que su corazón colgaba de un hilo en este instante, porque la forma en que ella lo estaba mirando no le gustaba y sabía que algo acababa de cambiar, pero no quería que eso pasara.

Necesitaba arreglarlo, porque quería que l