Micaela Stevens.Jamás pensé que viviría una situación así en mi vida, por alguna gracia divina me encuentro lejos de todos los sucesos que ahora se encuentran azotando al mundo, pero aún así estar interna en el medio de bosque a la expectativa de que en cualquier momento nos ataquen, me parece un poco escabroso.Me sorprendió en sobremanera cuando ví autos todoterreno y helicópteros viniendo justo a la dirección en dónde me encontraba, no voy a negar que me también me asusté, desde de muchas explosiones y que la mitad de mi equipo de seguridad me abandonará me quedé en standby a la espera de información por parte de las personas que quedaron a mi lado, los cuales todos eran súper jóvenes, así que no era muy difícil deducir que los que se habían marchado eran los padres de familia.Cuando mi suegra y demás personas bajaron de los diferentes vehículos sentí alivio, pero aún no sabía que era lo que ocurría, así que luego de un abrazo algo tenso tuve que preguntar, en lo que sus ojos se
Siento un ligero dolor en el lado derecho de mi pecho y se me caen algunos platos causando un estruendo, el dolor se intensifica y creo morir, me tocó el vientre, y a mi mente llega Baltazar, algo no está bien con el.—Micaela!!! — Veo entre lágrimas a Alexa, no la había visto antes —¿Es el bebé?Niego con la cabeza — Baltazar.Lleva las manos a su boca, pero se repone y me ayuda a levantarme, mi suegra también llega, la punzada sigue allí, latente, por lo que me llevan a la habitación…—Necesito… yo necesito saber si está bien.—No hay comunicación con los que están al frente, tengamos fe en que la reina luna lo protegerá — Alexandra no lo dice muy convencida.—Dejenme sola, por favor — ambas se ven entre ellas y es obvia la confusión en sus expresiones, —por favor avísenme si saben algo — Asienten y salen.Mi madre no era religiosa, creía que había un ser superior que había Sido el encargado de crearnos y que luego se había olvidado de nosotros, su crianza no fue la mejor, sus padr
Baltazar LicaonEl dolor en mi pecho no merma, golpeó mi cabeza, no es momento para distracciones, no es momento para sentimientos, están masacrando a mi manada, y no puedo estar pendiente de lo que haga Micaela, he hecho suficiente por ella, le he dado lo que jamas nadie le dara en su miserable vida, no pienso perseguirla una vez mas. Llamo a mi lobo y no aparece, pero estoy preocupado de estar aquí y no al frente de la batalla, debo acabar con eso gusanos. Salgo a las afueras de la cueva y puede ser que con el contacto de la naturaleza mi lobo decide aparecer. La tristeza que siento por parte de Micaela me hace meterme un segundo, sigo su olor de manera cuidadosa para no alertarla por mi presencia y la consigo sentada en una piedra, sus manos sobre su estómago y su rostro bañado en lágrimas. Mi lobo llora con ella, Pero tomo el control antes de que lo escuche, soy el Baltazar Licaon, Alpha supremo de mi especie, desendiente directo del primer Licaon, si fallo, podría ser el fina
Micaela Stevens Camino descalza de entre los árboles, sentir la naturaleza entre mis dedos, acariciando mi piel me hace sentir en paz, como si no hiciera falta más nada. Llego a un pequeño claro y por más que haya visto antes hermosas vistas como está, no deja de impresionarme lo utópico que parece y no es, es real! Tengo un tepuy al frente y de el salen decenas de cascadas. Me gustaría acercarme a alguna, Pero estoy frente a un precipicio. "Que se sentiría volar, que viento envuelva por completo tu cuerpo mientras caes"Tocó mi vientre y suspiro, debe ser una sensación increíble, y no tengo alas para hacerlo, así que solo me quedare con el pensamiento de que la sensación debe ser maravillosa. Sigo mi paseo y me consigo con una enorme pitón en un árbol, mi corazón palpita tan fuerte por la impresión que doy paso en falso y caigo al por una pequeña zona inclinada hasta llegar a uno de los ríos, en este el agua es abundante y mis pies no tocan el suelo, me esta arrastrando y duras
Micaela Stevens Lo sé, al abrir los ojos lo siento o en mi caso ya no, es un vacío intenso, tan profundo que me cala lo mas interno de mi ser, llenandome a su vez de una tristeza tan pesada, que es imposible de contener. Jadeo al sentirme atrapada, por un momento no siento mi cuerpo, las luces blancas me indican que estoy de regreso en la cueva y eso no me causa alivio, todo lo contrario, he perdido lo más valioso que podría haberle dado a esta manada, no se que será de mi ahora que no tengo al heredero del alfa supremo, por la reina luna, podrían acusarme de hacerlo intencional, podrían llevarme a la horca por eso. —Oh no...Mi cuerpo comienza a tomar control y trato de levantarme, nadie llega a ayudarme, eso quiere decir que estoy sola, puedo escapar. Mi alivio es momentáneo, sus ojos están en mi, es el mismo que conocí aquel día el londres, tanto odio por mi, por ser la especie que soy.—Lo siento — la palabras salen de mi boca sin pasar por mi cerebro — Yo, yo me caí, no se...
Baltazar Licaon Siento que no puedo respirar, me duele el pecho, joder, me estoy asfixiando! Micaela queda dormida luego de que le aplican la inyección. ¿Que estoy haciendo? Busco aire Pero mi garganta está cerrada.—¿Alfa, se encuentra bien? No registro quien me habla, solo se que no puedo respirar y que necesito salir de allí, me convierto en lobo dentro de la habitación haciendo que los que atienden a Mica caigan o tropiecen, la puerta hace un estruendo al momento de pasar por allí. No veo, no escucho, no registro a nadie, salgo corriendo a toda velocidad de la cueva, es un ataque de pánico, los tuve cuando era niño, hacia mucho de que no me ocurría. Mi lobo toma el control y dejo que corra a toda velocidad por la naturaleza de mis tierras, las mesetas se elevan una más grandes que otras, las cascadas con su sonido hacen mi interior comience a calmarse, subo a lo alto de la cascada mas grande del mundo, Kerepakupai Vená, conocida como el maravilloso "Salto angel" Tomo respi
Micaela Stevens Odio su maldita sonrisa de superioridad, sonríe de lado como la pregunta que le hago fuera lo mas estúpido que ha escuchado en su vida.—No tienes salida de aquí y lo sabes, eres mi esposa y necesito de ti ahora. Arrugó la cara, no se de que tontería me habla. —Debo partir, necesito que recibas a los lobos que vienen en camino y organices la manada para que se mantengan dentro de la cueva, aquí somos invisibles a cualquier tecnología que nos quiera rastrear, Robert como mi beta me acompañará, por lo tanto como luna de esta manada te quedas al mando. —Solo lo dices porque no quieres que escape mientras te vas con tu amante asesina. Aprovecharé cada oportunidad para recordarle lo mierda que es, si embargo el niega con la cabeza y sigue con su estúpida sonrisa. —No se de que otra manera hacerte entender que después de que un lobo se vincula con su mate es imposible estar con otra pareja. Veo a su madre que asiente con la esperanza de que por fin entienda y que acep
Micaela Stevens.Respiro profundamente todas las veces que mi mente me permite antes de perderme en mis pensamientos, a la vez de que pierdo la secuencia que siempre llevo para tranquilizarme.No sé si las hormonas de un embarazo que ya no existe, tiene que ver con este sentimiento de tristeza profunda que no se va, lo primero que hay que hacer es identificar el detonante y luego eliminarlo, eso leí hace tiempo en un reportaje de psicología que tenía que ver con la depresión.Mi detonante tiene nombre y apellido, eliminarlo... no será sencillo, pero ahora que se ha ido lejos si lo facilita un poco, no he hablado con el, eso ya es un paso.Pediré el divorcio cuando vuelva, estamos en pleno siglo XXI, Es más humano que lobo, no puede oponerse por siempre a algo lógico.Termino con mi caminata de relajación y vuelvo al refugio, hay un revuelo con los niños más pequeños, cada madre ha tomado una función para mantener el orden, pero los niños aunque no son muchos, les ha dificultado la tar