Odiaba esto, parecía una invalida que tenia que depender de todos para todo, y lo odio. Lo peor, es que tendré que ausentarme de la universidad hasta que me recupere totalmente. Comienzo dar algunos pasos por mi misma pero los golpes internos aún me impedía hacerlo, apenas podía sostenerme de pie por un minuto.
Bastián, aun después de que le dije que lo nuestros se había acabado, persistía pidiéndome una oportunidad de enmendar lo que pasó, jamás fue su intención lastimarme, que no fue él quien dijo aquello.
Dijo que pronto me daría la explicación a su comportamiento estúpido de esa noche, no sabría que hacer, pues, si le daba la oportunidad, no obtendría lo que Ethan me prometió, mis recuerdos y la verdad de todo.
Pero mi corazón al verlo tan preocupado por mí, me hacía débil, más cuando sonríe con dulzura al verme y se comporta como todo un caballero tal y como Ethan lo hizo.
—¿E
—E-Es.. que.. no encuentro.. a mis papas. —dije mientras admiro su belleza.—¿Quieres que te ayude a buscarlos?.—Si. —chillé feliz.No entendía porque pero no le tenía miedo a pesar de que era un desconocido que podría ser peligroso, pero no me sentía en peligro con el a mi lado, sentía que podía confiar en él. Caminamos por unos minutos hasta al fin pude ver a mis padres preocupados por mi.—Gracias príncipe. —dije con una sonrisa.—Así, con esa sonrisa, luces hermosa.Salí corriendo llamando a mis padres, les dije con emoción que un príncipe me salvó y ellos me vieron confundidos así que señalé en donde estaba pero cuando lo busque con la vista, el ya no estaba.Me despierto exaltada mientras pienso en el sueño, al escuchar un quejido veo a Bastiá
—¿Qué haces aún afuera?. —Bastián.. —dije al verlo. —Yo.. no lo sé.—¿Cómo que no sabes?. —se ríe. —Ven, te llevaré a tu salón. No quería decirle lo que estaba pasando con su hermano porque estaba segura que no le importa en lo absoluto lo que pase con él, pero yo si deseaba saber que esta bien y que no es cierto lo que Ana dijo sobre él, algo dentro de mí me decía que el no era así.Mis muletas se caen mientras mi cuerpo se congela al sentir una punzada asfixiante en mi pecho, un grito de dolor salió de mi cuando siento que me están apuñalando en el corazón. Ni si quiera me había dado cuenta en que momento habíamos llegado a la casa de Bastián, lo único que podía sentir era un dolor que me quema y me mata, quería que me arrancarán el corazón para dejar de sufrir.—¡¿Qué pasa?!.. —escucho la voz de Zefora bajando las escaleras. —¿Qué le pasa?. —No lo sé, de repent
—Me quiero ir casa. —espeté nerviosa. —Por favor.Suspira. Se levanta dándome la espalda. Al salir de la habitación, tomé mis muletas para colocarme de pie, me acerco a la ventana logrando ver a Ethan antes de que se subiera al auto, su semblante en verdad que atemoriza.No era la misma mirada que recuerdo cuando me invitó a su casa o cuando era niña y le robé descaradamente un beso. —Vamos, iré a dejarte a casa.Al ver a Bastián, este se encontraba realmente molesto y decepcionado, me subo a su automóvil y durante ese tiempo no me dirigió una palabra y todo porque no quise hablar del tema. Al estar frente a mi casa papá sale y me ayuda con mis cosas, molesto me dice que no debí apresurarme en asistir nuevamente a clases y creo que tenía razón. Fue demasiado para mí.—¿Pasó algo?. —cuestiona al ver que Bastián se marchó cuando el tomó mis cosas. —No te imaginas papá, no puedes imaginarlo.De nuevo en mi habitación, tomé mi celular y
Intenté comunicarme con Jessica, pero siempre me enviaba al buzón de voz, estaba preocupada por ella. Tenia dos días desaparecida, su padre dice que ni siquiera come después de que llega de la universidad, cada vez que la busco, ella me evade, las clases que tenemos juntas, ella no se presenta, comenzando a preocuparme de que ella me odia enserio porque le dije que mi ex novio es su alma gemela.Las cosas han empeorado para mi, Bastián ya ni siquiera me habla, me evade al igual que Jessica, Intenté hablar con él pero me dijo que no estaba para perder el tiempo conmigo y eso me dolió porque prácticamente me dijo que hablar conmigo es una perdida de tiempo.Sé que está molesto porque me negué a responderle y como siempre se hace ideas estúpidas en la cabeza y estoy segura que cree que estoy saliendo con el y su hermano. En mi punto de vista no es así, solo porque Ethan y yo
—Tenemos que irnos.Tomé de la mano a mi amiga pero Harvey me detiene y me exige una explicación a lo que vio, no estaba para perder tiempo así que dejé que viniera con nosotros. Necesito saber lo que esta pasando y solo hay alguien que me lo puede decir.Al estar dentro de su casa fui directamente hacia su habitación y cuando abrió la puerta encuentro a todo sus brujos rodeándolo y recitando una clase de conjuro entre ellos estaba el vagabundo quien estaba liderando al grupo de brujos.Parecía que Bastián luchaba contra algo, como si luchará consigo mismo pero parece resistirse, gruñe como un animal que está siendo enjaulado y lucha para liberarse pero no lo logra y cae rendido y exhausto sobre el suelo.Dos brujos se desmayan y otros los tomaron y los sacaron de la habitación para dejarnos a solas con el y su ahora brujo, Benny quién lo ayuda a sentarse sobre su cama. Zefora trae consigo una toalla y se la da para limpiar el sudor de su rostro.¿
Lo que dijo aquel brujo, no me lo esperaba, me esperé muchas alternativas pero jamás me esperé que para ayudarlos debía morir y ofrecer mi vida por ellos.Eso me dejó tan desconcertada que aún ni siquiera podía procesarlo por mi cabeza, estaba tan unida a ellos que no había otra forma para romper nuestro lazo. No. Debe haber alguna otra forma de romperlo solo que tal vez ellos no saben.—¿Querías hablar con nosotros hija?. —había llamado a mis padres para hablarles sobre mi ingreso los fines de semana a la academia. —¿Hija?.—Quiero decirles que quiero ser una cazadora y quiero ingresar a la academia.Ambos se ven entre sí, luego me ven a mi.—Hija para ser parte de la academia debes ser elegida por ellos.—¿Qué quieren decir?.—Ellos, no te han elegido Hija. —ambos se colocan de pie y me dan un beso de buenas noches. —Haz aún lado todo este mundo Hija. —mamá acaricia mi cabello. —Lo único que tu papá y yo queremos es que tú puedas vi
¿Que me esta pasando?, El deseo esta creciendo de forma asombrosa, mi piel se eriza cuando sus fríos labios tocan mi piel. Mi cuerpo arde deseando más de lo que sus labios provocan en mí. Cuando sus labios rozaron los míos todo se desencadenó.Lujuria y pasión arden dentro de mí, escucho como arranca mi blusa dejándome solo en escote, gruñe cuando muerde mi clavícula, sus dedos se aferran a mi cintura mientras en un segundo nos encontramos en la cama de mi amiga.—¡No, espera!. —dije con la poca cordura que tenía. —No puedo hacerlo, no puedo engañar a Bastián.Su mano derecha me toma de la nuca mientras mordisquea mis labios avivando aún más el fuego que nos intenta consumir.—Esto no es un engaño y lo sabes. —mi cuerpo se estremece cuando su mano baja lentamente hasta detenerse en mi vientre. —Tu
—¿A quien eliges?.No puedo elegir por uno de ellos. No puedo hacerlo. Ambos me ven, esperando que tomé una decisión definitiva pero no quería hacerlo. Observo sobre mis pies mientras me doy cuenta que estoy a la orilla de un precio.—¡Alira!..Siento que algo me tomó de la cintura atrayéndome hacia atrás. Ambos intentan llegar a mi al ver que estoy por caer. Ambos me toman de cada mano, pero al ver que algo estaba detrás queriéndose apoderar de ellos, hice lo mejor para ambos.Gritan mi nombre mientras intentan arrojarse para poder salvarme pero Jessica y Zefora se lo impiden, ya era tarde, no podían hacer nada por mi.Al ver mis manos, veo que sostengo una rosa que nunca antes había visto en mi vida, entonces deduje que era la Rosa Lunar, esta estaba cubierta de sangre. Mi sangre. Comienzo a escupir sangre por la boca logrando asfixiarme.Al sent