POV de Carmen
El abrazo de Alejandro me proporcionó una mezcla de alivio y temor. **“Estás aquí. Estás a salvo,”** dije, tratando de calmarme, aunque el eco de la lucha resonaba en mi mente. Las sombras del almacén parecían cobrar vida, recordándome el caos que acababa de presenciar. **“Pero nosotros… ¿qué haremos ahora?”**
**“Tenemos que salir de aquí, Carmen. No podemos quedarnos,”** dijo Alejandro, su voz era un faro de determinación en medio de la oscuridad. Supe que su mente estaba trabajando a mil por hora, formulando un plan, buscando una salida.
**“¿Qué pasa con Javier?”** pregunté, sintiendo una punzada en el corazón al recordar su rostro. Había sido un amigo, y ahora, el miedo a que estuviera en peligro me aterrorizaba.
**“No sé. No podemos pensar en eso ahora. Solo debemos salir,”** respondió Alejandro, y aunque comprendía la lógica detrás de sus palabras, no podía evitar sentir una profunda preocupación por él.
Nos movimos juntos entre los restos del almacén. Las luces par