Ashley El poder me recorre por completo al sentir como tengo el control de Hera y eso me hace sonreír, porque me siento regia ante estos poderosos alfas... Aunque no sé si Hera también lo sea, lo dudo, si nos guiamos por lo tradicional en los lobos, aunque me he dado cuenta que no todo influye. Los hombres lobos tienen sus propias reglas. - Nadie te da el derecho de tocar a mi esposo.- hablo y sus ojos brillan, al igual que los de su padre. Puede sentir sus ganas de acabar conmigo, y puedo sentir la excitación de Uzziel al verme.- Si no se quieren arrepentir, recomiendo que vayan tranquilos a la reunión, que para eso vinieron, ¿Cierto? -No te permito qué...- trata de hablar el Alfa y yo me enfoco en él, queriendo acabar con su poder, Pero Uzziel lo interrumpe - Te recuerdo que estás en mi casa, en mi territorio. Si a mí esposa le da la gana de hablarte como se le antoje, tu deber es callarte. Y tú, no te avergüences más.- mira a Hera.- Ni siquiera haces falta en esta reunión.
Uzziel La situación en la que estaba metido, no sabía si manejarlo con gracia o con ira, porque realmente era surreal, aunque no podía evitar pensar que esto no me debía suponer. Las brujas por herencia son problemáticas, y lo que acaba de pasar, es la muestra de ello. Sin embargo, Nila tocó un punto sin retorno, y es que ahora todos dudan de mi, porque después de todo, soy un alfa joven, cuya llegada al trono fue simple para ellos. Mi padre, él fue el verdadero alfa, al que todos respetaban y querían seguir siempre. Lo que él decía era ley, sin importar que estuviese equivocado, todos los seguían a ciegas. Cuando murió hace años por vejez, yo fuí quién terminó con su vida por petición propia. Yo era el hijo mayor, y el deber de tomar el poder, me pertenecía. Nadie estuvo de acuerdo con eso. Todos me veían débil, más débil que Asclepio, que siempre demostró lo buen alfa que sería según la fuerza se requería. Sin embargo, las últimas palabras de mi padre fueron claras. -Para
Ashley Yo sabía que todo era complicado, solo que no sabía que tanto era. Después de un rato de negativas por parte de todos los lobos, básicamente se quedó en un acuerdo absurdo, que me olía sospechosamente a trampa. Todos estaban racios a ir a buscar a los brujos celestiales, ya que repetían una y otra vez, que un ejercito de lobos era completamente vencible si se trataba de luchar contra brujos celestiales, que eran los mas fuertes de su raza, y que nunca jugaban limpiamente. Yo no entendía muy bien el tema de brujos normales y brujos celestiales, hasta que Denara me explicó que ella era en realidad una bruja normal que anduvo casada con un brujo celestial que la engañó, la corrió de su ciudad natal, la traicionó de tal manera que casi no vive para contarlo, hasta que consiguió su salvación en aquel pueblo del Amazonas. También me contó, que los brujos normales tienen límites a la hora de conjurar hechizos, y que los celestiales realmente podrían hacer muchas cosas, como tra
Uzziel Ashley se levanta sudada y vomitando. Sus ojos llorosos y ojeras me hacen correr para buscarle medicina en la enfermería, dónde la doctora me da una caja de cosas que ella se debe tomar, porque al parecer, hemos sido demasiado irresponsables con el cuidado del bebé. Me da desde ácido fólico hasta pastillas que al parecer tienen zinc y todo, también pastillas para las náuseas y muchas vitaminas con letras. Corro hacia la cocina y el chef me ofrece un plato con panqueques con queso y frutas. Le agradezco porque sé que Ashley ama ese desayuno y corro de nuevo hacia la habitación, dónde escucho a Ashley cantando en el baño. Entro y la veo normal, incluso me dedica una sonrisa. -Ya me siento mucho mejor.- asiento lentamente. -Me soy cuenta.- mis ojos recorren su cuerpo lentamente y entro sonriendo. Si se siente mejor, debo aprovecharme de eso, no puedo evitarlo y por la sonrisa que ella me dedica, también se quiere aprovechar de eso. Entro con el agua cayendo sobre mí y Ashl
Nila Me alejo lentamente de la puerta, sintiendo por primera vez esa sensación a la que tanto le he huido durante todos estos años. Culpa. No entiendo porqué ahora está presente, porque durante todos mis años de vida, me han enseñado y he aprendido a la perfección, que solo importamos nosotros, las compañías que nos encontremos en el camino de la vida, son solo eso, compañías, decoraciones de navidad que al llegar enero, se botan a la basura, o si te sientes un poco sentimental, guardas hasta que deba ser usado nuevamente. Para mí, todas las personas son así. Y la culpa que siento en este momento, debe ser eliminada, porque yo tomé la decisión de entregar a Ashley a la criatura infernal como pago para que me diera el control total de los brujos celestiales cuando llegara el momento. Una guerra se aproxima. Una guerra donde Uzziel será mi mejor arma, porque esa promesa que acaba de hacer a su esposa, es la que me dará el control total en su momento, porque cuando llegue la hor
Ashley Después de desayunar y perder de vista a una molesta y problemática Nila, fuí directo a la enfermería, donde me encontré a Asha y a Alexa, junto a una Lana protectora. Emma también está aquí, solo que ella se encuentra en una misión diferente, por lo que puedo notar. Sus ojos no se apartan de Lana, y todos los notan. Por lo que me contó Uzziel, tiene completo sentido que ella esté en modo precaución, ya que una ninfa los traicionó cuando trataban de encontrarme, y de paso, dejaron a Asclepio, el imbécil, atrás. Eso no me cae para nada mal, pero mi querido esposo esa situación lo tiene pensativo. -Hola, ¿Cómo están? - saludo a Lana, y le toco las manos a las que salieron más heridas. Yo pensé que Asha estaba bien, porque la última vez que yo la había visto, fue adentrada en el bosque, lejos de todo el desastre. Sin embargo, la tonta se fué detrás de mí, y yo no miré a atrás, por lo que no pude notar cuando la atacaron entre varios. - Estamos bien. De maravilla... Tu casa
Ashley. Me giro para ver a Uzziel y no puedo evitar sonreír. Sintiendo una corriente subir por mi espalda. Ahora, cada vez que lo veo, no puedo evitar emocionarme y sonreír al pensar que realmente somos esposos, y que estamos esperando un hijo. - Demasiado tarde para ir a pasear con Nila.- habla Emma. Ella estaba chismeando cuando yo le pedí a mi hermana que me acompañara al pueblo. Lo que no logro entender, es el porqué de ocultarle esa información a Uzziel, cuando todos estamos metidos en el barro hasta el fondo. Es mejor que todos estén informados, porque si lo que sea que me está rodeando es peligroso, prefiero que todos sean precavidos. No quiero que nadie salga herido por mi culpa, no podría cargar con esa culpa. - La Vi hace rato caminando alrededor de la piscina. Denara está con ella.- todos se miran. -A Denara le llama la atención las almas perdidas.- habla Lena, señalándose. Asha y Alexa asienten, yo también las acompaño. Literalmente era un alma perdida cuando los enco
Uzziel Llevo a una Ashley confundida lejos de la habitación, donde todos se quedaron todavía más confundidos, excepto la chica llamada Asha, que por lo que Ashley me comentó por encima al salir de la habitación, es que esa niña de apenas 15 años como mucho, es una mujer mayor en realidad, con un don impresionante que le permite ver muchas cosas, dónde pocos logran ver algo. La llevo a mi oficina y le pido a una chica de servicio que me traigan dos tazas de chocolate caliente, con fresas picadas y dos trozos de tortas. Ashley sigue perdida en sus pensamientos, hasta entramos a la oficina y ella parpadea, ubicándose en el lugar. - ¿Estás bien? - pregunto y me siento en el sofá, dejando que ella se asome encima de mis piernas y coloque su cabeza encima de mí hombro. La abrazo y le transmito toda la tranquilidad que está en mi, aunque debe ser poca, ya que la acción que cometió en esa habitación, fue realmente sorprendente y extraña. Algo en mí no quería procesar que ella tenga una h